𖥻 ﻬ˚ ͙Búscame en los casilleros ﻬ˚ ͙

☆ Capítulo 11, parte 1 ☆

—Entonces, cada que vez que quieras estudiar te pondrás una meta sencilla, puede ser lo que tú quieras solo debe ser algo fácil de cumplir. Cuando termines y veas que la haz cumplido te podrás recompensar con algo que te guste. Por cada sesión de estudio puedes ir aumentando a tu ritmo las metas y así...— Explico mientras Louis me mira fijamente y juega con un lapicero un tanto distraído.—¿Me hice entender, amor?

—Si, perfectamente. Debo hacerme metas pequeñas y cumplirlas poco a poco— Me afirma sacándome una sonrisa. Yo bebo de mi jugo de fresa y me recuesto en el espaldar de la silla algo cansado.

—Bien, llevamos una hora completa aquí y te haz mantenido bastante concentrado. Lo haz hecho bien— Comento mientras le acaricio la mejilla y el sonríe dejando ver sus tiernos hoyuelos.

—¿E-en serio? Creí que llevábamos menos tiempo.

—Sii, siempre confié en que podías. Tan solo requires un poquito más de motivación.

—¿Podemos ver una película, Hazz? Estoy algo aburrido— Me pide con un puchero al cual es imposible negarme a lo que sea que me pida. Yo asiento y me levanto de mi puesto para recoger los lápices y meterlos en mi lapicera.

—Está bien Lou, ve y escógela mientras yo preparo algunos snacks ¿Te parece?— Louis asiente emocionado y se levanta velozmente con dirección a la sala. Yo niego con la cabeza y una ligera risa y me dirijo hacia la cocina para sacar unas papitas de bolsa junto con unas latas de gaseosa y mis gomitas preferidas de confianza. Pongo todo en platitos y camino hacia la sala.

—Papitas, gaseosa y gomitas— Aviso dejándolas en la mesita ratona para después recostarme al lado de Louis.

—Oh Dios, ¡Esas gomitas son mis favoritas!— Exclama reincorporándose en el sillón con emoción.

—¡Las mías también!— Contesto levantándome igual para chocarnos las manos. En eso, el teléfono de Louis suena asustándome un poco.

—Oh, es mi mamá—Avisa mientras contesta y pone el teléfono en su oreja—Hola mamá, ¿Todo bien?— Noto como Louis a los pocos instantes comienza a cambiar su expresión por una preocupada y angustiada poniéndome los pelos de punta. Eso jamás indica algo bueno— ¡No puede ser!, ¡Lo hemos olvidado por completo!— Yo frunzo mi ceño en confusión. Eso no suena a alguna tragedia...— Okay Ma, en seguida iremos— ¿Iremos?, ¿A donde rayos tendríamos que ir? Louis cuelga y se masajea la frente suavemente.

—¿Que sucede, Lou? ¿Está todo bien?— Le pregunto tomando su mano para que pueda sentir mi apoyo en caso de ser una noticia bastante mala; deseando en lo más profundo que sea todo lo contrario.

—Harry...olvidamos nuestra cita en mi casa para comer macarrones— Me informa con cierta tristeza— Mi mamá llamó para preguntar si aún íbamos.

Mierda.

—¡Louis no puede ser! ¿Como pudimos olvidarlo? Dios, que mala impresión se llevará tu mamá de mi— Reniego dejando caer mi cabeza hacia atrás y restregando mis palmas en mi rostro.

—Nada de eso, sólo fue un olvido. Yo también lo olvidé pero no importa, aún podemos ir a comer los macarrones— Me alienta acariciando mi hombro dulcemente. Yo disfruto del roce unos segundos para luego levantar mi cabeza y tener la dicha de poder ver sus hermosos ojos puestos en mi.

—¿Seguro que no pasa nada? Cuando me invitaste sonabas muy ilusionado— Le pregunto sintiendo la tristeza invadirme un poco. ¿Como es posible que pude olvidarla? Y mucho peor, la olvidé para obligarlo a tener una aburrida clase sobre como estudiar.

—Hazz, mi amor, estaba y estoy ilusionado, no por ir a comer sino por que conozcas a mi madre. Ambos la olvidamos pero no pasa nada porque la olvidamos estando juntos. Hoy aprendí algo nuevo que me va a ayudar mucho así que no me arrepiento.