Prólogo

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Demasiado tiempo me debatí en la añoranza de abrazarla,

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Demasiado tiempo me debatí en la añoranza de abrazarla,

la mirada clavada en la lejanía de su perfume,

demasiado tiempo permanecí en la soledad,

así que ya no se callar este deseo.


Cada noche me dedicaba a pronunciar este hermoso verso mientras la oscuridad de la noche y la luz de las estrellas me bañaba con su esplendor.

Cierro mis ojos disfrutando de la brisa que impacta en mi cara y mis brazos descubiertos, disfrutando de su frescura. Era una difícil decisión estar lejos de la familia, no poder escuchar sus risas, sus malos chiste, el dulce olor de la comida de mi madre y lo poder ver sus rostros diciéndome que todo estará bien.

Pero no solo debía pensar en mí, Era egoísta de mi parte. Mi deber era capacitarme para guiar a mi manada con sabiduría y humildad, pronto ocuparía el cargo de Alpha. Un decreto que no podía rechazar. Lo que representaba una gran responsabilidad. Anunciando que mi vida tendría que cambiar.

Sin embargo, la mayoría del tiempo tenía en mi mente la idea de una sola cosa. Encontrar al amor de mi vida, a mi compañera, a mi futuro amor, mi futura mitad quien iba hacer la medicina para este nuevo dolor de cabeza.


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