➜ Go and kiss him!

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Aviso: Este one-shot transcurre en un "au" donde los personajes están en un contexto estudiantil, nada de lo original.

Ah, el primer beso, para cierto grupo de persona este tema era tan solo una pérdida de tiempo o algo sin importancia, y para otro esto era algo bastante importante y significativo para sus vidas.

Y para Noah, a sus diecisiete años, el podría decir sin miedo y con orgullo que era del primer grupo de personas. El solo deseaba concentrarse mayormente en lo que implicaba su rendimiento escolar y en qué materia sacaría una normal nota máxima. Pero claro, esta ideología empezó a recaer al llegar Cody a su vida.

Cody era un alumno nuevo, había estado en su salón desde hace un año exactamente hablando, y por más que no le prestara atención, eventualmente estos dos tuvieron interacciones y una... Extraña forma de referirse a una amistad. No se llevaban mal, y coincidían de vez en cuando para tener salidas a algunos lugares específicos.

Pero en ese tiempo, Noah no esperaba ser tan débil hablando sentimentalmente, no es para malinterpretar, él sabía mantenerse neutro en casi todas las situaciones posibles, ¿Pero enamorarse? Eso ya no sabía con exactitud cómo manejarlo. Lo único relacionado a este tipo de sentimientos fueron con una chica llamada Emma, con la cual tuvo como un pequeño enamoramiento.

Pero ya fuera de eso, no había mucho que decir, tal vez solo le parecía bonita de aspecto y un poco por personalidad, no le dio importancia en su tiempo. Pero ahora con Cody de verdad podía sentir esas sensaciones típicas del enamoramiento. Él como su corazón latía cuando le miraba, una actitud diferente se presentaba en el, comportándose de una manera más torpe a la usual.

¡Hey, Noah! - Desde lejos, y interrumpiendo sus pensamientos, venía un animado Cody hacia el mencionado, haciéndole todos los efectos anteriores.

Qué tal Cody, ¿Que te trae a mi espacio de estudio sin adolescentes hormonales? - Menciono a la azotea donde se encontraba, lugar muy abandonado si no fuera por ciertos estudiantes, como Gwen que estaba en otro lugar de este.

Ay, tu y tus chistes - Se sentó en la misma banca donde estaba Noah, acomodándose a su lado, causándole temblores a él moreno - Te quería buscar, tu siempre estas por lugares tranquilos, y me gustaba la idea de un momento sin tanta gente.

Puedo entender eso, a veces la "muchedumbre" puede hostigar, por eso vengo aquí, solo yo, mis libros, y otras personas que no causan problemas - El libro que estaba en sus manos fue a parar a una esquina del banco, para así admirar la belleza de Cody con más claridad.

Eso es necesario, un pequeño tiempo para uno mismo puede ser agradable, y un poco de música tampoco está mal - Y como si tuviera una bombilla en su cabeza, Cody tuvo una idea - ¡Ya se! Escuchemos un poco de música, para completar todo esto.

Sacó sus audífonos junto a su celular, le pasó el audífono izquierdo a Noah, y el quedó con el derecho, dejando que su playlist los llevara a alguna canción al azar.

Tan pronto empezó la música, ambos se sumergieron en una tranquilidad, mientras observaban el cielo despejado.

¿Te gusto el musical que te recomendé? - Dijo Cody en medio de todo el silencio.

Lo vi, pero no me convenció del todo - Le dijo con toda intención de molestar al menor.

Te conozco, te gusto - La sonrisa maliciosa de Noah era suficiente para convencerle que era cierto.

Durante el receso se dejaron llevar, hasta que la campana sonó en todo el establecimiento. Noah con algo de pereza se decidió levantar, pero cuando lo hizo notó a un somnoliento Cody en su hombro. Su corazón se aceleró, no quería que esto acabara, pero su ya normal moral le decía que tenía que ir a clases ahora.

Con cuidado se levantó, no despertando a Cody de manera brusca, mientras le trataba de despertar de la manera más dulce que podía, inconscientemente sus ojos viajaron hasta los labios ajenos.

Estos estaban un poco abiertos, dejando a la vista un poco del espacio entre los dientes de Cody junto a los suspiros suaves que soltaba. La idea era tentadora, Noah se resistía a querer besarle, pero era una pelea dura.

Hasta que en un arrebato, le dio un beso, corto pero dulce, para salir corriendo con todas las fuerzas que no le gustaba gastar en clases de deportes.

Pero esto también despertó a Cody, que tenía una extraña sensación en sus labios.

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Hola, quiero pedir disculpas si esto está mal o si no actualice tan rápido como pensaba, la semana fue algo difícil, y estoy un poco decaído, espero me perdonen.

Igualmente creo que actualizaré cuando pueda, porque esta semana también tendré cosas importantes que hacer, pero prometo traer algo lo más pronto posible.

Espero les haya gustado.

Ariooooooooooooooosssssssssssss

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