Cenicienta y los Cuatro Caballeros [CINDERELLA AND FOUR KNIGHTS]

CAPÍTULO 12

"¿NUESTRA casa?"

"Sí, lo sabía... No puedes, ¿verdad? Porque si vengo, la situación se pondrá mal", dijo Yeong Hyeon con tristeza.

"No, eso no es lo que quise decir. Sólo me sorprendió que de repente dijeras que vendrías", dijo Ji Woon.

"Entonces, ¿está bien? Te cocinaré una buena comida. Hace poco aprendí a cocinar en Internet. Aunque no estoy segura de sí es buena", dijo Yeong Hyeon con un tono de voz ligeramente elevado.

Ji Woon sonrió débilmente mientras miraba a Yeong Hyeon. "Debe estar delicioso. No hay nada que Nuna no pueda hacer".

"¿Cuánto tiempo quieres llamarme 'Nuna'?"

"¿Qué?"

Yeong Hyeon sonrió mientras tomaba la mano de Ji Woon. "Ahora que estamos saliendo... ¿cuánto tiempo me llamarás 'Nuna'?"

"Ah, así es.ˮ

"No me di cuenta antes, pero ahora siento que llamarme 'Nuna' parece demasiado formal. A partir de ahora seremos más familiares... ¿de acuerdo?"

"Sí."

Ji Woon sonrió suavemente a Yeong Hyeon que estaba actuando mimada. Pelo limpio hasta los hombros. Un lado del cabello estaba recogido detrás de la oreja y como de costumbre parecía madura, pero sintió que Yeong Hyeon era un poco diferente. Tal vez era porque la chica nunca había mostrado una actitud mimada. Porque hasta ahora, para él, Yeong Hyeon siempre había mostrado una figura más parecida a la de una hermana mayor.

Así es, se llama salir. Puedes ver cosas que nunca habías visto antes.

A esta hora, ¿quién está en casa, ¿eh?

Ji Woon compró los ingredientes para cocinar la pasta con salsa de crema y se fue a casa. Esperaba que no hubiera nadie en casa, pero resultó ser la persona que menos esperaba, Hyeon Min. Su hermano estaba relajado en el sofá del salón leyendo un libro. Cuando vio entrar a Ji Woon, Hyeon Min sonrió, pero su cara se puso rígida inmediatamente cuando vio a Yeong Hyeon de pie detrás de su hermano.

"Aparentemente trajiste una invitada aquí."

Yeong Hyeon ya estaba preparada para escuchar la voz amarga de Hyeon Min. Pero resultó que la voz de Hyeon Min sonaba suave.

"¡Entonces, yo también voy a salir, ah!" Hyeon Min se levantó del sofá.

"¿A dónde?" preguntó Ji Woon.

"De repente quiero ver a mi esposa".

Hyeon Min no miró a Yeong Hyeon en absoluto y caminó directamente a su lado.

"¿Estás bien?" preguntó Ji Woon ansiosamente.

Yeong Hyeon sonrió torpemente. "Sí, estoy bien. Estás justo aquí".

Ji Woon sabía que ella no se sentía bien, pero no volvió a preguntar.

"Empezaré a cocinar."

"Yo ayudaré."

"No, está bien. Vine aquí hoy para mostrarte mis habilidades. Tú descansa en tu habitación".

"Nuna... no, quiero decir, estás trabajando, ¿cómo puedo descansar?"

"No es trabajo. Es sólo cocinar para mis seres queridos. No es difícil en absoluto."

Yeong Hyeon empujó a Ji Woon a la habitación. Después de asegurarse de que cerrara la puerta, Yeong Hyeon apretó los puños con fuerza. Las palmas de sus manos sudaban por la tensión. A pesar de que se sentía culpable por Ji Woon, esto todavía tenía que hacerse. Ya había perdido a Hyeon Min. Si no se controlaba, perdería a Ji Woon también.