El reloj acababa de marcar las seis en punto de la mañana. Jungkook tenía su pierna sobre el muslo de Taehyung mientras este lo abrazaba. Ambos estaban completamente desnudos, y tenían una hermosa sonrisa que adornaba sus rostros. Aquellas sonrisas no eran de ironía o lujuria. Eran completamente diferentes, algo que se podría describir cómo: Sonrisa de enamorados.
Probablemente las personas no lo entenderían. Acusarían a Taehyung de violador y a Jungkook de puta ofrecida por tener sexo con el esposo de su tía. Pero, si veíamos las cosas de otro ángulo, Taehyung no era su familiar cómo tal, además, bien dicen que para el amor no hay edad.
Ambos estaban consientes de que Valeria no se merecía la estupidez qué le estaban haciendo, pero, ¿qué podían hacer ellos? El corazón no se manda, y desafortunadamente... se enamora de quién quiere, y en este caso, cupido flechó a dos hombres que solo buscaban ser felices."Buenos días, mi amor." Dijo Taehyung aún manteniendo su hermosa sonrisa cuadrada, la cual desbordaba una ola de sentimientos nuevos que le causaban ese extraño golpeteo en el pecho.
Jungkook ladeo su cabeza mientras sonreía mostrando sus dientes frontales.
"Buenos días, cariño." Dijo finalmente.
"¿Cómo amaneciste?"
Jungkook suspiró, y dijo: "Agotado." Taehyung soltó una pequeña y ronca risilla al escuchar el tono del menor.
"¿Me pasé?"
"Humm, dejame ver," Jungkook desvió su mirada hacia el techo por unos escasos segundos y devolvió la vista a Taehyung. "No, no me duele el trasero." Taehyung rió un poco más fuertes y aferró el escuálido cuerpo de Jungkook al suyo.
Se quedaron en silencio por unos momentos. Jungkook acariciaba los pectorales de Taehyung sutilmente mientras este aspiraba el dulce y adictivo aroma de su contrario.
"Debemos irnos si queremos llegar antes de que todos despierten." Dijo el menor, irrumpiendo en el silencio como un hilo de humo.
"Creo que tienes razón." Respondió Taehyung mientras ambos se sentaban en aquella cama la cual gozaba de gran tamaño.
Taehyung salió de la cama sin nada que lo cubriera. Se dirigió hacia un sillón rojo de terciopelo dónde había caído su ropa y la de Jungkook hacía tan solo unas horas.
Jungkook lo miró de arriba a abajo, admirando su fornido cuerpo. Taehyung tomó su ropa y se volvió hacia Jungkook, al cuál observó contemplar su cuerpo. Taehyung río."¿Qué? ¿Disfrutas de la vista?" Bromeó.
Jungkook se sonrojó e inmediatamente desvió su vista a un punto aleatorio. Jungkook cerró los ojos al sentir algo impactar contra su rostro.
"Vístete, o todos sabrán que no pasamos la noche en casa." Taehyung sonrió sin mostrar los dientes.
Jungkook miró hacia abajo, Taehyung había arrojado su pijama hacia él. Tomó la camisa y se la puso, empezando a cubrir cada rincón de su cuerpo, mientras Taehyung lo miraba con ternura y amor.
*
Taehyung apagó el auto y ambos bajaron haciendo el menor ruido posible. Taehyung bajó la manija de la puerta trasera con lentitud y se adentró en la casa con cautela, Jungkook le siguió después.
Caminaron por los pasillos de aquella casa, dirigiéndose hacia el cuarto que compartían. Al llegar, ambos notaron que efectivamente, todos dormían plácidamente. Definitivamente no despertarían ahora. Cada uno caminó hacia su respectiva cama y cerraron los ojos para unirse al sueño del resto.*
Las siguiente semana (y última) pasó en un abrir y cerrar de ojos. Era el cumpleaños de Jungkook, con Taehyung gritandole que lo amaba con todo su ser en una hermosa canción. Pestañeó y de nuevo estaba en el auto de sus tíos, regresando a casa. Taehyung manejaba mientras Valeria le hacía plática de futuros planes y salidas, en los cuáles, Jungkook y sus primos no estaban incluidos. A Jungkook le pareció de cierta manera gracioso.
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El Dolor del Perdón || Vkook - Taekook
FanficAl morir sus padres, los Tíos de Jungkook toman la custodia, por lo que se ve obligado a mudarse a Seúl, donde su vida daría un giro drástico, pero ¿fue esto bueno? Eso esperaba. Nunca hubiera imaginado que la palabra «Perdón» lo atormentaria hasta...