Happy birthday Kise Ryōta.

Mi regalo dulce.

-A-atsu-shi~...

Gemía frenéticamente un rubio pegado a los casilleros mientras el gigante de Yosen lo penetraba sin descanso alguno.

-Kise-chin siempre esta tan apretado para mi~-Suspiraba el peli lila mientras mordía sensualmente la espalda del más bajo.

-Más... Por favor Atsushi... ¡¡Mas!!-Para ese momento el As de Kaijo ya se encontraba llorando por el placer y un poco por el dolor debido al gran miembro que arremetía en su interior sin descanso alguno, haciéndolo ver el mismísimo cielo.

-Ryuo-chin~ Estoy a punto...-El gigante comenzó a penetrarlo más duramente mientras aferraba sus dedos a la cintura del mas bajo.

-¡AH! Atsushi~-El peli lila se corrió dentro del rubio creándole unos increíbles espasmos, pero sin lograr que se corriera.

-Kise-chin~ ¿No te gusto?-El gigante tenía una mirada triste mientras observaba como el rubio se deslizaba lentamente hasta quedar sentado en el piso sin que su ereccion se bajara.

-No se que me pasa Murasakibaracchi... Pero no puedo correrme.-Dijo lleno de vergüenza el rubio, pero desviando la mirada como tratando de ocultar algo lo cual enseguida noto el pívot de Yosen.

-¿Qué no me estas diciendo Kise-chin~?-Este se agachó hasta quedar a la altura del mas bajo para voltear su rostro obligándolo a que lo mirara, se encontraba sumamente sonrojado y avergonzado. Definitivamente algo quería.-Kise.

-Y-yo... Quiero... Qué tú...-El rubio no pudo continuar, era demasiado vergonzoso así que bajo su mirada a su miembro y lo tomo entre sus manos dispuesto a terminar él solo. Pero el más alto no está dispuesto a ceder.

-¿Que quieres Ryuota?-A pesar de tener una actitud infantil, cuando entraban a la hora de la sexualidad el gigante era otro.

-Quiero que...-El modelo bajo la mirada totalmente sonrojado.-Quiero que me des sexo oral.-Susurro bajito él, aunque el otro lo alcanzo a escuchar perfectamente haciendolo sonreír de lado.

-¿Así que por eso habías estado tan a la defensiva? Debiste decírmelo desde antes... No es algo que me moleste... Eres dulce~-Dijo con su típica cara de cansancio el gigante pero con una picara sonrisa en su rostro. Para bajar lentamente repartiendo besos por todo el cuerpo del modelo haciendolo temblar y jadear por mas.

-Atsushi~

El peli lila llego al miembro del rubio y comenzó a darle pequeñas lamidas por todo lo largo con su gran y cálida lengua, sin dejar de masturbarlo, para después meterse solo la cabeza a la boca dando pequeñas succiones.

-¡Ah~! M-muraaah~ oh si...-El rubio inmediatamente llevo sus manos a la cabeza del mas alto para obligarlo a tragarse su pene. Le encantaba que le diera sexo oral. Casi no lo hacia, pero cuando lo hacia era increíble.

El gigante se metió de golpe todo el miembro del rubio logrando que se arqueara y una sonrisa de satisfacción se apoderó del rostro de los dos.

Era increíblemente placentero, Kise siempre sabia tan bien y Murasakibara le daba lo mejor que tenía en cada momento.

Siguió chupando su pene sin descanso y masturbandolo mientras acariciaba sus testiculos hasta que el rubio se corrio en su boca repentinamente con un gran grito y se encorvaba tratando de controlar su orgasmo sin éxito. Se estaba perdiendo en una espiral de sensaciones.

-Siempre tan dulce~ gracias por regalarme el mejor de los dulces.-Dijo sin pena alguna Murasakibara tragándose todo el semen del rubio provocando un fuerte sonrojo en él.

-¡No es necesario que hagas eso!

-Pero si te encanta.-Dijo para acercare a él y darle un beso lleno de amor en los labios para después cargarlo y llevarlo a las duchas para bañarlo el mismo y mimarlo. Siempre hacia lo mismo.