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Nayeon y Jeongyeon comenzaron a caminar hacia el bosque, donde no había nadie ni recepción, para que nada arruinara su cita.

-¿Qué tienes en tu mochila?- preguntó Nayeon a la otra.

-Verás. Es... Algo estúpido en realidad.

-No creo que sea estúpido. ¿Dónde está tu collar?

-Oh, no lo traje. Tenía miedo de perderlo. Ella es tan precioso para mí.

Nayeon sonrió y apoyó la cabeza en el hombro de Jeongyeon mientras continuaban caminando y mantenían los dedos cruzados. Caminaron durante mucho tiempo hasta que se detuvieron frente a un arroyo. Jeongyeon agarró su mochila y empezó a buscar algunas cajas y un mantel.

-Yo... Organicé un picnic. Si quieres, por supuesto.

Nayeon sonrió. -Por supuesto que me gusta. Aunque... ¿Sabes qué me gustaría comer?

-¿Qué? Hice pasta al-

-A ti.

-Oh, no traje el tea.

Nayeon puso los ojos en blanco y se rió, colocando sus labios sobre los de Jeongyeon, que pasaron de secos a húmedos en cuestión de segundos. Jeongyeon apretó la cintura de Nayeon y Nayeon hizo lo mismo y sus labios se movieron juntos lentamente. Ya no era un beso desesperado y lleno de lujuria, existía la conciencia de poder estar juntas, de sentir algo grande, algo que no desaparecería en un abrir y cerrar de ojos, ni siquiera en el espacio de trescientos años, o tal vez debería decir doscientos ochenta y ocho.

Jeongyeon se separó por falta de oxígeno y apoyó su frente contra la del otro. -Qué hermosa eres y qué suerte tengo.

Nayeon la abrazó, abrazándola con fuerza. -Te...- Se detuvo en el aire. Las palabras salían espontáneamente pero, por miedo, las había bloqueado.

Jeongyeon entendió lo que estaba por suceder y no se sintió decepcionada, de hecho estaba feliz de que él estuviera a punto de decir esas palabras.

Decidió pronunciarlas para ambas. -Te amo, Nayeon. Y, si aceptas pasar el resto de tu vida conmigo, prometo intentar hacerte la persona más feliz del mundo. No sé si lo lograré, pero lo único que no intentaré, pero estoy segura de que lo haré, es amarte.

-¿Por qué no te conocí antes?- preguntó Nayeon separándose del abrazo y dándole un firme beso en los labios.

Se sentaron sobre el mantel y Jeongyeon comenzó a abrir las cajas de vidrio en las que había colocado la cena. Cada una tomó una y empezaron a comer en silencio. El arroyo corría rápido, mientras el viento movía los árboles. Nadie podría haber interrumpido ese momento.

-El ambiente es muy tranquilo aquí. Mis padres siempre me llevaron aquí.

-Oh Jeongyeon...- La chica miró al otro. -Me preguntaba... Me dijiste que son tus padres adoptivos.

Jeongyeon asintió, ya entendía lo que Nayeon quería preguntarle. -No sé quiénes son mis verdaderos padres, pero ni siquiera estoy enojada con ellos, tal vez tenían sus razones. Y entonces... Nunca habría conocido a mis padres así. Y... Probablemente yo tampoco te habría conocido nunca, así que estoy feliz con todo lo que me pasó, porque al final me trajeron hasta ti.

Nayeon sonrió y miró hacia abajo. -Sufrí mucho pero... Si eso significa que seré feliz con alguien más entonces...

-¿Alguien más como quién?

-No lo sé...- Levantó la vista. -Tengo tantos pretendientes...

-Ah, claro. ¿Alguien en particular que te haya llamado la atención?

-Tal vez una chica que me gustaría llevar al hotel esta noche.

-Y... ¿Y si nos vieran y...?

-¿Qué me interesa? Tarde o temprano la verdad saldrá a la luz, ¿verdad? Y luego... No quiero renunciar a ser feliz ahora que tengo la oportunidad.

Jeongyeon sonrió con satisfacción. -Esto es exactamente lo que quiero para ti. Simplemente no actúes sólo por miedo a los demás.

-Jeongyeon, ¿estás dispuesta a vivir rodeado de paparazzi estúpidos y de la web que no hará más que criticarnos?

-¿Bromeas? No me importa lo más mínimo lo que digan. Así como te defendí antes como fan, te defenderé ahora, siempre con mi fanpage.

Nayeon se rió. -¿¡Tienes una página de fans para mí!? ¿Sigue activa?

Jeongyeon se sonrojó. -El último post es de ayer.

-Oh Dios mío... Eres un gran fan. ¿No vas a difundir mi información privada?- bromeó.

-Pude venderloa... No está mal. Sabes, fui yo quien le dijo a todo el mundo que estás saliendo conmigo.

Nayeon se rió. -Si fueras cualquier otra persona te habría creído.

Jeongyeon sonrió. -Es bueno que me conozcas lo suficiente como para confiar en mí.

Estoy emocionada por el próximo libro porque es una historia bastante soft y dramática

Scandalous|2YEON|ESPDonde viven las historias. Descúbrelo ahora