Tentación

006

Era verano y el calor era insoportable pero no matador en ningún aspecto. La poca brisa mantenía tranquilo a las personas.

El cambio de ambiente se notó al entrar al gran edificio, la torre era elgante y bien cuidada, jóvenes, adultos, etc. Subían y bajaban de las escaleras, otros pasaban de lado saludando a quien era el mayor de ambos.

El pequeño azabache caminaba mirando a su alrededor con asombro, sostenido de su mano derecha por su mayor, quien guiaba su camino hasta el ascensor. El menor veía a través del vidrio la altura que iban tomando mientras subían hasta el quinto piso.

La emoción siendo palpable al estar en ese lugar. Cuando su Hyung le pidió que lo acompañara, no dudo ni un segundo en aceptar. Amaba salir con él, sabía que sería interesante todo lo que vería y no se equivocó.

Pues era la primera vez que salía para conocer y saber sobre el trabajo de su Hyung.

Volteó en varias direcciones; todo delicadamente arreglado y en orden, el azabache sonrió al ver a la conocida persona amiga de su Hyung. Pidió el permiso para soltarse de su mano que seguía entre las del mayor. Quien aceptó soltando su mano para que sea adecuadamente saludado por su amiga que llegaba con una gran sonrisa en sus labios mientras veía a su pequeño hermanito.

La joven miró al chiquillo con cariño y se acercó para abrazarlo, luego pasó sus manos por dónde el mayor estaba para saludarlo de paso.

Agarrando al pequeño por su muñeca de forma agradable, la joven los guío hacia lo que parecía ser una oficina, amplia y ordenada con pocos muebles y todo del color blanco como la nieve.

–Es un lugar muy bonito.

Dijo el pequeño que observaba con atención su alrededor, la joven rió bajito asintiendo y agradeciendo el halago por las palabras. Quien anteriormente había corrido a ordenar como podía hacer las cosas, tras ver qué su amigo estaba subiendo a su piso. Y de paso siendo acompañado por el adorable azabache que ahora observaba con sorpresa en su rostro, era demasiado adorable.

–Jiulien, necesito que me des todos tus datos para que mañana mismo comiences con nosotros, las pasantías son pesadas... Creo que entre más rápido mejor. Ya después vendrán más cosas y debes...

–Estar más que disponible, preparado y activo. Lo sé. No te preocupes por eso.

–Llamaré a tu compañero que había llegado más temprano.

–Y no es aplicado pues.

–Ya había pedido el puesto, le gustó también trabajar con nosotros al igual que vos. Que bueno que se decidieron por vincular aquí.

El menor se mantenía tranquilo sin decir nada, el frío por el aire acondicionado lo mantenía escondido en su sudadera color azul misma que anteriormente lo había sofocado por el calor de afuera.

El toque en la puerta llamó la atención de los tres, la joven le pidió al pequeño abrirla ya que ellos seguían pegados en la computadora.

Así lo hizo. El azabache se levantó de su puesto para abrir y encontrarse con un chico azabache de piel pálida, blanca como la nieve, el joven muchacho apenas visualizó al menor le sonrió. Pidió saber por 'Shenna' y entró rápidamente cuando el menor le dió entrada.

El niño se lo quedó observando durante todo el resto de la tarde, habían pasado como dos horas hasta que el azabache lo miró por simple reflejo, pero para segundos después obsevar a su amigo compañero de universidad, Jiulien seguía pegado a la computadora.

–Jungkook.

Llamó Jiulien sin mirar, Jungkook con un sonido de atención, giró la mirada hacia quien le había llamado. Jiulien le explicó unas cosas, pero Jungkook miraba de vez en cuando al pequeño azabache de mirada fría y sonrisa tierna. El niño, quien tenía algo de parecido, no muy visible en su compañero. Jiulien al ver a Jungkook le afirmó a su amigo quien era el pequeño.

–Mi hermano... Taehyung.

Pasaron las horas y todos salieron de la oficina para ir a almorzar con calma después del ajetreado día.

–¿Querés comer hamburguesas, Tae?.

Jungkook observó al niño, quien asintió con duda. Taehyung tenía un descontrol en su alimentación, comía lo único que le provocaba, dejando así sean los platillos más exiquisitos de lado. Jiulien rió y jaló de su hermano menor.

–Parece que no le gusta.

La joven sonrió para separarse de sus amigos e ir a otros pisos, estos dos junto al niño, bajaron por el ascensor entre charlas que eran escuchadas con atención por parte de Taehyung. Aunque su mirada de ves en cuando pasaba a dónde Jungkook estaba.

'Es muy bonito'

Pensó para si mismo con sus mejillas sonrojadas por sus pensamientos, entendía que le había gustado Jungkook, entendía a sus diez años que había experimentado lo que sería:

'Encanto a primera vista'

Apenado se sentía por ser tan pequeño y pensar en esas cosas tan adulterias según las novelas de su mamá.

Su vergüenza fue mayor al saber que era un niñito al lado de ese joven adolescente de sonrisa de conejo y ojos brillantes en negro.

–Hola, soy Taehyung.

Habló Finalmente, mirando a Jungkook. El mayor lo observó, viendo la manita del menor tendida en el aire, esperando por él, sonrió a medias mientras estrechaba su mano con la contraria. La forma gentil en que Taehyung le sonrió con brillos en sus ojos, hizo a Jungkook suspirar mientas tragaba saliva duramente, soltó su mano para continuar comiendo.

–Soy Jeon Jungkook.... Mucho gusto pequeño Kim.

Y Taehyung creyó que después de eso, su acelerado corazón le dió indicios de que se había enamorado en pocos segundos de haberle hablado al joven llamado Jungkook.

Jiulien vió el intercambio de palabras entre su hermanito y su amigo/compañero. Fue tan amable de parte de Taehyung el trato que le dió a Jungkook. Tan lindo e inocente.

Y así era, el pequeño Kim solo sintió sus mejillas ardiendo por solo ver a Jungkook, su estómago contraerse ante el torbellino emocional que estaba sintiendo. Se abrazó a su hermano buscando mermar las sensaciones que a su corta edad, poco/nada sabia/podía definir.

Jungkook de manera poco bien pensada; observó al menor con algo de curiosidad, era hermoso y no lo iba a negar, pero se dejó congelar la mente por el frío refresco para no pensar cosas no muy bien.... No muy bien vistas si se trataba de un pequeño niño.

Después de la hora del almuerzo, ambos jóvenes subieron con Taehyung al quinto piso para seguir con sus trabajos.

Cinco y media de la tarde y Taehyung la se estaba despidiendo de Jungkook. El joven había entablado un pequeño tema que se vio interesante para Taehyung al momento, después de eso, se separaron dejando apenas una reverencia; Taehyung entró al auto de su hermano para acomodarse en el asiento trasero tras él sentir el sueño.