Empezando de 0
Y aquí estaba yo, enfrente del aeropuerto destino a New York a empezar mi vida de nuevo, mire los dos billetes en mi mano ¿Qué hago yo yendo a New York? Pues dejar de chupar del bote de mi mejor amiga Lisa e irme a ganar mi propia estabilidad económica, mi padre tenía una Editorial enorme llamada ¨Skyline¨ tengo mi titulo de diseño grafico, así que era diseñadora de portadas.
Tomé la mano pequeñita de mi pequeño y me dirigí hacia dentro sin mirar atrás, sé que mi padre me había comprado un departamento allí con unas vistas hermosas según dice él, estoy segura que le devolveré hasta el último dólar.
¿Mi vida amorosa? era inexistente, desde que el se fue no puedo amar a nadie, intente contactarle las primeras semana después de enterarme de mi pequeño Parker, mi hijo, bueno, nuestro hijo, intente, juro que lo intente de todas las maneras estar en contacto con el pero ya a las 30 llamadas perdidas desistí, mi pequeño era muy fuerte, había sobrevivido a todo, todavía recuerdo que me entere en el hospital recién me levante, había estado a punto de un coma etílico, me dieron un sermón de lo que debía hacer, tenía 22 años no sabia que hacer, no tenía a mi madre para que me diese los típicos consejos de madre adulta, no la llegue a conocer, falleció en el parto por lo que me contó mi padre.
Estaba rota, sigo estando rota, por que es lo que estoy, rota, pero sigo aquí por mi pequeño Parker, me costó mirarle a los ojos y a la cara, era una copia de su padre, su ojos grises, su pelo, sus labios, su nariz...
Al principio cuando me lo dieron me eché a llorar cerrando los ojos, era como volverle a ver pero en versión mini.
Mi hijo era una versión mini.
Una versión mini de Luke.
Parker era su versión mini.
Y eso me dolía mucho, porque nunca lo llego a ver.
Mi hijo fue mi salvavidas, yo he estado a punto de terminar con mi vida en muchas ocasiones, pero cuando me entere que tenia 1 mes de embarazado, algo en mi cambio, mis heridas siguen sangrando pero cuando mi hijo me cogía la cara con sus pequeñas manitas y me daba besos por toda la cara diciendóme ¨Te amu musho¨ era mi motor de vida y tenía miedo a que me lo quitasen por algo.
Él me había salvado.
Y yo no dudaría 2 veces en salvarlo a él.
–Pasajeros con vuelo 234 con destino a New York diríjanse a embarcar.-Sonó por los altavoces del aeropuerto.
Aquí vamos, aquí empieza este ciclo de mi vida.
A por ti voy New York.
–Señorita ya hemos llegado.-Me levanto una azafata.
–Gracias.
Levante a Parker que estaba durmiendo abrazado a el Koala que le regalo Lisa, Lisa... Lisa era mi mejor amiga, mi hermana, la que me decía todos los días la razón por la que tenia que estar aquí, me acuerdo que cuando le conté que me tenia que venir a New York se puso a llorar diciendo que me iba a secuestrar y a Parker lo iba a retener con tortitas.
–Cielo levanta.-Me miró con el ceño fruncido mientras me juzgaba con los ojos, dios, era igual que su padre.
–¿Quieres que vayamos a comer tortitas?
El me asintió con la cabeza, adormilado, mientras me extendía sus bracitos.
Lo agarré en mis brazos, me colgué la mochila en la espalda y caminé hasta que recogí mi maleta y salí afuera.
–¿Quieres bajar?
–Shi.
Lo deje en el suelo y enseguida se sentó y se puso a jugar con su Koala yo de mientras llamaba a mi padre.
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El hilo rojo que nos unió
RomanceAgatha Blair lleva 2 años intentando sanar y a la vez cuidando a su hijo. Luke Anderson lleva 2 años siendo de los mejores en el Hockey sobre hielo. Ellos dos se separaron hace 2 años haciendose daño mutuamente, lo dejaron por desconfianzas el uno...