Daerin -【Breathing in the secret】

009

- Otra vez Kang Haerin y otros vagabundos haciendo de las suyas en la plaza - Suspiró cansada su madre, mientras dejaba las compras en la mesa y comenzaba a ordenarlas

Danielle sintió su corazón como loco al oír el nombre de la coreana y volver a recordarla después de días intentando sacarla de su mente.

Iba comiendo una tarta de mora junto a Jihyun y su padre, en el comedor.

Sintió la mirada de su hermana sobre ella y trató de concentrarse en su postre.

- ¡Esta vez estaban peleándose! - Habló con un tono exagerado, mientras iba comentándole al señor Marsh - Tuvieron que llamar a la policía - Negó con la cabeza en desaprobación mientras entraba a la cocina

- Vaya... esa niña no se cansa de hacer alboroto - Comentó su padre, enfocado en la deliciosa tarta

- ¡Sí! ¡Pasar por la plaza es todo un infierno hoy en día! - Comentó desde la cocina

- Por cierto, querida, ¡Ven a probar esta tarta! - Alzó la voz el hombre - ¿De dónde la sacaste Jihyun? - Preguntó algo emocionado

- Una amiga me la vendió - Sonrió con la boca llena

Su madre había llegado al comedor y probó un pedazo del plato del hombre.

Jihyun la miró con expectativa.

- ¡Vaya! - Aplaudió con una sonrisa - Está deliciosa, deberías de traer a tu amiga a casa Jihyun - Comentó su madre mientras volvía a coger otro trozo y llevárselo a su boca

La chica solo soltó una pequeña risa burlona, para seguir en lo suyo.

...

Jihyun iba entrando a la habitación de Danielle.

Sin duda necesitaba respuestas al comportamiento de su hermana, y sabía más o menos por donde iba. Kang Haerin.

La mirada de la menor cayó sobre ella. Se mostró confundida y esperó a que Jihyun hable.

- Ya no te la pasas 24 horas en la terraza, solo significa una cosa... - Habló alargando la última letra

Danielle rápidamente trató de enfocarse en hacer otra cosa más importante, como caminar hasta su cama y tratar de ordenar, aunque estaba perfectamente ordenada.

Jihyun rió bajo.

- La tarta fue de parte de Kang Haerin - Dijo, dejando en shock a la contraria, quien se encontraba de espaldas y ahora había parado sus movimientos - Vino a hablar con mamá... realmente se vio tan mal esa niña - Hizo una mueca de incomodidad - Tenía un moretón, parecía haber llorado por todo el mes y sin horas de sueño... parecía un zombie... -

Danielle no dijo nada.

- ¿Ella... se atrevió a venir? -

- Eso mismo pregunté, está loca - Asentía con la cabeza

La habitación se quedó en silencio.

Danielle parecía estar perdida en sus pensamientos.

- No sé lo que haya pasado o hayan hablado, pero es lo mejor para ti y para ella - Trató de convencer, colocando su mano sobre el hombro de su hermana

Danielle apretó los puños y gruñó bajo, con la mirada en el suelo.

- Solo... habla con ella y explícale por qué es que venir hasta aquí es como suicidio -

Se separó un poco de ella. Danielle solo asintió lentamente con la cabeza, algo insegura.

Pues según ella, era la salida más fácil.