El lunes después de la final, me tocó mudarme a la casa que se estaba haciendo pedri, ya me he dado el lujo de irme a vivir con mi novio. En mi casa no hay nadie viviendo ya y he dejado a Eric solo en la urbanización, pobrecito.
Esta casa tiene más espacio por si en un futuro tenemos peques, pero cuando pedri se hizo esta casa no tenía el pensamiento ni de conocerme ni de pensar en niños. No entiendo para que quería una casa tan grande viviendo solo.
Hoy pedri jugaba el último partido de la temporada y mañana jugaba yo el mío, encima jugamos los 2 en casa así que muchísimo mejor.
Hemos salido a comer Arya y yo después del entrenamiento mientras los chicos están concentrados ya, el partido es a las seis y media.
- Mañana ganas tu primera liga eh-. Le dije. - Lo sé, he tenido bastante suerte, llego en el mercado de invierno y pum, la liga para nosotras, aunque también te digo que contribuí-. Dijo poniéndose medallas. - No te lo niego corazón-. Dije bebiendo de mi copa de vino.
Arya lleva fichada desde el mercado de invierno, aunque la final no la jugó por molestias.
- Esta pasta me encanta de verdad-. Dije saboreandola. - Está riquísima-. Respondió. - Es que mi novio me trae a sitios riquísimos-. Le dije orgullosa. - Con razón has dicho tú de venir aquí-. Dijo riéndose. - Bueno, tú con Eric que tal, que últimamente no me contáis nada ninguno-. Dije pinchando con el tenedor.
Se limpió la comisura de la boca y se puso seria.
- Pues a ver, como te lo digo... es que no queríamos decirlo... pero fue inevitable porque íbamos cuesta abajo y sin frenos. Lamento decirte que estamos mejor que nunca, envidiosa-. Dijo bromeando al final. - Me habías asustado hija de puta-. Dije sorprendida.
Empezó a reírse tanto que se puso roja y empezó hasta a llorar.
- Cambiando de tema drásticamente, el vestido te queda genial-. Dijo.
Llevaba un vestido rojo hasta por debajo de las rodillas ceñido totalmente al cuerpo.
- Gracias tía, me fijé antes, de donde es la falda?-. Le dije al ver que su falda de cuero negro me seguía llamando la atención. - Stradivarius-. Dijo con una sonrisa.
Le sonreí de nuevo, sabiendo que me la iba a comprar al día siguiente.
- A ver cómo juegan estos hoy-. Dije con preocupación. - Entiendo que sea nuestro equipo, pero el que más nos importa es en el que jugamos, nosotras campeonas de liga... ellos pues hoy se decide, el madrid ayer empató así que tenemos los mismos puntos, si ganan esta tarde campeones de liga nosotros-. Dijo con la copa en la mano. - Pues a ver... porque sino tendría a Pedri de morritos unos cuantos días-. Contesté. - Ahora también vienen las 2 eurocopas de golpe, que no se por qué las han puesto casi juntas-. Protestó Arya. - Joder, las eurocopas, yo estaré con Pedri para arriba para abajo viéndolo de jugar.-. Dije. - Y yo con Eric, estaremos juntitas-. Dijo sonriendo. - Tía...-. Dije preocupada. - Que pasa???!!-. Dijo sobresaltandose. - Que no se si me van a convocar para españa, que igual me quedo fuera-. Dije. - Galya, tú diste el comunicado a la federación que preferías jugar con españa que con brasil-. Me tranquilizó. - Y viendo el nivelazo que tienes y la pedazo de temporada que te estás haciendo... te convocan seguro-. Aseguró. - Yo tampoco sé si voy a ir con Polonia-. Dijo.
La miré mal a posta.
- Como no te van a llevar con Polonia?? Tu eres la lewandowski del equipo polaco de las femeninas-. Le dije.
Empezó a reírse.
- Pedri ayer se cortó el pelo, y esta mañana se afeitó-. Dije mordiéndome el labio tras terminar la frase. - Uy, eso te encanta-. Dijo en tono pícaro. - Que si me encanta? Mira no le he pedido que se quede para poder desayunarmelo porque tenía que irse, que sino se iba más que motivado-. Dije sincerándome. - La sinceridad ante todo-. Dijo Arya. - Yo me acuerdo que la primera vez que lo hice con eric fue antes de un partido en barcelona, que jugaban a las nueve-. Confesó. - Seguro que fue el partido del gol de cabeza que metió-. Dije haciendo memoria. - En el clavo chica-. Dijo tomando más vino. - Vamos a terminar borrachas con tanto vino y mañana las piernas nos van a bailar-. Dije riéndome.
