Etsuko Shimizu Parte 10 - SECUESTRO

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Terminaron las clases y Etsuko acompaño en todo momento a Urube a casa, en ese momento la chica se encontraba sola ya que sus padres no estaban en casa desde el inicio del semestre, a palabras de Urube, habían ido a cuidar de sus abuelos fuera de la ciudad.

—Urube-chan, seguro estás muy adolorida, así que recuéstate en la cama y aquí estarás, incluso los profesores me dieron permiso de faltar estos días para cuidar de ti y ya sabes que lo haré con mucho gusto—habló mientras entraban a la habitación de Urube.

La chica tímida estaba tan adolorida que se acostó en la cama y se quedó dormida sin hacerle caso a lo que sucedía a su alrededor, lo cual Etsuko vio con mucha alegría, esto hizo que se dibujará en su rostro esa sonrisa siniestra y en los ojos se viera un vacío profundo.

Acto seguido empezó a sonar el celular de Urube, era Daiki enviando el siguiente mensaje:

"Querida Urube-chan, espero estés bien, fue algo muy extraño lo que paso, tuve que tirar esos cupcakes a la basura, aún así gracias por la intención y lamento que te haya pasado esto, mejórate pronto para poder vernos más adelante"

—¿Con esta confianza le escribes a Urube-chan?, ahora te toca a ti—dijo para si misma mientras leía con desprecio el mensaje de Daiki.

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—Espero Urube-chan este bien, esto es algo horroroso. Por suerte no me ocurrió a mi también, por un tiempo evitare cualquier tipo de pastelillo, así también no aumento mi peso—susurro el chico mientras dejaba su celular en la mesa de a lado de su cama.

Etsuko dejo dormir a su amiga, mientras ella descansaba le dio un beso en la frente y susurro unas palabras "Esto es solo una prueba de como me sentí al verte junto a ese tipo".

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Etsuko se aseguro de dejar a Urube yacer en la cama y fue a su casa lo más rápido que pudo para traer una bolsa con varias de sus pertenencias, es como si la chica pelirroja estuviera lista, pues todo lo tenía calculado y previsto.

La chica herida despertaba por momentos y tuvo muchos pensamientos que le recorrían la cabeza.

«Daiki, siento mucho dolor, siento que no puedo besarte en la mejilla hasta que mis heridas sanen, no cabe duda que empezaba a sentir algo por ti», pensó la chica tímida para si misma mientras recorría una lagrima por su rostro.

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Daiki se encontraba con la luz apagada y algo pensativo en su habitación, vio la hora en su celular y se sobresalto ya que escucho ruido en el patio de su casa, parece que alguien estaba afuera, así que se asomo por la ventana y no había nadie. Incluso pensó que era un gato corriendo en el tejado, se quedo unos minutos en silencio para escuchar con más agudeza, pero pensó que solo era su imaginación. Al regresar a su cama noto una presencia extraña en su habitación, como si hubiese alguien dentro, así que llamo a sus padres, los cuales no respondieron.

En ese momento se vislumbro una silueta detrás de él y acto seguido se escucho un fuerte golpe que lo noqueo de inmediato. 

Etsuko estaba en la habitación de Daiki, lo dejo en el suelo mientras lo amarraba con una soga y dejo una nota en la cama donde se podía ver lo siguiente:

"Madre, Padre. Lamento ser una decepción para ustedes, me he sentido muy mal desde que llegamos a esta ciudad, extraño a mis antiguos compañeros de clase y no me gusta esta ciudad, no tengo amigos y me cuesta mucho hablar con los chicos de mi grupo. Voy a irme de casa, se que ustedes son felices en su nuevo trabajo y deseo que siempre estén bien, yo siento que debo aclarar mi mente, pero no se preocupen por mi ya que estaré bien. Después de todo ya tengo 20 años y puedo hacer esto, es mi decisión. Los quiere Daiki"

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Obsesión Yandere - Más allá de todo ETSUKO SHIMIZUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora