Unidos Por Una Perfecta Melodía.

Capitulo I

Hay más de quinientas personas gritando eufóricos, no tengo idea de cómo y porque acepté, pero lo hice, aquí estoy, intentando hacerme espacio entre toda la gente con empujones mal intencionados.

— ¡Vamos, empuja!—Me grita mi mejor amiga delante de mí cuando anuncian al primer cantante que abrirá el concierto.

No tengo idea de quienes son ellos pero mi mejor amiga si, lleva un mes hablándome sobre este dichoso concierto que ya me tenía hasta harta. El ruido ensordecedor me aturde demasiado pero sigo andando hasta llegar a la primera fila. Aunque aquí es peor, muchas personas quieren el puesto así se siguen empujando y creo que se han golpeado, lo bueno es que puedo sujetarme de la baranda. Mi mejor amiga es la que no llega a soportar los empujones y los devuelve a mala gana, mirando mal e insultando a varias personas.

Demasiada humanidad para mi ansiedad social.

Todos aplauden emocionados cuando el primer cantante que abrirá el concierto, sale con su micrófono en las manos.

— ¡BUENAS NOCHES, FAMILIA! —Hasta el chico tiene que gritar para que puedan escucharlo. — ¡¿ESTAN LISTOS PARA EL MEJOR CONCIERTO DE SUS VIDAAAS?!

Todos gritan más fuerte, haciendo que quede aturdida. Más de lo que ya estaba.

Cuando todos se medio calman, el baja un poco la voz.

— ¡Primeramente quiero darles las gracias a todos ustedes por hacer un esfuerzo por llegar acá, se que las entradas son caras o siempre llega a presentarse un problema; sin embargo están aquí y no hay nada más hermoso que muchas personas valoren tu trabajo!

Vuelven a gritar y aplaudir, a lo que el chico sonríe cuando mira la cámara.

— ¡Y por eso les vamos con el primer tema...!

Y por no se cuanta vez, gritan. Me da la impresión de que lo hacen mucho más fuerte por la emoción. Cuando el empieza a cantar, el público le sigue, en varias ocasiones, el cantante les da paso al público y ellos lo hacen más aun, encantados.

Creo que van tres o cuatros canciones cuando el chico ríe, conmocionado.

— ¡GRACIAS MI GENTE!

Todo el mundo queda pidiéndole de más canciones pero el chico se va.

Cambian las luces a un color azul muy bonito y los gritos son más fuertes. Joder, van a quedarse sin voz.

Sigo mirando mal al público cuando mi mejor amiga se acerca a mí, hablándome en el oído.

— ¿A que es hermoso? —Inquiere, mirando hacia el escenario.

Cuando veo hacia donde señala, me quedo mirando a un chico aparentemente de mi edad o un poco mayor, carga una guitarra y al parecer es solista, me le quedo viendo sorprendida porque si, es demasiado hermoso, es la primera vez que veo a alguien así, ni siquiera en las revistas.

La rubia a mi lado sonríe un poco divertida cuando me le quedo mirando al chico más de lo que me gustaría admitir.

Al darme cuenta de que me he quedado embobada y no le he respondido, me apresuro a hacerlo.

—Sí, pues...normal. —Ella asiente con la cabeza, divertida.

El chico mira la cámara y creo que he aguantado la respiración al verlo en la pantalla tan...Joder, así se ve todavía más atractivo.

Tengo que despertar de mi ensoñación cuando aun siento empujones en mi espalda y suspiro, irritada.

El se acerca al micrófono que está en el centro del escenario y prepara la guitarra.