Meses atrás.
Mort Cattle se encontraba dentro de su casa contemplando los árboles de los terrenos que estaban cerca de su propiedad. Había regresado de jugar a las cartas con su viejo amigo Maynard.
Le había ganado varias veces y Maynard continuaba intentando ganar hasta que Mort decidió que era hora de ir a casa.
Había sido un momento bastante agradable el que pasó junto a su antiguo colega de guerra.
Aún no podía creer que hubieran perdido contra aves. Mort recordaba todavía a su querida esposa y compañera de vida, Audrey, la cual había fallecido hacía ya 20 años. Recordaba como la había conocido, como se enamoraron.
Recordaba cada detalle de el día que le pidió matrimonio a Audrey. Sus padres pensaban que alguien que se dedicaba a la granja no era alguien adecuado para su hija.
Y a pesar de todo, Mort se había casado con el amor de su vida. Su Audrey era la mujer más maravillosa y generosa que podría conocer.
Fué después de 3 años de matrimonio que Audrey y Mort fueron bendecidos por la llegada de Brandy. Era parecida a su madre físicamente.
Luego de haber tenido a Brandy, Mort y Audrey lo intentaron nuevamente pero el embarazo no llegó a termino. Pero un tiempo después, Chilli llegó para iluminar su mundo.
A diferencia de Brandy, Chilli era bastante emocional, casi cualquier comentario, por más constructivo que fuera, le hacía sentir que no era suficiente para ella.
Mort recordaba aquella vez que Audrey le enseñó a Chilli la "Lista" y apartir de ese instante Chilli se volvió más independiente y segura de si misma.
Aún no podía creer que su amada Audrey hubiera fallecido. No podía superar ese acontecimiento.
-No hay momento en el día en el que no te deje de pensar.- dijo Mort con tristeza mientras veía la foto de su boda con Audrey.
De repente, el teléfono sonó.
-Maynard, eres más persistente que un emú, no me digas que quieres volver a probar suerte.- dijo Mort a modo de saludo.
-P-p-papá?- respondió una voz al otro lado de la línea.
-Brandy? Que tienes?- preguntó Mort, ya se empezaba a angustiar.
-Es Chilli, papá.- dijo Brandy.
-Que pasó?- preguntó Mort.
-Hubo un incendio, al parecer provocado, Dios mío, no sé cómo decírtelo.- sollozó Brandy.
-Dimelo, no me dejes con la angustia.- dijo Mort.
-Chilli, su esposo y Bluey fallecieron.- dijo Brandy luego de un gran silencio.
Mort salió corriendo en dirección al hospital donde le dijo Brandy que habían llevado a Bandit, Chilli y Bluey.
No podía creer lo que estaba pasando. Le parecía irreal, esperaba que fuera una clase de horrible broma, como de esos malísimos programas de cámara escondida.
Recorrió los pasillos del hospital, sus pasos eran lentos y sentía que sus patas eran más pesadas mientras más caminaba. Su respiración era agitada por el cúmulo de emociones que sentía en ese instante, deseaba con firmeza que Chilli, Bandit y la pequeña Bluey estuvieran bien. Que estuvieran en una habitación recuperándose. Simplemente su mente y su corazón querían y anhelaban tener una ínfima partícula de esperanza.
Esa esperanza se fué por el drenaje una vez que entró a la habitación junto con Brandy. Habían 3 camillas sobre las cuales descansaban 3 cuerpos cubiertos cada uno por una sabana blanca, a su lado había un doctor que lo esperaba. Mort asintió con la cabeza para que el médico procediera a quitar la sabana que cubría la primera de las camillas.
En la camilla descansaba el cuerpo de una Heeler Azul de dos años, sus ojos estaban cerrados, parecía que estuviera durmiendo plácidamente. Mort empezó a llorar. No podía imaginar que clase de mounstro sería capaz de hacer algo como esto.
Cuando el médico le quitó la sabana al segundo cuerpo, Mort Cattle no pudo mantenerse en pie, ante él estaba Chilli.
-Mi niña!- sollozó Mort. Porque? Porque? Quien te hizo esto? Porque tu?-
Mort cayó de rodillas ante la mesa donde descansaba el cuerpo de su hija.
No podía dejar de llorar, estaba completa y absolutamente destrozado, su hija estaba muerta.
La expresión de Chilli era de absoluto terror y angustia, sus manos estaban la una sobre la otra, como si hubiera estado sosteniendo algo en sus brazos, protegiéndolo.
-Lo lamento mucho señor.- dijo el médico.
Mort solo lo vió con una expresión de odio y rabia, pero no dijo nada.
-Hay algo más que debemos decirle. Hay una sobreviviente, es una Heeler Naranja de unos 6 meses de nacida.- dijo el doctor.
Tanto Brandy como Mort vieron al doctor con incredulidad.
Ambos Cattle siguieron al doctor hasta el ala de pediatría donde pudieron ver a la pequeña Bingo Heeler quien se encontraba durmiendo tranquilamente en la cuna del hospital.
Mort rompió en llanto nuevamente. Ella era lo último que quedaba de su hija menor.
Agradeció al doctor y regreso a su hogar donde lo esperaba Maynard.
Maynard también se mostró consternado por la situación así que decidió ayudar a su viejo amigo y contacto a algunos conocidos suyos para que le ayudaran a encontrar al responsable de la muerte de Chilli, Bandit y Bluey.
Maynard llevó a Mort a un sitio alejado de la ciudad donde le mostró a aquel Pitsky que había ocasionado esa tragedia.
El mencionado se encontraba con un costal en la cabeza y las manos atadas a la espalda. Se notaba el miedo en él.
Maynard se acercó al Pitsky y le quitó el costal de la cabeza. Su rostro estaba hinchado por los golpes y tenía un ojo morado. Le faltaba un diente.
Mort entonces arremetió contra él. Lo golpeó hasta que sus puños sangraron y sus articulaciones empezaron a doler. Luego procedió a patearlo hasta que notó un crujido, le había roto una costilla. El Pitsky se había desmayado del dolor.
Mort le arrojó agua para despertarlo. Era hora de acabar con todo esto. Lo puso de rodillas y sacó su arma y apuntó al Pitsky.
-Se que esto no me devolverá a mi hija ni nada de eso pero al menos sabré que el culpable no saldrá impune.- dijo Mort con frialdad.
El disparo resonó en la noche, todo había terminado. Mort se dejó caer al suelo mientras arrojaba el arma que aún humeaba al piso.
Lloró una vez más, su hija, su yerno y su nieta habían muerto, había matado al culpable, si, pero eso no le trajo paz alguna a su alma herida.
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Mami Brandy
FanfictionLa vida de Brandy Cattle dió un giro de 180 grados después de que recibiera una terrible noticia.