◇|Πρόλογος

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Todos los fines de semana, siempre veía al mismo hombre sentado en la misma silla y en la misma mesa, todos los sábados y domingos, sin excepción alguna, a la misma hora y no importaba si afuera caía una tormenta, siempre ahí, pidiendo cualquier tipo de café y postre dulce, garabateando en un block de dibujo y haciendo muecas en su rostro o mayormente sus labios se movían como si murmurara para si mismo, era un pintor, lo sabía, había regalado alguna de sus obras al local para decorar algunas paredes sin decoraciones y vacías, admitía que sus obras de arte eran espléndidas.











Nunca le toco atender al hombre así que nunca tuvo una charla con él, muy a diferencia de algunos colegas que lo atendían, describiendo lo como alguien simpático y alegre, amistoso y carismático, y podía verlo de lejos, mostraba una sonrisa calmada, con el cabello rubio algo largo a mitad de la espalda o un poco más bajó con ojos azules, su tes pálida, complexión algo delgada, siempre escuchaba suspiros de algún colega cuando les tocaba atender al frecuente hombre, tan frecuente que ya todos sabían que iba a llegar al local sin falta alguna en el fin de semana.











Y llego sábado, como siempre y sin falta alguna, el hombre de cabellos rubios llegó a la misma hora y sin retraso alguno, suspiró antes de comenzar a preparar un ice americano, mientras veía a su compañera atender al hombre con una sonrisa característica de ella y muy amable como siempre, era un martirio la misma rutina pero ya a ese punto debe de estar acostumbrado, cuando el café estuvo listo se lo paso a su compañera que estaba sacando una rebanada de pastel sabor vainilla y toques de chocolate. Estaba cansado, lo bueno era que salía temprano ese día porque su jefe al parecer estaba feliz o la esposa lo esperaba en casa con laguna sorpesa, lo que sea que sea no le importaba pero al menos no se quejó y preguntó porque su pedir de salir temprano.










Sonrió saliendo ya cambiado del vestidor y sin la camisa uniformal del trabajó, se despidió de algunos compañeros y fue a casa a tomar un merecido descansó porque ya se sentía a su límite.


























































Sonrió saliendo ya cambiado del vestidor y sin la camisa uniformal del trabajó, se despidió de algunos compañeros y fue a casa a tomar un merecido descansó porque ya se sentía a su límite

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Nuevo día, misma rutina pero hey, al menos esa mañana tuvo tiempo de terminar algunas cosas antes de irse a trabajar, entró al local y suprimió un bostezo, aun sentía cansancio, al llegar saludo y fue a ponerse la camisa del trabajó, mirando con curiosidad como su compañera se hacercaba a él.







ーTenma...¿me podrías hacer un favor?ー escuchó la avergonzada pero esperanzada voz de la chica.






ーClaro Sasha, ¿que pasa?ー pidió.








Sasha tiene el cabello morado y ojos verdes, la piel de porcelana y cuerpo delgado, su lindo y largo cabello arreglado para no estorbar en el trabajo, siempre alegre y amable, aunque con un carácter retador y desafiante si la hacen enojar, pero es una chica calmada la mayor parte del tiempo.








ーBueno, quisiera saber si podrías ¿suplantar me esta vez? ¡por favor! necesito salir pero no hay nadie que me cubra hoyー pidió juntando sus manos y cerrando sus ojos, sonriendo con esperanza.










Lo pensó antes de alzarse de hombros.
ーClaroー acepto ーNo tengo nada que hacer después de mi hora asi que esta bien Sasha, te cubriréー sonrió sin más.








ー¡Muchas gracias, Tenma!ー sonrió a lo grande antes de agarrar su bolso y salir corriendo a la salida sin pensarlo.









"-Vaya, sique tiene prisa...-" una gotita bajaba por su mejilla al ver a la chica irse sin más cuando le dio el visto bueno.
"-Okey...a trabajar-" sus hombros se hundueron, ni lento ni perezoso, se fue a parar frente al mostrador.







Normalmente eran tres o cuatro que ayudaban a atender el local aunque no era muy grande, la paga era buena y como a la semana y mayormente fin de semana hay más gente, cuatro personas era bueno para aliviar un poco la carga, pero era muy temprano para que personas se levantarán los domingos para ir. Así que sin mucho ánimo, tomo una toalla pequeña y limpió el aparador y luego el mostrador, Sasha había limpiado las mesas así que no tenía porque ir a limpiarlas también. Chequeando la hora en su reloj, se alejo del mostrador a ir a preparar un café, como era que se llamaba?, comenzó hacer recuerdo, ¿Alen?, ¿Naron?, ¡Alone!, eso.










La campanilla arriba de la puerta se escuchó, suspiró antes de forma una sonrisa y caminar al cajero para atender al cliente habitual del local.










ーMucho gusto y qué tenga un buen día, ¿que desea pedir el dia de hoy?ー sonrió mostrando su mejor sonrisa al hombre.









ー...ー Tenma espero casi dos minutos en lo que el hombre lo veía antes de reaccionar ーOh, e-eh, a-ehd s-sí, buenos días, quisiera...ー re resto importancia al tartamudeo, esperando pacientemente el típico pedido de café al hazar y postre dulce. ー, cuatro macarrones y tinto, por favorー casi frunce su ceño, Okey...¿vino de madrugada? pero a él le pagan por atender, no por hacer esas preguntas.









ーDe acuerdo, ¿algún sabor de preferencia que quiera?ー sigue sonriendo pero por dentro quiere golpear al hombre ¡¿que hará con el maldito café que ya preparo?!









ーEh, cualquiera esta bienー se alza de hombros y en su rostro hay una calmada sonrisa.








ーDe acuerdo, ¿pagara ahora o cuando ya se retire?ー sigue.








ーCuando me retireー responde.









ーDe acuerdo, su orden estara lista en pocoー informó y vio al hombre irse a sentar al mismo lugar.









Ahora, el café, el maldito cafe, suspiró antes de agarrarlo, quitarle la tapa plástica y tomarle un sorbo, ya lo pagará con su dinero, terminó de tomarlo antes de tirar el cartón al basurero y luego ir a pagar el café, teniendo de testigo a su compañero que solo río y siguió con su trabajo.










Tomo la orden antes de encaminarse a donde estaba el hombre, notando le como siempre, garabateando en el block.









ーCuatro macarrón y un tinto, que lo disfrute!ー sonrió dejando las cosas en la mesa.









ーGraciasー asintió antes de irse.









Sonrió a los nuevos clientes, hiba hacer un largo...día pero la paga lo vale, eso se dice siempre que quiere renunciar.

°The Artist°  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora