Happy birthday Kise Ryōta.

Mi regalo Tsundere.

¿Porqué el amor tenia que doler tanto?

Esa era la única pregunta que rondaba por la cabeza del rubio modelo. Hoy era su cumpleaños, pero no había salido para absolutamente nada de su casa. No tenia ganas de nada, por una simple razón.

El amor de su vida, estaba con alguien mas.

¿Porqué? Se preguntaran, la razón es sencilla. Kise jamás se había atrevido a decirle a cierto peliverde sus verdaderos sentimientos. Y como él era muy tsundere y despistado no se haba dado cuenta de lo que el rubio sentía por él.

El sonido de su celular lo hizo volver a la realidad. Era una llamada de Kuroko.

-¡Hola Kurokocchi! ¿Que sucede?

-Kise-kun, no pongas ese tono de alegria conmigo. Sabes perfectamente que a mi no me puedes engañar. ¿Donde estas?-El chico sombra se encontraba sumamente preocupado por su rubio amigo. No habia dado señales de vida en todo el día, siendo que en este día solia ser el que mas molesto se ponia.

-En mi departamento. ¿Porqué?

-¿No vas a celebrar tu cumpleaños?-El rubio torcio el gesto.

-No tengo ganas de celebrar Kurokocchi.-Dijo en un tono triste.

-¿Que sucede Kise-kun?

-Es Midorimacchi... me entere que tiene una relación con Takaocchi.-El peliceleste sonrio con tristeza. Sabia que era eso... Y por eso el muy maldito se encontraba en ese momento con el peliverde el cual escuchaba toda la conversacion ya que la llamada estaba con el altavoz encendido.

-Ay Kise-kun... ¿Porque no se lo dijiste desde antes?

-Porque él no me quiere Kurokocchi, ¿de que me servia decirselo? Prefiero seguir siendo su amigo a que me deje de hablar.

-Yo no creo que estes del todo correcto. A pesar de que él siempre decia que no te soportaba siempre te cuidaba. ¿Recuerdas?-Y era cierto, el peliverde siempre buscaba cualquier pretexto para estar alrededor del rubio, era demasiado tsundere para reconocer que de verdad se preocupaba por él.

-Losé Kurokocchi, pero nunca senti algo mas que eso... Y ahora... ya, lo perdí para siempre...-Dijo mientras bajaba la voz y se tapaba la boca evitando soltar sollozos, aunque de igual manera se escuchaban. Ya estaba llorando, de verdad que dolía bastante.-Duele tanto... Lo quiero muchisimo Kurokocchi...-El peliverde salio corriendo del lugar en direccion al departamento del rubio.

-¿Quieres que vaya a verte Kise-kun? No te escuchas para nada bien...

-Quiero estar solo, pero gracias de todos modos Kurokocchi...

-Entonces no vas a celebrar el día de hoy...

-Definitivamente no...-Dijo hipando el rubio.

-Esta bien, podemos salir despues, ya que te sientas mejor ¿no crees? Podemos invitar a todos.

-Ya veremos Kurokocchi, me siento fatal... de solo recordar lo que vi...-El rubio rompió a llorar de nuevo, provocando que al peliceleste se le estrujara el corazon.

-Kise-kun... La verdad es que...-En ese momento se escucho claramente como el timbre del departamento del rubio sonaba.

-Espera un momento Kurokocchi, alguien esta tocando la puerta.-El rubio estaba tan ido que ni siquiera se molesto en preguntar quien era y abrio la puerta.-Midorimacchi...-Dijo en un susurro totalmente sorprendido.

-Feliz cumpleaños Kise-kun.-Dijo el peliceleste para despues colgar.

-¿Estas seguro que lo que hiciste esta bien?-Pregunto totalmente intrigrado Kagami.