30 Minutos Que Cambiaron Todo -COMPLETO-

Capítulo 45: Una Cosa para Salvar Personas

DISCLAIMER: Esa parte de este mundo y esos personajes que has visto antes pertenecen a su Creador: JKR. El resto es mío, aunque no puedo dejar mi trabajo diario, ya que no hago $$$ de esto...

¡A/N: WOW! ¡Qué respuesta al último capítulo!

Lectores a los que les gusta Cliffies: bueno, si había alguno, se lo guardaban para sí mismos.

Alrededor de 2/3 de los lectores esperan que salve a Jasmine (Mamá de Luna)

Out 1/3 se pregunta si esto es Jasmine. Y...

Había uno que espera que ella muera.

Un lector me llamó una "chica malvada." ¿Mal? Quizás. La chica está totalmente equivocada. (1) demasiado vieja, y (2) tengo la fontanería equivocada.

CAPÍTULO CUARENTA Y CINCO: UNA COSA DE SALVAR A LA GENTE - EL COMIENZO.

JUEVES, 13 DE OCTUBRE, 1989 – THE ROOKERY, OTTERY ST. CATCHPOLE, DEVON, REINO UNIDO.

La niña rubia de nueve años recientemente convertida con ojos azul pálido descendió las escaleras de caracol desde el último piso de la torre. Todavía estaba vestida con su ropa de noche y podía escuchar los sonidos melódicos mientras su madre tarareaba una melodía mientras cocinaba el desayuno. Como lo había hecho desde que pudo caminar hasta el desayuno por su cuenta, en otras palabras, siempre y cuando pudiera recordar, sostenía su unicornio de peluche favorito en un brazo. La única señal externa de que ella no era la niña que una vez había sido – aparte de su tamaño, que era promedio para su edad actual – era una varita que había marcado detrás de su oreja derecha.

Luna Lovegood estaba un poco perdida en sus pensamientos, lo cual no era una situación inusual para la niña observadora y reflexiva. Aquellos que no la conocían supondrían que era un idiota sin cerebro o que estaba perdida en algún sueño perpetuo, porque parecía tener una expresión lejana cuando no estaba involucrada en el trabajo del curso, la lectura o la conversación. El hecho era que ella siempre estaba pensando. Casi todo lo que había visto o escuchado había desencadenado un ejercicio de pensamiento para la niña. A veces conducían a ideas, más a menudo, el pensamiento no llevaba a ninguna parte o se perdía ante los Nargles o Wrackspurt o cualquier otra bestia invisible que pudiera confundir incluso a las mentes más agudas. En algún momento las ideas llevaron a la expresión, más a menudo se almacenaban en su mente para un posible uso futuro.

Desde que sus amigos le habían contado lo que le había sucedido a Luna de Sensei en otra línea de tiempo, se había ido a la cama cada noche, agradecida de que nada hubiera sucedido y preocupada de que tal vez el próximo amanecer trajera el temido evento. Esperaba que esta línea de tiempo fuera realmente diferente y no solo no tendría que experimentar la muerte de su madre, durante años su inspiración y mejor amiga, pero que el evento que había matado a la madre de la otra Luna nunca sucedería en absoluto. También esperaba que si ese evento era tan inevitable como el amanecer, esta vez estaba preparada para evitar que ocurriera el peor resultado.

El problema con la advertencia era que tenía tan poca información. Ella había hecho todo lo posible para ocultar su verdadera reacción de sus amigos cuando le dijeron que había una posibilidad de que su madre tendría un terrible accidente en algún momento de este año que podría bueno, resulta fatal. Ella fue honesta cuando les dijo que creía que no importaba el resultado, esta vez sería diferente porque tenía tan buenos amigos que estarían allí para ella. Aún así, esto no le impidió preocuparse tanto por su madre como por si realmente podría hacer algo para salvarla si ocurriera lo peor.

Cada día era una victoria. Cada día era otro día con su madre, de la que Luna estaba decidida a aprovechar al máximo por si acaso. No le había dicho a su madre lo que sus amigos le habían dicho porque estaba de acuerdo en que podría empeorar las cosas. Ella realmente creía que si su madre tenía un hechizo de accidente creando, la mejor oportunidad de supervivencia de su madre era si alguien estaba allí cuando sucedió. Su papá estaba ocupado con su trabajo con el Quibbler. Ella tenía sus propias actividades que la llevaron fuera de casa, sobre todo el Club y los días que pasaría con sus amigos siendo tan normal una niña de nueve años como la segunda mejor estudiante de O.W.L en su año podría ser. Ella había expresado sutilmente sus preocupaciones a su madre y casi había extraído un juramento de brujas de su madre de que no habría creación de hechizos sin alguien más cerca, dijo, por si algo sucediera.