Capítulo 2 🐺

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Pov Eclipsa

Pov Eclipsa

— ¡Esto será increíble! —chilla Cleo, mi hermana.

La veo olisquear el aire.

— Hay panecillos, vamos a por unos —pide tirando de mi brazo.

Realmente a Cleo le encanta la celebración de El bosque encantado, hace diez años que vivimos en el pueblo de Pitlochry. Es bastante acogedor y lindo, pero si los habitantes supiesen el secreto verdadero que guarda este lugar no estarían tan felices.

Miro hacia el cielo, el eclipse está a punto de comenzar.

— Por cierto, ¿donde están tus amigos?

La observo con una ceja levantada.

— ¿No querrás preguntar dónde está Kyle? —cuestiono y ella bufa.

— Me refiero a todos, no solo a él.

Río ante esto. Hace más de seis meses que mi hermana está coladita por uno de mis amigos.

— Oh, vamos, ya te dije que no me gusta —Se queja.

— Pero si el amor se huele en el aire —rebato burlesca.

— Tú no tienes olfato —ataca mientras lleva uno de esos panecillos a la boca y ruedo los ojos.

Es cierto, no tengo olfato, pero eso me ha ido bastante bien, mis demás sentidos se han desarrollado de una manera increíble, sobre todo el oído y el gusto...

Este último me causa algunos problemas.

Entre todo el murmullo de personas algo llama mi atención.

— Alex está aquí, prepárense para el 27 —escucho y frunzo mi ceño.

Volteo en dirección a donde ha venido aquella voz y me sorprendo. Hay cinco hombres lobo entre las personas, cinco que no reconozco y me dan muy mala espina.

Les veo organizarse y por sus vestimentas elegantes se que no han venido a ver el espectáculo.

— Cleo, quédate aquí, debo ir a la Posada de la abuela —aviso.

— ¿En serio Eclipsa? —pregunta cansada—. Nunca sales a no ser que vayas a la universidad, deberías relajarte, tú y la abuela.

— Sabes que eso no pasará —beso su mejilla—. Vuelvo pronto, no te comas todos los panecillos.

Tras decir eso salgo de ahí.

Corro hasta el sendero y saco de mi bolso un silbato, soplo, emitiendo un sonido que no todos podrán escuchar.

No pasa mucho tiempo antes de que siete lobos aparezcan más adelante. Corren hacia mí y se detienen a tan solo centímetros.

— Hay un nuevo lobo que está siendo perseguido por una jauría con el código para matar. Ayúdenlo y tráiganlo a Grandmother's House.

Los siete asienten con la cabeza y salen del sendero internándose al bosque.

Yo sigo el sendero, sabiendo perfectamente a donde ir. Minutos después llego a la posada, estoy a punto de ir al cobertizo para tomar mi arco y evitar que alguno de los lobos de la jauría enemiga se acerquen cuando escucho los pasos de uno.

Volteo hacia el sonido y veo a un lobo saltar de entre los árboles que rodean la zona.

« Me cago en mi... »

No tengo tiempo de apartarme de su trayectoria. Todo se vuelve oscuro.

(...)

— Eclipsa, Eclipsa, cielo —Me llaman y abro los ojos.

Fusión de LunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora