𝐓𝐖𝐎 𝐏𝐄𝐎𝐏𝐋𝐄──ᴄʜᴏɪ ᴋᴀɴɢ-ʜᴏ

𝟎𝟏. 𝑹𝑬𝑻𝑼𝑹𝑵

하나 💌|ACT TWO: CHAPTER NUMBER ONE
𝑹𝑬𝑻𝑼𝑹𝑵

HACE TRES AÑOS HABÍA PARTIDO DE COREA luego de aquel fatídico día en el que se sintió pérdida. Habían pasado alrededor de dos meses, en los cuáles se había negado rotundamente visitar su antiguo departamento, sin embargo, la insistencia de su amiga la había llevado a verse obligada a ir a aquel lugar donde solo abundaban recuerdos.

Ahora, frente a la puerta, cuestionandose si era buena idea haber ido, tomó valor y colocó el código para poder abrir la puerta. Al escuchar el pequeño timbre avisando que la puerta de estaba abierta quiso salir corriendo, apretó fuertemente las correas de aquella cartera de mano que llevaba, suspirando, entró al departamento cautelosamente, cerrando la puerta detrás de ella.

Tomándose su tiempo para despojarse de su calzado, aquellas largas botas de color negro que acompañaban su vestimenta, precedió a entrar al gran departamento, había olvidado lo elegante que era, aunque, claramente no se comparaba a los departamentos que tenía en Nueva York y Los Ángeles.

Dejó su bolso en la pequeña mesa de la sala, caminando hasta la pequeña habitación en la que tenía diferentes instrumentos, sonriendo para si misma al ver lo bien que se conservaban gracias a la empleada doméstica que había estado contratando durante estos años.

Se acercó hasta tomar el violín colgado en una de las paredes de la habitación, un pequeño sonido proveniente dentro de este la desconcertó.

── ¿Le cayó algo dentro?

Con cuidado tomó uno de ellos costados del violín, acercandolo para poder observar mejor la parte de adentro. En repetidas ocasiones movió el instrumento intentando localizar el objeto que estaba dentro. Lo movió una vez más, hasta que el objeto salió del instrumento, cayendo en sus pies.

── ¿Una tarjeta SD?

Aún confundía, tomó la tarjeta entre sus dedos, observandola detalladamente. Rápidamente tomó su teléfono, colocando la tarjeta dentro de este, salió de la habitación y tomó haciendo en uno de los muebles del lugar, esperando pacientemente que la información de la tarjeta cargará en su teléfono.

Una vez la carga término, entró al único archivo que contenía. Apretó el teléfono entre sus manos, sus ojos intentaban no lagrimear mientras leía lo que estaba dentro de aquel archivo.