Yandere Love || One Piece (Trafalgar Law x Oc)

Capítulo 7

"Muchas chicas han competido por el corazón de mi Senpai. La mayoría de ellas eran meras plagas en lugar de amenazas reales. Pero la última es diferente.

La mejor estudiante de la facultad, la chica más brillante de la escuela: puntajes perfectos en cada examen, calificaciones impecables en cada tema. La combinación perfecta de belleza e inteligencia. Para cualquier chico en la escuela sería un honor tener su atención.

Si continúa pasando tiempo con mi Senpai., no hay duda de que me lo robará; he visto a la policía patrullando cerca con más frecuencia, pues el asesinato sin resolver de principios de este año sigue siendo una mancha en su reputación. Cualquier derramamiento de sangre en este momento podría atraer atención no deseada, por lo que tal vez debería mantener mis manos limpias de ahora en adelante.

Hmm... la mejor estudiante de la universidad. Seguro que sería una pena si la expulsaran de la escuela, ¿no?"

¿Quién hubiera dicho que una chica a la que Maki consideraba su amiga se volvería una de sus rivales? Rebecca era una de las tantas amigas que tenían en común ella y Vivi de su misma carrera, siempre que tenían una presentación en alguna de sus materias se unían a ella y a otra chica llamada Shirahoshi.

Una materia obligatoria en todas las carreras era la gimnasia, y después de que Rebecca tuviera un accidente en un partido de voleyball y terminara en la enfermería, Maki no tardo en ver su cara de enamorada, además de como Trafalgar Law fue amable al tratarla. Esto fue suficiente para que la sangre de la joven yandere hirviera, no importaba si era su amiga o no, si ella elegía ser su rival, pues que se encargaría de eliminarla al igual que como lo hizo con las otras.

—No nos llames nunca mocosa, total no somos familia—hablo una voz femenina y llena de sarcasmo al otro lado de la línea.

—Tu tampoco llamas, ni tu ni los demas—masculló Maki fastidiada.

—Wow, alguien se escucha molesta ¿Todo en orden? ¿Problemas en eliminar a las niñas ricas y mimadas de la facultad? —pregunto la mujer esta vez con ironia.

—Sin derramar sangre, efectivamente—soltó un bufido chasqueando la lengua.

—Bueno enana, te recuerdo que tienes algo llamado "familia" que está dispuesta a ayudarte, ahora mismo si lo necesitas—prosiguió en decir la mujer.

—Mmm...de hecho, me vendría bien su ayuda ahora más que nada, necesito que me traigas los siguientes materiales—una sonrisa se formó en el rostro de Maki.

Luego del almuerzo, todos los estudiantes regresaron a su clase, pero apenas transcurrieron unos minutos cuando una de las directoras, Charlotte Linlin, ingreso al salón de Maki y pidió a Rebecca que la acompañara afuera del salón. No hizo falta arrimarse contra la puerta para escuchar, pues los gritos de una de las directoras se escuchaban en toda la facultad, regañando a Rebecca porque encontró en bajo su cama varias botellas de alcohol.

Una sonrisa se afloró en el rostro de Maki, pero su sonrisa inmediatamente se borró al escuchar a la directora que no volviera a repetirse. Chasqueó la lengua con molestia, sin lugar a dudas tendría que esforzarse un poco más.

—No puedo creer que Rebecca tuviera alcohol escondido—musitó Shirahoshi— Creí que no bebía.

—Todas lo creímos, pero supongo que le daba vergüenza admitirlo y por ende lo ocultaba—opinó Vivi.

Al día siguiente, quien se presentó al salón fue el director Kaidou, quien pidió hablar con Rebecca nuevamente. Otra vez, los gritos se escucharon desde el salón, al parecer debajo de la cama de la habitación de Rebecca habían encontrado cigarros, varias cajas.

Maki esperaba que, con dos faltas, sancionaran a Rebecca, pero no fue así, el director la dejo ir con otra advertencia lo que molestó aún más a la muchacha. Sin duda tenía que ir alto si quería deshacerse de Rebecca cuanto antes.

El tercer día, Rebecca fue llamada por el director Marshall D. Teach, quien fue informado de condones ocultos en su mesa de noche, además de ciertas pastillas de éxtasis. Nuevamente, recibió una advertencia y el asunto quedo en el olvido.

Maki estaba que perdía la paciencia y los nervios, al menos, lo único bueno que rescataba de su sabotaje, es que la reputación de Rebecca se iba por los suelos y ya no le quedaban muchos amigos a parte de ella, Vivi y Shirahoshi.

—¡Maki! —el grito de Luffy la sacó de sus pensamientos— ¿Todo bien?

—¿Eh? Ah sí, sí, solo...pensaba en Rebecca y todo lo que estoy descubriendo de ella, es inesperado—respondió rapido— Vivi y Shirahoshi están algo decepcionadas.

—¿Cómo no estarlo? La chica más inteligente de la facultad fuma, bebe y quien sabe con quién se acuesta y que otras sustancias consume— habló Nami.

—¡Me niego a creer que Rebecca-chan sea asi! ¡Alguien la debe de estar saboteando y sabre quien es! —estalló Sanji.

"Sanji, por tu propio bien te recomiendo no meterte" pensó Maki.

—Dudo que puedas averiguar algo, eres bueno cocinando, pero como detective eres un asco cocinero pervertido—le reprendió Zoro comenzando nuevamente una de sus tantas peleas.

El cuarto día, Rebecca tuvo problemas con el director Shanks, pues una testigo la había visto poner una fuente de agua sobre el cuarto de su hija, Uta, además de encontrar un anillo que le había regalado dentro de su mochila. Con esto, Maki pensó que al meterse con la hija de uno de los directores sería suficiente para que la expulsaran, mas no fue así y estaba que no controlaba sus ganas de ir y degollarla allí mismo.

El quinto día y su última oportunidad, esperaba que esta vez expulsaran a Rebecca de forma definitiva y así fue, los cuatro directores esta vez hicieron acto de presencia, esta vez no se la llevaron para hablar en privado, sino que en medio de la clase le mostraron la carpeta de los exámenes la cual había sido robada y encontrada en el cuarto de ella. Esa, sin duda, fue la gota que derramo el vaso para los directores de la universidad, expulsando de forma definitiva a Rebecca.

"¡Aleluya! ¡Al fin!" pensó Maki con una gran sonrisa en el rostro.

—No puede creerlo—dijo Vivi.

—Rebecca...—musitó Shirahoshi triste.

El fin de semana Maki pudo respirar tranquila, pues otra de sus rivales había sido eliminada exitosamente, aunque tenía que disimular en su cuarto ya que Vivi aún estaba triste y como buena "amiga" y compañera de cuarto debía consolarla, a ella y a Shirahoshi, a quien Maki invito a unirse a su grupo de siempre para levantar sus ánimos.

Luffy y el resto le dieron la bienvenida a Shirahoshi a su grupo con los brazos abiertos, las payasadas de Brooke, Usopp, Luffy, Ace y Sabo, las peleas de Sanji y Zoro y la amabilidad de Chopper, Robin, Kaya y Nami definitivamente hicieron sentir mejor a Shirahoshi y a Vivi, regresando a la normalidad para el lunes y olvidando todo el mal asunto con la chica a la que supuestamente consideraban su amiga. Pero para Maki, su labor de eliminar rivales no había terminado, pues otra chica había aparecido para robarse a su senpai.

"¿¡Es que nunca se acaban!?" fue lo que pensó, ya bastante fastidiada.