•Otra Vez Juntos•(Aizawa X Oc)

Capítulo 15

POV: LYNN

Lynn: ¡Nox!, para que me duele.- le grite mientras lo mandaba a la otra habitación con una fuente de aire.

Nox: oye señora, más respeto a los jovenes.- decia el mientras se sobaba la cabeza por el golpe contra la pared.

Lynn: respeto mis huevos.

Nox: no tienes.

Lynn: como no te calles te juro que esta vez te tiro por la ventana.

Nox: no creo que tu profesor vea eso correcto.

Lynn: ¿pero que dices?, y ¿qué haces en el balcón?

Nox: no nada, solo que llagas tarde a tu primer día de clase.

Lynn: ¿¡qué!?, ¿pero que hora es?

Nox: hummm... las ocho...-me miró preocupado-...y cinco.

Lynn: ¿¡Y no me dices nada!?

Corriendo agarré todas mis cosas y salté por el balcón para usar mi particularidad, me costó bastante, pero al menos no me pegué contra el suelo. Sobrevolé toda mi ciudad, era preciosa, pero llegaba tarde jope.

Al llegar aún no llegaba el profesor y entré abriendo de golpe la puerta, todos se quedarón mirandome. Y aquel chico con gafas al que ayude en la prueba de acceso me asaltó diciendo que llegar tarde no era propio de una heroina y menos ir despeinada y sin la corbata reglamentaria.

Lynn: ¿qué?- dije mientras usé mi particularidad para hacerme una trenza bastante larga con mi pelo.- ¿Tenemos corbata?

Nox: sip, y te la olvidaste en casa.- dijo aparecienndo detras mia con la corbata, y poniendose delante mia para ponermela.- y como se que no tienes ni pajolera idea de ponertela yo lo haré.

Aizawa: ¿podría decirme quien es usted muchacho?

Nox: ah... ¡no nada yo ya me voy!

Y dicho esto se esfumó, Aizawa me miró a mi, ¿sabes?, ¿yo que tengo que ver?

Aizawa: bueno, todos, coger vuestros trajes de entrenamiento que vamos fuera.

Apretó un botón y en la pared se hicierón visibles 21 cajas, la mia era la última. Las chicas me dijerón que fueramos rápido y entre dos me cogieron de los brazos y me llevaron a los baños para cambiarnos. Al entrar, todas se empezaron a quitar las ropas, y todas tenian demasiados buenos cuerpo, mi cara se puso roja y tuve que esconderme rápido en un cubículo. Me intenté sacar esas imagenes de la cabeza y me cambié dentro. Salí todo lo rápido que pude y todas juntas nos dirigimos al patio donde también estaban los chicos. Ví a Bakugou, no lo habí visto antes clase, a ver, solo he podido ver al chico de gafas y a Nox que se había puesto delante mia y con su metro setenta no veia nada.

Aizawa nos puso a todos a hacer pruebas, todas como las pruebas parecidas al entrar por recomendación. La primera era lanzar una pelota, estaba muy debil con mi particularidad me dolia el pecho por ello, así que mucha fuerza no tenía.

Unas chicas se diron cuenta de mi nerviosismo y primero se presentando, siendo Uraraka, Yaoyorozu y Mina.

Uraraka: hey, ¿y cómo te llamas?

Lynn: me llamo Lynn.

Mina: se te ve un poco nerviosa, si es por la prueba seguro la superas, tal y como me ayudaste en el examen de acceso, lo vas a petar.

Lynn: gracias Mina

Yaoyorozu: seguro que sí, ¿cuál es tu particularidad?

Lynn: am, puedo mover el aire a vountad y crear una presión sufuciente como para poder sostenerme en el aire y no se, tambien tirar hacia fuera a los demás.

Yaoyorozu: hum, eso me recuerda a uno que tenía exactamente el mismo, o bastante parecido.

Lynn: ¿a si? Bueno, no es la primera vez que me lo dicen.

Aizawa: dejen de hablar y usted, señorita...-Miro en un papel y luego volvio a levantar la cabeza- Uraraka, le toca lanzar la pelota con su particularidad.

Uraraka: ¿ah? Claro sensei.

Vale, lo que pasó a continuación no se lo esperaba nadie... obtuvo infinito.

Aizawa: bien, Lynn- cuando levanto la cabeza y luego su mirada se puso en mi, me dió una pelota.- te toca. Lanzala lo más lejos posible haciendo uso de tu particularidad.

Lynn: ah...- no me encontraba muy bien y eso es por que el día anterior había abusado de mi particularidad- no se si puedo hacerlo...

Aizawa: por lo que ví en el examen de ingreso, dudo que tengas problemas, así que, vamos.

Lynn: de verdad sensei, no me siento muy bien ahora mismo como para usar mi particularidad...- comenté mientras jugaba con la pelota.

Aizawa: señorita Lynn, lance la pelota y deje de perder mi tiempo, que aún quedan más pruebas.

Ouch, no se porque, me dolió lo que me dijo, aun así, si todavia faltaban prueba no voy a gastar todo mi potencial. Conseguí 200m, me pareció una marca penosa, sabiendo que puedo llegar diez veces más, si tan solo ayer no hubiera gastado tanto mi energia. Me duele la cabeza. Mucho. Escucho como murmuran. Me empiezo a marear. Mi vista se vuelve negra. Decido quedarme quieta y se me pasa, cuando quiero girarme me encuentro a centrimetro de la cara del pelirojo, quien me había tocado el hombro para asegurarse de que estuviera bien. Mierda, mis mejillas volvieron a encenderse, no me acostumbro a estar tan cerca de las personas y menos de chicos.

De reojo vi a Aizawa un poco enfadado, seguro por mi resultado.
Las demas pruebas fueron casi igual de mal, y en todas el pelirojo, me ayudó a que no me desmayara y me dijo su nombre.

(No si quieres...)

Lynn: gracias, pero no hace falta.

Kirishima: me llamo Kirishima, y por lo que veo, no te ves muy bien. ¿Es normal que estes tan pálida?,  ¿O es por el contrasto con tu pelo?

Lynn: ja que gracioso.

Kirishima: no enserio, tienes la cara demasiado blanca.

Dice agarrandome de los cachetes, apenas lo veo, pero su color rojo en el pelo si que no pasa desapercibido. Vuelvo mi cara para zafarme de su agarre pero estoy muy débil y solo parece que estoy bailando con sus manos en mi cara.

Lynn: dejame ya.

Aizawa: porfavor alumnos, estamos en clase no en una serie de citas, Lynn, tienes que hacer la siguiente prueba.- Me dijo, sin mirarme a mi, si no a, Kirishima.

Urg, me sacudo la cabeza para ver si puedo evitar que el dolor aumente, y Kirishima me agarró la cabeza por que según el, iba a matar las neuronas de mi cabeza por sacudirla. No lo mandé por los aire por que no tenía fuerzas , ¿vale? La última prueba fisica conistía en hacer como una carrera, y yo os juro que no aguanto más. Me tocó en contra de Bakugou, salims disparados, pero entre el mareo que llevaba y las explosiones, al fin, perdí el conocimiento...