Danzando entre las flores [satosugu]

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El sol era el mismo al igual que las estrellas. El camino hacia casa era igual, el mismo árbol de manzanas enorme por el que pasaban, muchas casas estaban pintadas exactamente igual y otras que cambiaban la fachada, Suguru caminaba por esa calle desde que dio sus primeros pasos, lo único que cambio fue su casa ya que sus padres fallecieron hace algunos años y este modificó la decoración del hogar. Pero fuera de eso no había cambiado nada, solo las flores, que morían y volvían, a veces de diferentes tamaños y a veces con diferentes colores, era hermoso

saludo a las mismas personas que conocía desde que era un niño o adolescente. entro a la tienda de siempre, comprando productos de las mismas marcas y pagando casi la misma cantidad de siempre y volvió a su casa, literalmente como casi todos los días sin contar los dias que trabajaba muy temprano en la mañana  

Suguru abrió la puerta de su casa con una sola mano y con la otra sostenía la compra de la mañana para evitar que la leche se cayera y dejara un reguero. Suguru vivía solo en la casa que antiguamente era de sus fallecidos padres, tenía familia pero vivían a cientos de kilómetros de distancia y por lo general solo los veía en navidad

Termino de preparase de desayunar sentadose en la mesa de la cocina qué quedaba enfrente de una ventana donde podía ver un pequeño árbol de limones. Suguru tomaba su café negro mientras leía el periódico y algunas canciones se reproducían en la radio qué estaba en uno de los estantes de su cocina. Calmado leía las noticias y la propaganda eso si, sentía que su mañana estaba siendo muy pacífica de lo que estaba acostumbrado hasta que miles de golpes se empezaron a escuchar en su puerta de entrada y no solo con eso, también tocaban el timbre como un maldito loco

Suguru se levantó para ver quien era y posiblemente golpearlo pero se detuvo cuando vio que la persona que estaba tocando la puerta como loca era Shoko aunque no entendía porque estaba tocando la puerta como si pudiera ayuda y la fueran a secuestrar

Iba a tocar otra vez pero ahora si Suguru abrió la puerta con una cara de pocos amigos

-hola

-te estuve esperando casi una hora, tuve que venir hasta tu casa porque no llegabas y ya es tarde... ¿Por qué no te has alistado? - Suguru no sabía de que estaba hablando

-¿para qué?

-¿Cómo que pasara qué? Suguru, hoy regresa satoru - se quedo con una cara como si estuviera procesando la información que me acaban de dar

-¿hoy? Estas loca, satoru regresa el 4 - volteo a ver su calendario...era 4 de agosto de 1957 - ... Es 4

-si se que es 4, así que vamos ya a la estación de trenes, a veces me sorprende tu estupidez - aun estaba procesando la información cuando lo entendió

-¡Shoko porque no me avisaste con tiempo que hoy regresa satoru!

-eres un...

-vamos, qué se nos hace tarde - tomo su abrigo y jalo a su amiga hacia el auto para empezar el viaje hasta la estación de trenes

Ya habían pasado 2 años desde que satoru se fue a calorina del norte porque en su trabajo lo habían trasladado ahí, pero por fin lo habían regresado a su puesto anterior o bueno, más que nada a su cuidad natal en el estado de virginia ya qué le habían dando un asenso muy generoso

Los dos esperaban en el aeropuerto, no estaban seguros a que hora en especifico llegaría el avión de satoru, y tampoco si el pasaría por ahí, pero ellos tenían mucha fe, Suguru y Shoko miraban por todos lados esperando ver a su amigo Shoko incluso estaba saltando para mirar por encima de las personas que estaban llegando  Siguieron con su búsqueda hasta que en su campo de visión pidieron ver a un hombre demasiado alto, cabello blanco, vestía de forma elegante y tenía su maleta de cuero en la mano.