𝐒𝐀𝐆𝐀 𝐒𝐏𝐄𝐄𝐃𝐈𝐍𝐆 𝐇𝐄𝐀𝐑𝐓𝐒 𝐋𝐈𝐁𝐑𝐎 𝐗𝐕𝐈𝐈 ;
Pato O'Ward
La vida de Allyson se podía definir con una palabra "monótona" y justo cuando más lo necesita llega un rayo de esperanza para mostrarle las aventuras que puede vivir.
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Woking (Surrey, Inglaterra) 2021
Después de pensarlo mucho Allyson se armó de valor y decidió ir con una psicóloga para poder hablar de todos sus problemas, no era justo que sus amigos se llevaran esa carga y a pesar de que no solía contarle sus problemas de pareja, o no muy seguido, sabía que ellos se daban cuenta de todo, así que solo le bastó unos días llorando tras el picnic fallido y diciembre para darse cuenta de que no era sano seguir así, necesitaba ayuda profesional para abrirle los ojos sobre su relación; ya no era suficiente con su amiga diciéndole que se diera cuenta de las cosas, hasta ese punto había caído y no era capaz de admitirlo, pero sí de corregirlo.
Ella buscó lugares para poder ir, hizo toda una investigación sin que su prometido lo supiera para evitarse problemas, sabía que le diría que no estaba loca como para ir a uno, no era muy fan de los psicólogos y ni hablar de la pelea que se armó cuando fue a uno tras el fallecimiento de sus padres; prefería evitar otro altercado así. A su búsqueda se le añadió la parte en la que se metía a los perfiles de los profesionales para ver si le transmitían confianza, ya que ella era de esas personas que si no le vibraba alguien nunca iba a poder abrirse totalmente, por el contrario sí si le gustaba lo que transmitían iba a contarle toda su vida.
Agendó la cita y el día que tenía que ir llegó más pronto de lo que quisiera. Ideó un plan para poder llegar al lugar sin las preguntas constantes del hombre y que eso resultara en pelea, que era lo que últimamente hacían. Paso uno, dejarle el desayuno listo; paso dos, fingir que iba a ayudar en una cirugía de emergencia en la clínica y paso tres, dejarlo encerrado. Cualquiera que fuera la opción de salir de la casa, para el Hunnam, estaba descartada, salía solo si tenía "concierto" en el bar o si estaba en extremo hambriento para ir por algo de comer, así que si había desayuno no saldría; no le diría nada por la ropa porque era lo que usaba para esas ocasiones, por si llegaba a mancharse sin poder recuperarlo tras una lavada; todo estaba listo, nada podía salir mal, de cualquier manera si la buscaba y no podía responder el celular sabía que llamaría a Luke o Genevieve y ambos la cubrirían.
Sus emociones estaban tan revueltas que por primera vez en mucho tiempo no lograba identificar cuales eran, solo sabía que le preocupaba lo que pasaría al entrar e incluso aún más al salir.
En la mañana, cuando notó que los primeros rayos estaban entrando por su ventana supo y se notó que no había podido dormir nada en el transcurso de la noche, solo dió vueltas en su lugar. Se levantó con pesadez y eligió su ropa para cuando saliera de bañarse, que no era la gran cosa, pero si la haría estar cómoda y con la que cumpliría cierta parte de su plan; cuando salió de la ducha, a pesar de haber tardado más tiempo de lo que normalmente hacía, aún era demasiado temprano, así que para no pasar frío se dirigió a cambiarse y a pesar de que su cerebro le decía que se pusiera la pijama de nuevo para volver a dormir, luchó contra esos pensamientos y se puso su ropa para salir, hoy era el día, no se iba a acobardar por nada, asustarse era válido, pero no iba a renunciar.
