Loving A Sanderson (1993)

011, Sabrina la bruja

Sabrina se encontraba en la casa de las hermanas Sanderson atada a una silla.

Sarah abrió la puerta.

—Vienen los niños. —comunica a sus hermanas.

—¡Bien! Bien hecho Sarah. —le felicitaron Mary y Winifred.

Dani intentaba salir de la silla desesperadamente a la cual estaba atada

—Dani para, te vas a lastimar si sigues así. —le advierte Sabrina.

—¿Y qué más da? Si no lo intento, ellas ¡me comerán! Y a ti ¡te matarán! —dijo Dani enfadada.

Dejarme salir de aquí. —Pobre Binx que estaba en una especie de bolsa de tela, enganchado en el techo.

Las brujas intentaban darles algo a dos chicos que estaban encerrados en unas jaulas.

—¡Voy a vomitar! —dice uno de ellos.

—¡Abre la boca! —pide Mary.

Y Sarah no para de molestar al otro chico con un tener gigante.

—¡No más dulces, por favor!

—Pronto la vida de todos vuestros amigos serán mías, y yo volveré a ser joven y hermosa para siempre. —dice Winifred.

—¡No importa lo joven o vieja que seas! ¡Has vendido tu alma! ¡Eres la mujer más fea de todos los tiempos, y tú lo sabes! —dice Dani defendiéndose.

Winifred hace un tipo de gruñido que hace callar a Dani.

—Tú vas a ver morir primero a tu amiga y luego te mataré a ti.

—¡Ya está lista! Abridle la boca a Sabrina. ¡Vamos a recuperar nuestro poder! Un poder que ella no merece.

—Encantada. —dice Mary.

—Sabrina no lo bebas.

—¡Tú cállate! Binx. —dice Winifred.

—No lo bebáis chicas.

Sabrina trataba de cerrar la boca, pero eran tres contra una boca cerrada por un segundo la abrió y se bebió el líquido verde.

—NO SABRINA, ¡NO ME DEJES! —dijo Dani al ver a su amiga muriendo.