Deambulando por tus pensamientos (Supercorp) Kara G!p

🩹 Capitulo 6

Kara sueña con suspiros y satisfacción, gemidos y murmullos, carne húmeda que se estira y contrae.

Está en una neblina, en una niebla. Sus instintos vibran en lo bajo de su columna, diciéndole que se aparee, que se reproduzca. Reclamar, empujar, llenar. Hay carne flexible contra su cuerpo, moviéndose coquetamente, y puede oler el calor de la omega, tan intrigante y, sin embargo, familiar para su olfato. Su cuerpo tiene un hambre que nunca antes había sentido. Ella sabe, en su sueño, que hay un precio que pagar, pero está dispuesta a pagarlo tres veces. El instinto alfa dentro de ella es babeante, está aullando por la libertad. Quiere dejarlo salir.

Entonces, un ruido imperceptible la despierta y sus ojos se abren de golpe.

Lena . Es Lena, a su alrededor, frente a ella. Gimiendo y rechinando lentamente contra la creciente erección de Kara, como si estuviera perdida en una especie de aturdimiento. Todo lo que Kara puede ver es su cabello moviéndose hacia adelante y hacia atrás: un barco oscuro sobre el mar agitado de sus hombros. La piel pálida está húmeda de sudor.

Los impulsos de Kara siguen ahí, gritando bajo su piel, pero después de todo tiene reservas sobrehumanas, por lo que respira profundamente para estabilizarse antes de sacudir suavemente a Lena para despertarla. El aroma en el aire es embriagador y dulce, como el de jazmín y azahar, y el calor de Lena la llama a través de él, zarcillos de deseo susurrante. Ella traga, sintiendo la sangre palpitar en sus regiones inferiores. "Lena. Despierta"

"Estoy despierta." La respuesta llega casi de inmediato, pero aturdida, como si Lena apenas se diera cuenta. "Kara, es mi calor".

"Lo sé." Kara le dice con voz ronca, mientras sus manos se ciernen culpablemente a ambos lados de la cama. Se clava las uñas en las palmas.

"Me esta volviendo loca" Lena admite en voz baja con deseo. Ella tiembla. "Kara, duele".

"Lo lamento." La garganta de Kara está apretada. Lena todavía se mueve contra su polla, rígida y ansiosa contra el trasero rodante del omega. Ella tampoco muestra signos de detenerse. "Puedo... ir a buscarte algunos supresores, si, si eso es..."

"Kara". La voz de Lena se eleva en un gemido gorjeante. "Eso no va a ayudar y lo sabes".

"Si podría" Kara discute, débilmente, pero aquí sólo está ganando tiempo antes de lo inevitable y lo sabe. Los supresores tienen una ventana de efectividad de 12 horas. Si Lena hubiera tomado uno anoche, estaría bien. Pero ella no lo hizo y ambos lo saben.

" No lo hará ". Lena suena tan petulante como una niña. La atracción del calor es profunda y pesada, Kara lo sabe, pero todavía le duele tratar de negárselo. Especialmente con su garganta agitada por reclamar y anudar. "Kara, sabes que no será así".

"Bien." El cuerpo de Kara está pegajoso por el sudor y la tensión. Puede sentir que se rinde, incluso cuando finge por última vez que no lo hace y cierra los ojos con fuerza antes de volver a abrirlos. "¿Qué... qué puedo hacer para ayudarte?"

Lena se gira entre sus brazos, sin aliento y sorprendentemente rápido, y dice " Esto " antes de chocar sus labios.

Es y no es lo que ella esperaba.

Originalmente, en los días en que estaba enamorada de Lena, había imaginado su primer beso como un sueño romántico: confesiones suaves, ojos redondos, inclinándose ligeramente más cerca en el sofá y luego...

Más tarde, cuando Lena estaba mal, se lo imaginaba como un bálsamo. Un beso de salvación. Aplastando el rostro caliente y enojado de Lena entre las manos de su destructor y besándola hasta dejarla sin aliento hasta que admitiera que estaba herida y actuaba por enojo. Admitiría que la traición de Kara la había convertido en villana y que no tenía idea de lo que estaba haciendo. Y luego Kara la envolvería en los fuertes brazos de su salvadora, la besaría suavemente y lloraría con ella hasta que terminara el llanto.