LECTURA NOCTURNA

Fragmentación

En la oscuridad de la noche, Sarah yace despierta en su cama, temblando de miedo.

Los susurros inquietantes de voces desconocidas llenan su mente, como si fueran sombras acechantes en su psique. Sus manos, ajenas a su control, comienzan a escribir palabras perturbadoras en un diario que apenas recuerda haber abierto.

"¿Quién eres?" grita Sarah, luchando por recuperar el control sobre su propio cuerpo. "¿Por qué estás aquí?"

Las voces no responden con palabras, solo con risas siniestras y susurros ininteligibles. Sarah siente que su cordura se desmorona, pero no puede escapar de la pesadilla que se desarrolla en su mente.

Las noches se convierten en un tormento interminable. Sarah se encuentra hablando consigo misma en voces diferentes, voces que parecen pertenecer a personas completamente diferentes. Una es dulce y tímida, mientras que otra es enojada y vengativa. Sarah no sabe quién es en realidad, ya que las personalidades se entrelazan y cambian sin previo aviso.

Un día, en medio de la confusión, Sarah descubre cartas dirigidas a ella, escritas en letra temblorosa. Las cartas detallan eventos y conversaciones que Sarah no puede recordar. Poco a poco, descubre la verdad aterradora: tiene trastorno de personalidad múltiple, y cada personalidad lucha por el control de su vida.

La lucha por la dominación de su mente se intensifica. Sarah se convierte en una espectadora impotente de su propia vida, mientras las diferentes personalidades la arrastran en direcciones opuestas. No sabe en quién confiar ni quién es realmente.

El horror se despliega a medida que las personalidades compiten por el control, amenazando con destruir a Sarah desde adentro. No sabe si alguna vez volverá a encontrar la cordura o si estará condenada a vivir en este laberinto mental para siempre.