Pensamientos De Alguien Roto

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28 de septiembre 2021

Lo siento... no sirve de nada que te lo diga, ya no estás aquí, pero aún así, lo siento. Mis recuerdos sobre ti se vuelven cada vez más borrosos, tu voz se escucha lejana, tu imagen casi no se percibe, ya no puedo ver con claridad tus ojos.

Fue de un día para otro, literalmente, un día estábamos felices, hablando de cualquier estupidez, y al otro te encontré todo golpeado en uno de los salones. ¿Por qué no quisiste hablar? ¿Por qué? Teníamos todas las pruebas, tú sabias quienes eran, pero simplemente no quisiste hablar, ¿cómo le escondiste esos golpes a tu madre? ¿Cómo lograste engañar a todos diciendo que te habías caído de las escaleras? ¿Cómo mantuviste siempre esa sonrisa en tu rostro? ¿Cómo? A pesar de que yo siempre te decía que teníamos que decirlo, tu te negabas, ¿siempre fuiste tan terco?.

Me hubiera gustado decirle a alguien, pero no quisiste darme sus nombres, supongo porque sabías que se lo diría al director, ¿Por qué no querías que se supiera quienes eran? ¿Por qué los protegias?

– Por favor, no le diré a nadie, te lo prometo, sólo dime quienes fueron.

–  ̶J̶̶a̶̶j̶̶a̶̶j̶̶a̶ ̶a̶̶m̶̶i̶̶g̶̶o̶̶,̶ ̶d̶̶e̶ ̶v̶̶e̶̶r̶̶d̶̶a̶̶d̶ ̶q̶̶u̶̶e̶ ̶n̶̶o̶ ̶s̶̶a̶̶b̶̶e̶̶s̶ ̶m̶̶e̶̶n̶̶t̶̶i̶̶r̶

Tus palabras nunca me convencieron, había algo en tus ojos que indicaba que  algo bueno no iba a pasar, y mientras más decías que estabas bien, más me preocupaba.

– ̶N̶̶o̶ ̶p̶̶a̶̶s̶̶a̶ ̶n̶̶a̶̶d̶̶a̶̶.̶̶.̶̶.̶ ̶m̶̶i̶̶r̶̶a̶̶,̶ ̶p̶̶o̶̶r̶ ̶f̶̶i̶̶n̶  ̶m̶̶e̶ ̶s̶̶a̶̶q̶̶u̶̶e̶ ̶u̶̶n̶̶a̶ ̶b̶̶u̶̶e̶̶n̶̶a̶ ̶n̶̶o̶̶t̶̶a̶ ̶e̶̶n̶ ̶l̶̶a̶ ̶p̶̶r̶̶u̶̶e̶̶b̶̶a̶

¿Por qué siempre desviabas el tema?
Pero hubo un día, no sabía ni que decir, simplemente me quedé pasmado viéndote.

– ¿Qué... qué fue lo que le pasó a tu pelo?

– ̶A̶̶h̶̶.̶̶.̶̶.̶ ̶¿̶̶e̶̶s̶̶t̶̶o̶̶?̶ ̶s̶̶ó̶̶l̶̶o̶ ̶u̶̶n̶ ̶p̶̶e̶̶q̶̶u̶̶e̶̶ñ̶̶o̶ ̶c̶̶a̶̶m̶̶b̶̶i̶̶o̶ ̶d̶̶e̶ ̶i̶̶m̶̶a̶̶g̶̶e̶̶n̶ ̶¿̶̶t̶̶e̶ ̶g̶̶u̶̶s̶̶t̶̶a̶̶?̶

– Entonces, esos parches en tu cara no tienen nada que ver ¿Cierto?

– ...

Ellos te lo habían hecho ¿Verdad?, sabía que eras impulsivo en ciertos momentos, pero nunca hubieras hecho un cambio en tu pelo tan a la ligera, al ser uno de tus "puntos fuertes" como solías llamarlo, era imposible que te lo hayas hecho solo, los mechones disparejos y rebeldes, que de seguro intentaste ocultar, me lo decían.

Después de eso fui a hablar con el director, aún no sabía quienes eran los que te hacían eso, pero tenía la esperanza de que él me ayudará a saberlo. Le mostré la evidencia, de todos las veces que te había encontrado... pero no sirvió de nada, parecía que no le interesaba, incluso comentó en una de las fotos, que de seguro lo inventábamos porque estabas sonriendo... ¿Por qué? ¿Por qué tenías que sonreír justo en ese momento? ¿Por qué no borré la foto? ¿Por qué no querías hablar? ¿Por qué no hice nada al principio?

– ̶P̶̶e̶̶r̶̶d̶̶ó̶̶n̶̶.̶̶.̶̶.̶ ̶n̶̶o̶ ̶q̶̶u̶̶e̶̶r̶̶í̶̶a̶ ̶q̶̶u̶̶e̶ ̶v̶̶i̶̶e̶̶r̶̶a̶̶s̶ ̶e̶̶s̶̶t̶̶o̶

– ¿Qué... qué haces? ¡Aléjate de ahí!

– ̶L̶̶o̶ ̶s̶̶i̶̶e̶̶n̶̶t̶̶o̶ ̶a̶̶m̶̶i̶̶g̶̶o̶̶.̶̶.̶̶.̶

Otra vez, otra vez estabas sonriendo, a pesar de lo que estabas a punto de hacer, seguiste sonriendo como si nada. Y aún así, no pude hacer nada para evitarlo, no podía hablar o moverme, simplemente veía como te acercabas más y más a la orilla... te vi caer, en un momento llegué a correr para poder alcanzarte, pero fue demasiado tarde, vi tu cuerpo tirado en el pavimento, tus ojos seguían abiertos y en tus labios... una sonrisa

Todos en el salón estaban sin palabras, la policía llegó y preguntó si alguien sabía algo, yo simplemente hablé,  hablé de todo y no me detuve, todos nuestros compañeros parecían tratar de procesar la información.

Después del funeral, tu madre se me acercó y me entregó la carta que habías escrito para despedirte de mí. No la leí en ese momento, sabía que me iba a romper frente a todas las personas, así que esperé hasta llegar a casa y encerrarme en mi habitación, donde leí cada palabra con un gran odio y remordimiento a mi mismo, a pesar de que en la carta decías que no tenía la culpa, y que agradecias mis intentos por detener todo. La culpa siguió y sigue hasta el día de hoy.