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Lewis y Sergio se encontraban en la casa
del menor que compartía con su novio, el mexicano se miraba muy nervioso y Lewis
se percata de esto, por lo que se preocupó inmediatamente.

—¿Que es lo qué pasa Checo? — el morocho
intenta acercarse a su amigo tratando de
darle apoyo pero este se aleja rápidamente

Como si huyera de él.

— No pasa nada... s-solo que Max quiere ir
a vivir a Mónaco...— la voz del menor suena
un poco temblorosa, Hamilton se queda en completo silencio sin saber que decir.

— ¿A Mónaco? Pero... — Lewis no puede
evitar exaltarse un poco de solo pensar que Sergio estaría demasiado lejos de él. Lo que
le provoca un pinchazo en el pecho sacándole una mueca de dolor.

El Mexicano se preocupa un poco al ver
Como el mayor se pone un poco pálido
y con la respiración un poco agitada.

— ¿Que tienes Lewis? ¿Te sientes bien? —
el ojimarrón se asusta un poco pero el británico negó tratando de tranquilizarlo.

— Estoy bien Chequito.. estoy bien — tembloroso,
dice.

— ¿Seguro? ¿Quieres ir al doctor o algo así?
— el menor insiste visiblemente preocupado
recibiendo una respuesta negativa.

El neerlandés lo toma por los hombros para
tranquilizarlo

— Si, tranquilo Checo.. — Hamilton le habló
de forma suave como siempre para tranquilizarlo.

El mayor siente sus mejillas pintarse color
rojo carmesí, baja la mirada para jugar con
sus dedos, estaba nervioso. Había olvidado
por un momento el motivo real por el cual
le había llamado.

— Lewis ... yo... — Pérez quería ser directo
pero el dolor en el pecho no le dejaba
hablar con claridad. — creo.. que.. umm
fuiste un buen amigo siempre, y... y...
pero ya no podemos ser amigos..

Hamilton abre la boca para decir algo pero todo se quedó atascado en su garganta.

— ¿d-de que hablas? — Las lágrimas empañan los ojos marrones del británico, Sergio quiere huir y esconderse.

— Max... el cree — se detiene unos segundos
para tragar saliva — cree que tú estás enamorado de mi...

Ante eso, Hamilton se levanta rápidamente
del sillón. Aun sin decir palabra alguna, el pecoso sigue los movimientos de su amigo

O ex amigo..

— y... ¿le v-vas a hacer caso? — Lewis quiere
echarse a llorar, perez vuelve a bajar la
mirada antes de hablar.

— s-si.. yo amo a Max y creo que es lo mejor
para nuestra relación.. — a pesar de que suena
seguro antes sus palabras, no es capaz de
mirarlo a los ojos.

Hamilton sabía que cuando no le miraba a
los ojos, era cuando mentía o cuando Sergio
no quería que se diera cuenta de que tenía ganas de llorar

Las primeras lágrimas pesadas caen por los pómulos del británico, las limpia rápidamente, suelta una risa nerviosa tratando de sobrellevar todo

— o sea.. ¿me dejas por el? Por favor Sergio
— Hamilton intentó razonar, tragándose las lágrimas obligando a su corazón no perder el control no por ahora. — s-se que tu relación tiene que ir primero ... pero ¿tienes que llegar a esos extremos? Ya me disculpé contigo por eso..

La quebrada voz del británico ocasiona que
el tapatío suelte unas pequeñas lágrimas.
Que rápidamente limpió con sus pequeñas
manos

— No hagas eso más difícil, Lewis... —
murmura el pecoso

Pero Lewis tiene suficiente, está cansando
de que todo sea igual. Harto de estar siempre por detrás de la sombra de Max. Está cansado de sentirse insuficiente, el ama con todo su corazón a Sergio pero estaba cansado, no podía más, siempre terminaba con un dolor
en el pecho

Él terminaba siempre involucrado de una forma u otra en los problemas de ambos. Y estaba cansado de ello

Sentía que su sola existencia era un problema

— El que lo hace más difícil eres tú, Max es
un idiota, te lo he dicho mil veces y mil veces
vas y lo perdonas, te ha lastimado y yo soy el
que está para ti. ¿Crees que para mi es fácil?
— el tono de voz del moreno incrementaba
con cada palabra

Sergio encogió sus hombros intentando esconderse no quería pensar, solo quería olvidar...

Él también tenía tantas preocupaciones

Se sentía tan culpable, Max le había hecho elegir entre él o Lewis y estaba demacrado
con la idea de perder a su mejor amigo,
pero tampoco estaba dispuesto a perder a
Max

Aún así, tuvo que tomar una decisión y lo
hizo

— Basta, Carl, no quiero hablar —

Dice, evitando la mirada dolida de su amigo

Sergio nunca le había llamado por su segundo
nombre o al menos no de esa forma tan
Seca.

— ¡No! — exclama molesto, toma de los hombros al mexicano levantándolo. —
Vamos a hablar quieras o no, no vas a seguir huyendo de mi..mírame a los ojos, ¿que soy para ti?

El pecoso al sentirse presionado, intenta huir de los brazos de su amigo fracasando en su intento

— L-Lewis.. por favor — susurra con la voz
quebrada. — no me preguntes ese tipo de cosas..

— Respóndeme y me iré...

El mexicano cierra los ojos con fuerza ante
la obligación a hablar. Pasa saliva para tratar
de aliviar el nudo en su garganta

— E-eres mi mejor amigo y lo sabes pero... —
El tapatío hace todo lo posible por no mirar
hacia los ojos de su amigo, que lo escaneaba.

— ¿P-pero?

— Pero Max va primero — ante las palabras
del mexicano, el rostro de Hamilton se descompone en una mueca de dolor

Un pinchazo de dolor ataca su corazón, y
otro, otro y otro y otro, de pronto su corazón
es estacado con dolor que lo hace soltar un
montón de lágrimas.

Hamilton se siente muerto

Lentamente suelta la presión que ejerció con sus brazos al mexicano. Quien se escabulle dándole la espalda

— E-entiendo.. espero que estes feliz con tu
decisión, voy a dejar de molestarte —
dice en un hilo de voz.. toma su chaqueta
antes de mirar por última vez a Sergio
Y se va azotando la puerta.

Sergio se exalta por el golpe, se da la vuelta mirando hacia la puerta donde Hamilton
había salido unís segundos atrás. Entonces
se permite llorar  y se deja caer al suelo

— L-lo siento mucho Lewis...

   ↫ 𝙻𝚎𝚠𝚒𝚜 ↬ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora