The ancient kill (Ultrakill x Shumatsu no valkyrie)

ACT III: Desproposito en lo Divino

Una mesa rota, el suelo destruido, irá descontrolada, rabia derramada, sangre caliente.

Sentimientos tales que sentía el rey del olimpo, esa frustración, dos dioses griegos, dos divinidades que estaban por encima de todo lo visto fueron masacrados y tratados como simple basura que servía para mantener viva a un robot.

- ¡Los mataré, los matare a todos!

- Padre, por favor...

El dios de gran tamaño y cabello rubio fue sometido por una bofetada del viejo que lo dejo en el suelo, su visión era ciega ante los hechos acontecidos.

- Ares, por favor cállate, no estoy para juegos, todo aquello que representamos, todo aquello que conlleva ser un dios fue pisoteado, ¿O acaso crees que un dios solo debe quedar con el culo aplastado en el trono y ver cómo todo aquello que construyó es pisoteado? ¿Eh?

- Perdón, padre.

Zeus apretó los puños a tal punto que salía sangre por ellos, sus ojos demoraban unas pupilas blancas que reflejaban la impotencia, el odio de aquel rey que veía como su reino era escupido en la cara.

- No permitiré esto, ya fue suficiente, yo seré el siguiente.

- Pero, Zeus...

- Sin peros, no me importa el orden, no importa si rompo las reglas, esto es inaceptable y lo saben.

Tanto Hermes como Ares guardaron silencio y acataron las órdenes de aquel, que pese a ser padre de ambos, seguía siendo su rey.

Por otro lado

Brunhilde veía como aquella máquina masacraba con todo lo que se le ponía en frente, tripas y sangres caían a cantidad, sus ojos no podían ver a otro lado, tal despliegue de odio, tal despliegue de sangre, era simplemente hipnótico.

- Tesla.

- ¿Si?

- ¿No tienes miedo de el?

- ¿Por qué he de tenerlo?

- Es decir, míralo, lo hace ver tan simple, tan...hermoso, es una masacre carajo, esa cosa se alimenta de sangré, es, solo es raro.

- Brunhilde, aún no lo entiendes. Aún no ves eso que yo veo, mira atentamente, observa como asesina, observa como arrasa con todo, demonios, dioses, es poético que al final del día, divinidad o no, sigue siendo carne, sigue sangrando, sigue sirviendo de combustible. Es un sentimiento excelso que deja bastante claro que, tenga etiqueta o no de ser "superior", no vale más que combustible, solo sirve para que aquello que fue creado por el hombre siga de pie, nada más.

- Tesla, creo que estás obsesionado con esa cosa.

- No, no lo entiendes, no entiendes lo que hay detrás de el, aún no escudera, pero lo entenderás.

La mujer solo miro a Tesla, ese científico, ese genio, esa eminencia del avance humano, ¿Loco? O ¿Visionario de la verdad?.

Sin más, se fue dejando al científico solo que seguía expectante a la pantalla, entre los largos pasillos se notaba un silencio mortífero, su caminata paro, su mente divagaba, a sus ojos todo se desvanecía, todo desaparecía y se convertía en escombros donde predominaba la nada, solo, desastre, caos, todo aquello que se construyó reducido a basura.

Las lágrimas traicionaron a su dueña y se escaparon, sus ojos azules perdían su color quedando en un gris desgastado, sin alma.

Sus piernas dejaron de funcionar cayendo inerte al suelo, ese suelo destruido.