Un millón de recuerdos [Terminada]

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Amaya: Estás lista? *La toma de la mano mientras la.ve con una sonrisa*

Luna: *aprieta su mano con la de ella y le devuelve aquella sonrisa cálida* Si! Si es con mi mejor amiga, estoy lista para todo!

Ambas tomaron sus maletas y entraron juntas al aeropuerto. Se preparaban para un largo viaje desde la cuidad hasta su próximo rumbo, París, cuidad del amor el sueño de ambas desde que formaron una amistad sólida

—Vuelvo número 56 con destino a París, porfavor abordar el avión lo antes posible, gracias por su atención

Ambas fueron a dejar su boletos de avión y dejar sus maletas en el portaequipaje. Subieron al avión y se acomodaron.

Luna: Estoy nerviosa... Las manos me Sudán como nunca antes lo habían hecho *su voz se notaba ansiosa*

Amaya: *la mira y toma su mano* No eres la única, también tiemblo del miedo de ir a una cuidad desconocida, pensar en que sera de nuestras vidas...

Luna: *mirándola asiente* Este sueño era de muchos años, desde de salimos por primera vez

Amaya: Ahora lo estamos asiendo, relájate, un gran futuro nos espera tú como una gran licenciada en astronomía y yo como licenciada en literatura

El viaje tardo unos minutos desde lo esperado, les dio tiempo de hablar un rato leer un par de revistas, ver unas películas o series juntas o incluso dormir porque el viaje sería largo, eso sin contar con algo incidente o incluso un aterrizaje para recargar combustible.

Pasaron unas 17 horas desde que emprendieron el viaje, resultaba que era algo aburrido el viajar y si más si era largo.

Después de aterrizar fueron a buscar un hotel cercano pero que sea cómodo para hospedarse unas noches, antes de ir a buscar un departamento que encontraron meses antes de este viaje.

Una vez llegaron al hotel y pedir una habitación con dos camas y servicios a la habitación muy bien implementada, el hotel prometía, era muy buena

Amaya: Date una ducha tu primero, empezaré a guardar las cosas y pediré algo para cenar

Luna saco sus utilices de aseo personal, entro a la ducha y empezó a ducharse. Mientras Amaya guardaba las cosas en el respectivo mueble y pedía algo a la recepción, 2 tazas de té con un crozan para ambas.

Sin duda alguna empezaba una vida nueva para ambas, donde a pesar de todos los problemas, una verdadera amiga se queda contigo a pesar de la tormenta.

CONTINUARÁ....