¿Un masaje?

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Pedri pov:

Besar a Alexa de nuevo era como sentirme aún más vivo, la echaba mucho de menos y a nuestros hijos por supuesto, ellos son todo para mi.

-¿Por qué no vinieron tus padres contigo?

-Ellos decidieron estar algunos días más en bélgica, les gustó mucho ese lugar.

Mientras ella me hablaba, yo me encontraba un poco perdido observando como ella estaba inclinada sobre la mesa con su mini falda rosa, la cual dejaba al descubierto una pequeña parte de sus glúteos.

Quise controlarme, pero ella me hacia perder todos los sentidos, así que apreté mi polla en su trasero para que sintiera mi ereccion.

-Calma a tu amigo.

Su comentario generó que se me escapara una carcajada.

-¿Qué pasa si no lo hago?

Ella se volteó y llevo sus manos a mi cuello; acercándose lentamente.

-Llegarás tarde a tu entrenamiento.

-¡Hostia! no me había fijado en la hora.

Ella solo se burlaba de mi.

-De todos modos, no te vas a salvar.

Me acerque a ella y la besé mientras subí mis manos por debajo de su mini falda para apretar su trasero.

Tomé las llaves del auto y me dirigí a ciutat esportiva.

El entrenamiento estuvo bien, al terminar; el mister nos dio una charla
sobre lo que debíamos hacer en el partido del sábado.

Al volver a casa, fui a buscar a Alexa pero no estaba en la habitación, ni en el sala y tampoco en el jardín, así que me dirigí al spa.

Allí estaba ella recibiendo un masaje, le pedí a la masajista que podía irse; Alexa no escucho ya que estaba con sus auriculares puestos.

Tomé una de las cremas y llevé un poco en mis manos para después hacer el masaje a mi manera, ella sintió que no eran las manos de la chica, obviamente. quito sus auriculares y me habló.

-¿A que horas llegaste?

-No hace mucho, ¿Hay alguien en casa? - pregunté curioso.

-No, chloé llevo a los niños con sus amigos y Fer salio con unos amigos, ¿por qué?

-Curiosidad, ¿como sabias que era yo?

-¿Quién sería entonces?, además esas manos jamas las olvidaría.

-Al igual como tampoco vas a olvidar lo que te haré aquí.

-¿Qué pretendes canario?

Ella se levantó dejándome ver su desnudez.

-Solo te voy a hacer un masaje pero será a mi manera......acuéstate.

Tomé uno de los aceites y lo esparci por todo su cuerpo, lleve mis manos a su senos; los acaricie de la manera más delicada posible mientras ella cerraba sus ojos y mordía sus labios. Baje a su abdomen y luego a sus piernas, quería dejar la mejor parte para lo último. Abrí un poco sus piernas y llevé mis dedos a su clitoris; los moví en círculos mientras veía como su cuerpo se iba tensando poco a poco. Llego el momento de penetrarla con ellos; empece a meter y sacarlos muy despacio, quería escuchar sus pequeños gemidos y ver como ella se tocaba.

Poco a poco fui haciéndolo más rápido mientras escuchaba su agitaba respiración y sus gemidos cada vez más fuertes. Ella estaba a punto de correrse; sus piernas se ajuntaron apretando mi mano pero no me impidió parar, seguí y ella se levantó mientras me miraba con su boca un poco abierta tratando de resistirse a gemir. Logre uno de mis cometidos, ella estába mojada y era hora de entrar en acción la segunda parte. Mientras yo me quitaba mi camiseta, ella desabrochaba mi pantalón.

FIRESTONE | Pedri González (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora