Tú estás fuera, pero yo dentro. Pero tú, fuera. Fuera de, pues de esta triste cárcel. Cárcel que me retiene dentro. Para que no salga. Que si no, saldría, pero no me dejan. Salir pa fuera. Entrar pa dentro, pues es más fácil. Sobre todo para visitar. O, si no, pues le revientas la madre a un milico, y para acá te traen. Bien sencillo. Pero luego, no puedes salir. Tenéis miedo de que salgamos. Sobre todos, los milicos. Porque saben que si les reventamos la madre, pues nos meten pa dentro.
Fulgenciano Armendia López
50 años por registros de transacciones sin sustancia ni efecto.