HOT
- Eso es. – le dijo él. Animándola a que dejara tocarse por él. Que lo dejara tocar a su máximo esplendor. – te gustará preciosa... - ahora se colocó de rodillas, la mejor posición que podía tener, tenía tanto por hacer en ese apetecible s*xo. Se mojó los labios. La imagen era tan fuerte, que con solo verla aferrada a la pared y apunto de gritar, se estremecía más y más, con muchas más ganas de hacérselo en ese mismo instante. Tenía los labios húmedos. Y podía percibir que la feminidad de _______________ también lo estaba. La abrió de piernas, ________________ ya no ponía resistencia. ¿Y como lo iba a hacer? Si le gustaba tanto lo que sentía...tanto...que pensó que moriría. Meneó las caderas, entregándole más a Ignazio. – grita todo lo que quieras muñeca, estamos en Paris...nadie sabe nuestro idioma... - la miró pícaro. Mordiéndole uno de los muslos, para luego pasar su lengua por uno de ellos, de arriba hacia abajo. Que buen olor percibía haya abajo. Se acercó a su abertura, entre los dos labios genitales, le satisfacía tanto ver eso... sus labios besaron delicadamente la feminidad de ________________.
- Mnh... - susurró ella. Ahora poseída por él. Ignazio la besó de nuevo, ahora con más intensidad.
- Te gustara... - dijo él. – más... cuando pase mi lengua por ahí... - _____________ soltó un pequeño gemido ahogado. Ignazio había introducido su lengua en ella, en todo su esplendor, una oleada de placer se expandió por todo su cuerpo.
- ¡Ahh! Oh... - gritó ella. Ignazio volvió a bombearla con la lengua. Tan intenso como podía. Deseando tanto que su p*ne ocupara el lugar de su lengua.
- Te gusta guapa, dímelo...dime que te gusta...
- Sí, Dios...me encanta... - le respondió ella. La cabeza de Ignazio no dejaba de moverse, al compás de su lengua y acoplándose con los intensos gemidos de ella. Mi.erda. Si se la comía una vez más, eyacularía sin siquiera ver terminado. Cuanto poder tenía aquella mujer. Sus pantalones reventarían. Necesitaba f*llar. F*.llarla. Era más que un simple deseo. Era algo que su propio cuerpo le obligaba a hacer.
- Necesito f*.llarte... - le pidió. Subiendo entre besos hasta su rostro.
Se miraron. En un momento interminable. Los ojos caramelo de Ignazio atraparon a los __________(co) de _______________. El deseo seguía ahí, pero en cambio, de pronto...hubo algo más fuerte. Algo que le invadió el cuerpo y la mente. ______________ sostuvo la mirada, lo único que reflejaba era miedo, temor, aunque también había disfrutado del momento, sabía que Ignazio la tenía en sus manos y que podía hacer lo que quisiera con ella. No quería abusar de ella. No de nuevo...
Se le separó. Pequeños recuerdos invadieron su mente. Recuerdos que le dolían muchísimo. Prefería m*sturbarse por su propia cuenta. Se metió al baño de la habitación, mientras _______________ aprovechaba en arreglarse la ropa interior. De nuevo en su lugar. Más avergonzada que nunca. Y en medio del silencio lo escuchó gemir desde el baño. Seguramente imaginándosela.
Si no había terminado de comérsela...había sido por algo...había prometido jamás volver a abusar de una mujer.
ESTÁS LEYENDO
-Secuestrada. 'Hot' [Adap&Terminada] {1°temp.} Ignazio Boschetto
RomanceY tú..¿que harías si estuvieras secuestrada? Créditos: Susana León.