¿Por La Misión? Yor X Loid +18

¡𝐶𝑎𝑝𝑖́𝑡𝑢𝑙𝑜 𝑈́𝑛𝑖𝑐𝑜!

𝙋𝙧𝙞𝙢𝙚𝙧𝙖 𝙋𝙚𝙧𝙨𝙤𝙣𝙖 (𝘠𝘰)

Era una noche común, como las otras. ¿Verdad? Eso es lo que dirían en Historias clichés, pero en está no es así; era la peor noche que la familia Forger podría tener, la tensión permanente en el aire no parecía querer despejarse por un buen rato.

¿Cuál sería la causa para todo estar tan jodidamente incomodo? Tal vez por las continuas calificaciones bajas que la pequeña Anya siempre ganaba por su gran esfuerzo en la escuela.

Ó quizás por la disputa que Yor y Fiona tuvieron hace unos días, la cual ganó Yor, pero por alguna razón en vez de estar contenta por ese resultado, estaba devastada y distante.

Sus inseguridades como madre y esposa estaban volviendo a florecer, y sus constantes pensamientos de qué Fiona sería mucho mejor pareja para Loid la mantenían abrumada.

Por otro lado, Loid, miraba a las dos chicas sin parpadear, sólo dejando la situación más miserable todavía. Hasta que porfin se dignó a hablar, primero suspirando y seguidamente bajando la cabeza con los ojos cerrados.

—Escuchen lo que tengo ha decir... No me mal entiendan, pero ¿Me pueden explicar el por qué de todo este silencio?

Pregunta Loid, evitando no hacer alguna mueca de irritación, ya que ninguna de las dos siquiera se molestó en levantar la mirada hacia él, solo mantenían fija su atención en el plato de comida frente a ellas.

—¿Anya? ¿Yor? ¿Me escucharon?

Volvió a hablar, pero al parecer no obtuvo respuesta aparente otra vez. Está vez si no pudo soportar más y gruñó por lo bajo, luego de respirar con brusquedad, buscando parar su molestia

—¿Tendré qu-

El joven no pudo terminar de hablar ya qué se vió interrumpido por un grito colectivo por parte de Yor y Anya, que levantaron de inmediato sus cabezas, mientras que la pequeña rosada se ponía de pié sobre la silla y ponía ambas de sus manos juntas en su pecho, nerviosa.

—Hablen una de cada vez por cada, porfavor.

Yor y Anya se miran una a la otra y luego se vuelven a acomodar en la silla, mientras Yor bajaba otra vez la cabeza preocupada por su elección, Anya se aclaraba la garganta y cerraba los ojos con orgullo.

—¡Anya va a hablar!

Dice la niña con su voz aguda resaltando en el silencio de la sala, levanta su mano entusiasmada y sonríe ampliamente, con sus ojos entre cerrados.

-¡Anya sacó 41 de calificación, papi! ¡Te prometo que me esforzaré más la próxima vez, papi!

Loid al recibir esa noticia abrió los ojos de inmediato y solamente miro fijamente a Anya, totalmente perplejo por la repentina noticia; aunque no podía ni siquiera respirar por la mezcla de orgullo y probable enojo acumulado en sí, que lo único que puedo hacer es esconderlo y fingir estar sereno.

Pero por otro lado, Yor se encontraba totalmente sonriente y mirando a Anya con las manos en sus mejillas, dando a entender que ella si estaba súper, hiper, mega alegre por la noticia que recibió de la pequeña.

—¡Anya-san, que impresionante! ¡Te superaste mucho, la otra vez sacaste solo 27 puntos!¡Te mereces una celebración!

Mencionó emocionada, moviéndose en su silla de un lado a otro frenéticamente; mientras Loid seguía mirando a Anya fríamente, aunque su mente estaba perdida en el vacío, pensando en algún plan C, por si acaso...

—Miremos por el lado bueno, subiste mis expectativas...

Piensa el rubio, ahora cerrando los ojos y poniendo su mano en su barbilla para después hablar.