Nieve

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El invierno y sus virtudes. Donde puedes estar una tarde de chocolate u otra descansando como hojas secas. Pero los compromisos están al borde como el dia en que decides unirte a la persona que amas, eternamente.

No era sorpresa para baji ver a chifuyu perdido en sus pensamientos, con lo nervios de punta y el tintineo de sus botas de cuero el verlo en ese estado por los preparativos de su boda lo volvia eufórico. "Fuyu tranquilizate todo saldra muy bien" lo abrazaba plenamente tocando sus hombros y brazos, dejando rastros de besos en su nudillos. "Está bien, está bien me calmo." Reía juguetonamente mientras tomaba el rostro de su comprometido mientras lo besa lentamente. Sus mejillas tornan colores rojizos; ambos ríen ante sus tactos decorativos. "Te amo" de sus labios escapo el exilir para Keisuke. "Te adoro, mi amado príncipe" Se escucho un golpeteo de puerta indicandoles separación. "Lamento interrumpir, majestad Keisuke. El rey quiere hablar con usted urgentemente."

Provocó cierta molestia en baji sabía que volvería a torturarlo con sus preguntas y destinos. Qué estaba a tiempo de romper el casamiento porque la guerra terminó y el invierno trajo paz en este sendero. "No te diré más veo que sigues aferrado a la idea hijo. Pronto partire de aquí y no veo mejor postura que dejarte hacer lo que deseas mientras estes conciente" firmaba algunos pergaminos y no le dirijia la mirada a baji. "Gracias padre, pero mis sentimientos son reales y no puedo huir más de ellos, ser cobarde no esta en mi seudónimo" Tomo asiento a un costado de su padre el gran dabio rey él cuál todos temian y alababan.

"Lo sé, los sentimientos y las espadas son lo mismo, pero cada quién forja su propio herrero." Esta ves su mirada si fue hacia baji.

"Permiteme desearte felicidad, gratitud, esperanza, bondad en ti. Que la vida te regale lo que anheles si tu deseo es ser feliz con ese muchacho no puedo hacer más al respecto." Supiro cansado no quería llorar delante de su hijo, no aún.
"Los dos son los causantes de que acabara todo, el príncipe chifuyu es un gran devoto en su inteligencia, es un buen estratega en efectuar cambios." Observo de nuevo a keisuke  y le tomo la mano...

"Tú deber es ser el eterno postulante. El eterno aprendiz; ambos"
Baji no dudo en llorar en las palabras inquietantes de su padre.

Un día antes de la boda Keisuke llevo a su amante a una cabaña en dónde compartirian una noche juntos antes de partir a su hogar, el reino de la primavera eterna. "Espero que no te incomode estar solos" Su mirada vulnerable hacia chifuyu era un cosquilleo en su estomago. Beso sus nudillos izquierdos.

"Para nada cariño, quiero compartir un último momento aquí contigo en tu hogar. Chifuyu se sentía melancólico con todo esto parecía que la nieve los abrazara en ese momento.

"¿Sabes lo que me enorgullese de ti?" Chifuyu lo miraba atento a lo que iba decir su corazón estaba danzando frenéticamente.
"Que tienes un gran poder en mi y en tu nobleza" Chifuyu sonrio dulcemente cada cosa que le decía baji para el era un fuego que al igual que el hielo quemama en su ser. "Es mi deber protegerte mi amado."

Juntaron sus frentes frotandose. Estar asi es único entregandose sus sentimientos amenos uno a uno. "Te gusta tomar el camino más complicado" Lo observo dudoso aveces no entendía la logica de chifuyu pero trataba de hacerse el entendido... "Sabes, no tienes que tomar el camino difícil"
De su bolsillo saco un collar de tira negra. Este contenía cristales azules; en el centro habia un sol plateado. "Esto es tuyo, lo hice para ti"...

Baji miraba con asombro aquel collar.  "Es bonito, ¿Puedes ponermelo?"

Chifuyu asintió timidamente, observo como baji se dio la vuelta y le mostró su gran espalda ancha. Temblorosamente hizo a un lado su gran cabellera ceniza y coloco el collar ajustandolo a su medida. Baji tomo la mano de chifuyu y le dio un pequeño beso le dijo que entraran a la cabaña por el gran frío que hacia afuera.

Adentro dea cabaña el calor de la chimenea inundaba sus fríos cuerpos, baji se acerco a una caja grande dónde estaban sus pertenencias excepto una. Un libro envuelto en papel verde atado en un cordon marrón. Miro por unos segundos a su amado debatiendose si entregarselo o no. Un tirón de su cabello hizo que reaccionara y fuera hacia él quien estaba viendo caer los copos de nieve en la ventana; pérdido en sus pensamientos. "Yo...
Una ves, mencionastes que buscabas un libro de flores exóticas"

Estaba nervioso nunca antes habia entregado algo tan personal y eso ponia estatico. Chifuyu lo miro preocupado se acerco lentamente hacia él tomando el libro. Estando ya cerca de sus ojos brotaron lágrimas lo abrazo y sintió de nuevo es calidez sobre su pecho. "Gracias Keisuke, veo que eres demasiado atento a mis caprichos pero, yo no a los tuyos"

Baji negó con su cabeza tomandole las mejillas secando sus lagrimas con sus pulgares. Chifuyu sentía cosquillas con su tacto y comenzó a reír. "Si cumples mis caprichos, tú eres uno"

Beso aquéllos labios tiernos lentamente. Se decían te amo cada que podian regular su respiración. Besos y caricias tímidas llenos de sentimientos. El placer subia de nivel y no les molestaba en absoluto entregarse en cuerpo y alma una ves más.

El frio frotaba en sus narices; haciendolas rojas como las fresas que solía comer chifuyu a escondidas de baji pensando que era demasiado infantil comer este tipo de fruta. Nunca pensó eso de él despidiendo esa calumnia comenzó a comer fresas con su amado a escondidas también.

Estando tomados de la mano mirandose fijamente a los ojos con ese  destello abrumador. Sus corazones palpitaban tranquilamente como marchas seguras en la blanca nieve.

Baji suspiro mirando hacia el cielo por unos segundos luego bajo la mirada encontrandose con la de su ahora esposo. Suspiro mientras sonreía y de su boca salió las palabras  por si solas.

"Caminenos hacia donde brilla la luz"

BAJIFUYU WEEK 2023Donde viven las historias. Descúbrelo ahora