Narra Gingakou.
°—Desperté, sintiéndome extraña pues no estaba acostumbrada a usar mucha ropa pues mi estilo es de playa y me la paso usando traje de baño, siempre de dos piezas. Solte aquella almohada para luego levantarme con pesadez de la enorme cama de la Deidad marcando otro día que pasaba de esos doce días que pasarían para lo que sería la inyección que le darían a Poseidón en un calendario, quedando así cuatro días. Salí de la habitación moviendo aquella tela larga llamada "camiseta" que llevaba puesta al igual que unos shorts, me dirigí a la cocina para hacerme un té junto con unos panques para el desayuno, hice unos ricos panques bañados con sirope de chocolate, crema batida y por supuesto pedazos de melocotón, comí en completa soledad en ese gran comedor mientras me volvía loca pensando en si debía enviar aquella carta o no, luego de comer fui a limpiar mi plato y la taza de té, busqué en el refrigerador y si, Hermes había dejado de mis chocolates favoritos en el refri, los tome y fui de nuevo cocinar pues debía hacerle el desayuno a el ojos de Borgoña, a el le preparé unas tostadas francesas con mermelada de arándanos acompañado con un delicioso té verde, deje la comida en el Gran Comedor y fui a tomar una ducha rápida pero aún usando mis aceites de lavanda y aguas de rosas azules, siguiendo también mi rutina para la cara con jabones antiséptico, cremas y espumas hidratantes. Al terminar de ducharme cepille mis dientes y fui a mi habitación para ponerme ropa, abrí mi guardarropas clavando mi mirada en mis hermosos trajes de baño pero no podía ponérmelos, me puse unos pantalones "blue jean" de pernera ancha junto con una hermosa camisilla corta que me recordaba a uno de mis trajes de baño, junto con una chinelas (chanclas, cholas, chancletas o como se que las llames) y salí a buscar al ojos de Borgoña. Antes de salir tome unas pastillas para el dolor pues tenía cólicos y no quería desquitarme con Hermes, fui al corredor de siempre y ahí estaba, caminando de manera tan apresurada mientras llevaba a dos almas tomadas por algo que podríamos llamar como "hombros", este les sonreía de una forma tan tétrica que sentía escalofríos cuando se inclinaba para ver a las Almas y sonreírles, cuando se percato de mi presencia volvió esa sonrisa cálida y el brillo en sus ojos, simplemente lindo, termino de guiar unas almas y se acercó a mí, inclinándose para que de diera un beso en la frente y el me lo devolvió pero en la mejilla, luego extrañamente poso su mano en mi vientre y esbozo una sonrisa—°
——Hermes:¿Como ta la pancita de mi bebé?-
——Gingakou:¡HERMES! >////<-
——Hermes:¿Cómo se siente mi bebé?-
——Gingakou:Ahg adolorida y ya para con eso >////<. ¿Cómo te sientes tu? Te traje de comer-
——Hermes:¿Te costaba responder jsjs? Ah bueno estoy... ¿cansado? No lo sé, me siento raro, querida-
°—Expresó el ojos de Borgoña mientras se sentaba en el suelo extendiendo sus brazos para recibir la comida, yo gustosa se la di y me sente a su lado, despacio para evitar que algo se moviera de su lugar y con una mano en la espalda baja pues me dolía un poco la espalda—°
——Hermes:¿Estas viejita tan pronto? La última vez que revisé tenías apenas cuatro milenios de edad-
——Gingakou:Estoy chiquita ¿como se te ocurre decirme "viejita"?-
°—Dije arrugando el ceño haciendo un puchero con mi labio inferior a lo que Hermes reaccionó nada más y nada menos que riéndose. Este comenzó a comer mientras hablábamos, yo me había preparado un batido y me había llevado unos chocolates así que comí con el tatuado—°
——Hermes:Ya sabes cuando enviaras la carta a mi querido tío?-
——Gingakou:Mmm no lo sé, estoy dudando en su debería enviarle la carta a ese tonto...-
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Nuestra Historia Juntos (🔱Poseidón y Tu🔱)
FanfictionBueno, todo empieza con una historia feliz pero después descubrimos que es un sueño y la pesadilla comienza, mientras en el transcurso de esta historia conocimos a un Rubio llamado Poseidón, nosotras somos Gingakou la Diosa de Las Calamidades y el C...