|学修 |
Dos semanas de clases han transcurrido desde el nuevo inicio escolar, es poco tiempo y es comprensible que yo siga sin acostumbrarme a la nueva dinámica en mi vida, lo entiendo más no lo soporto.
Intento adaptarme y olvidar cómo vine actuando durante tres años seguidos, pero no me es sencillo, me siento realmente extraño e incómodo llegando al medio día a mi casa y no pasada las tres o cuatro de la tarde, no tengo que revisar los expedientes de mal comportamiento, tengo a Akabane cómo compañero de clase, la clase E ya no existe, mi señor padre ya no es director en la casa de estudio a la que asisto, la estructura de las clases es levemente diferente. Realmente me incómoda no tener labores que desempeñar más allá de mis propias responsabilidades como estudiante, de alguna forma eso me estresa.
Tener tanto tiempo libre es... Asfixiante.
No es grato, el nuevo horario de mi día a día es desagradable, demasiadas cosas han cambiado desde mi graduación y yo lo entiendo, se que implica un cambio pasar de secundaria a preparatoria, pero esto que estoy viviendo me parece ridículo. No es posible que yo termine mis deberes, práctique mi rutina de estudio, que ahora me toca hacer desde casa al ya no haber un grupo de estudio en el kugunigaoka, y aún así me quedan muchas horas libres, son casi cuatro horas que tengo antes de que mi señor padre llegue de su nuevo trabajo, tras eso, solo cenamos en un sepulcral silencio y el día culmina.
Me es agobiante... Es contradictorio, pero el tiempo libre no es algo que me agrade para nada, soy una persona que debe tener la cabeza ocupada en algo todo el tiempo, de otra forma me siento inútil al estar desperdiciando tiempo de esa forma.
No estoy acostumbrado a este ritmo, tampoco lo estoy al voto de silencio que me está aplicando mi progenitor, normalmente no hablábamos de temas superficiales o sin importancia para acabar con el tiempo libre que de vez en cuando sobraba, nunca tuvimos ese tipo de relación, si bien teníamos que dirigirnos la palabra de forma obligatoria por y gracias a la administración del instituto, ahora que ya él no está dirigiendo el kugunigaoka y desde que tuve que decirle que no estoy en el consejo estudiantil, no ha preguntado por mis estudios.
Simplificando el asunto, no hay nada de lo que podamos hablar.
Mi padre, al que aún no me acostumbro a nombrar como tal y no como director, tiene otro trabajo, una pequeña empresa que fundo tras haber sido delegado de su puesto como director y también haber sido expulsado indefinidamente del ambiente educativo. Seria un insulto pensar que Asano Gakuho se quedaría sin hacer nada, tiene el suficiente dinero como para estar tranquilo seguramente por el resto de su vida, no obstante, él jamás se quedaría en su morada sin hacer nada, en ese aspecto admito que soy igual a él, no somos personas que disfruten del tiempo libre.
Mis ojos pasaron de estar en el libro ha fijarse en el toque en mi hombro, de esa mano subieron hacia el rostro de Ren dándole una cierta severidad en mi mirada, una amenaza silenciosa. No es su culpa que mi vida haya dado este giro, su objetivo es animarme y lo tengo claro, pero no comparto sus intereses como para querer perder el tiempo en ellos, poseo cosas más importantes que hacer.
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Alejandria [ AsaKaru ]
Fiksi PenggemarAsano Gakushū, el hijo único de Gakuho Asano. Siendo un chico ejemplar, el mejor en su instituto por varios años seguidos, gozando de un atractivo físico indiscutible y un sistema inmunológico de hierro, un chico multi-talentos, políglota, de aparec...