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"Miriam"
"Un par de horas antes"
Tenía que ganar tiempo, en lo que Camila y Sareth llegaban a quien tuve que marcarle para pedirle ayuda y que me había confirmado que Camila y el vendrían a rescatarnos, pero el también venía por respuestas quería saber lo que pasó esa noche una que yo no tenía clara tal vez era por el alcohol que me nublo el juicio, o era porque simplemente no sabía que me había pasado
No tenía las respuestas que el quería que le diera, así que tendría que ayudarme a resolver el enorme rompecabezas de esa noche que sin duda podría cambiar mi vida
Pero por ahora teníamos que ocultar a Mattew ya que salir era imposible y no podría hacer nada si me lo quitaban
Salí de mi habitación y entre a la habitación que era de Camila, me daba escalofríos pero no tenía otra opción abrí el armario y toque la pared del fondo hasta que encontré un pequeño botón
Al presionarlo una pequeña puerta se abrió tome un cojín una manta y me acerque a Mattew que me miraba
-Bien Mattew vas a esconderte aquí hasta que regrese, ten lleva tu koala no hagas ningún ruido
-Si
Era un niño muy lindo por suerte recordé el pequeño compartimiento dónde Camila guardaba todas sus cosas importantes, pensé en entrar con el pero descarte la idea, solo nos encontrarían más rápido
Después de asegurarme que Mattew estaba a salvó baje rápido a la cocina tenía que hacer algo pero antes siquiera de moverme la voz de mi madre me detuvo
-Miriam que haces
-Nada madre que podría estar haciendo
-Has estado actuando rara
-No se de que hablas
-Estas segura de que no sabes de qué te estoy hablando
Lo siguiente que sentí fue un golpe en la mejilla para después caer al suelo mientras sentía el sabor metálico de la sangre en mi boca
-Le pediste ayuda a esa maldita bastarda y no sabes de lo que te estoy hablando
-Lo hice porque no voy a servirte de conejillo de indias mientras les entregas mi cabeza y sales librada
-Todo lo que quieres tiene un precio querida hija
-Aun precio que debo pagar yo mientras tú te lavas las manos
-La vida no es justa, lo siento hija es una pena que hayas decidido ayudar a esa bastarda, pero no dejaré que vayas a prisión sería injusto que tu belleza se opaque con los años, te consideren una muerte rápida
El señor Cass empieza a tirar gasolina en el suelo alrededor de dónde estoy, pero mi cuerpo no responde a mis pensamientos y no se mueve
-Adios hija traigamos al niño y vámonos antes de que ella llegue
Me levanto rápido mientras intento apagar la cocina pero sin mucho éxito mientras el señor Cass sigue tirando gasolina en la cocina pero antes de moverse se oye un fuerte estruendo
-Señora tenemos que irnos, tirarán la puerta principal
-Traigan a ese niño ahora
-No lo encontramos señora
El señor Cass me jala del pelo y me arrastra a la sala mientras mi supuesta madre me mira
-¿Dónde lo escondiste?
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Nuestros votos de odio
Short StoryEllos prometieron odiarse hasta que la muerte los separara, pero a las palabras se las lleva el viento La pregunta es, podrán odiarse hasta que la muerte los separe