— Tío ¿usted cree que las personas malas puedan tener mejoría? —
Días antes al cumpleaños de Jiang Cheng y todo el gran escándalo que esto sería, Jin Ling no dejó espacio en soledad a quien consideraba la única luz en su oscuridad. Y viendo como este tampoco se quejaba no iba a perder el tiempo con inseguridades tontas.
— Quizás es un cliché muy mal gastado pero pienso que todo aquel que ha sido malo en su vida tiene momentos de lucidez y aquellos que han sido buenos tienen un tropiezo que los hace ver como villanos. De no ser así no estaría aquí contigo en este momento ¿no? —
Jin Ling asintió ante esa corta duda pero aun así no lograba sacar un conclusión final.
— Entonces ¿Xichen alguna vez tuvo su "momento de lucidez" o es una excepción a la regla? —
Escuchó la risa seca de su tío retumbar por las paredes de su habitación donde yacían tirados uno al lado del otro comiendo alguna porquería y viendo una serie basura solo para matar el tiempo.
Adoraba esa risa tan fuerte y llena de valor de una manera enfermiza y no tenía miedo en maravillarse ante esa sensación que calentaba su pecho.
Su tío era su maldito ídolo y solo podía anhelar el ser así: reir con gracia ante sus desgracias y mirar con firmeza al futuro.
— Supongo que sí. aunque en su caso primero tuvo la lucidez de estar conmigo y luego la maldad de hacerme mierda. Ya sabes, el orden de los factores no altera el producto.—
Ahora la risa tenía el eco de dos tonalidades distintas y pequeñas burlas que solo buscaban idiotizar al Jiang pero que eran tomadas de buena gracia.
Pero quitando las risas del medio, lograba entender la respuesta de su tío y hasta él mismo le daba el sentido necesario para aclarar sus propias dudas.
Siempre se preguntó el ¿porqué yo, Ruohan? y jamás encontró una respuesta clara. Comenzar por definir el bien en su asquerosa maldad era un buen camino para tener la respuesta que el Wen siempre le negó.
Y muy al estilo de Xichen, este también mostró su lucidez antes de destruirlo por completo pero ¿por qué sentía que seguía en lucidez y a veces era tratado mal? ¿era tan heredable eso de fijar los gustos en algo tan cuestionable?
— ¿Algo qué mi sobrino quiera contarme? —
La voz de Jiang Cheng lo hizo despabilar.
Negó, no porque no confiara en él sino porque aún no se sentía listo para dejar ir a la única persona que le demostraba amor en el más sucio significado de la palabra.
Claro, ahora tenía a Jiang Cheng y este poco a poco le iba enseñando lo que era estar limpio de tierra y polvo pero costaba mucho dejar atrás eso que te deño y a conciencia de ello, consumiendo a voluntad.
— Solo me preguntaba que tan dificil debe ser estar en tu posición. Amar y ser dañado como si estuvieras nadando entre tantas agujas. Si esa persona que va colocando cada una de ellas en vez de sacarte es capaz de sentir culpa o simplemente lo disfruta. —
Jiang Cheng esta vez guardó silencio.
Jin Ling sabía bien la respuesta de su tío y agradeció que este no dijera más. Estaba más que claro que el masoquismo propio solo era alimento para una mente retorcida como la de Xichen y estaba más que claro que para Ruohan también.
Quizás ese viaje podría enseñarle como soltar pero de momento no tenía mayores motivos para hacerlo.
ESTÁS LEYENDO
➵ Independiente; Jin Ling.
Fanfiction➵ Resumen: "- ¡Tu siempre has tenido la familia perfecta! ¡Estás lejos de entender que es lo que pasa por mi cabeza! Seguía mordiendo sus labios con el fin de detener las lágrimas. Sizhui quería acercarse para darle consuelo pero Jin Ling lo alejab...