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Capítulo 41 Enseñar a los matones a leer

  Liu Juan no pensó mucho y volvió a coser.

  Con la carta de recomendación en la mano, estaba calificado para tomar el examen. Lin Liusheng ya no tenía preocupaciones y primero quería comprender el contenido del examen de Tongsheng.

  Pero debido a la apretada agenda agrícola y al hecho de que la próxima prueba de parto sería en tres meses, Lin Liusheng lo pensó y sintió que primero tenía que plantar la tierra.

  Si está realizando el examen de Tongsheng, si tiene miedo de no aprobar el examen la primera vez, debe familiarizarse con él primero, intentar realizar el examen una vez e intentar aprobarlo la segunda vez.

  Lin Liusheng sacó especialmente una mesa con un trozo de madera vacío y usó un pequeño trozo de ladrillo para acolchar la pata corta de la mesa. Después de sacudirla, se sintió estable.

  Lin Liusheng aplaudió y sonrió con satisfacción.

  Chu Kuangkuang abrazó su pecho y se paró con las piernas cruzadas casualmente. Se apoyó contra la puerta y siguió mirándola. Su alto cuerpo bloqueaba la puerta y la luz del sol se filtraba en la habitación a través de los espacios entre sus extremidades.

  Lin Liusheng se dio la vuelta y dijo: "¡Apártate y bloquea toda la luz!"

  Chu Kuangkuang parecía llevado por la costumbre, sonreía y se movía un poco feliz, manteniendo la vista en la pequeña mesa que había ordenado.

  La casa está hecha jirones y las habitaciones no están limpias y ordenadas, hay una mesita con algunos libros dentro, lo cual es bastante interesante.

  Lin Liusheng se sentó en un taburete y extendió el libro. Antes de que pudiera leer algunas palabras, se dio cuenta de que Chu Kuang lo estaba mirando, sintiéndose un poco incómodo.

  Lin Liusheng no levantó la cabeza, pero levantó los ojos. Estaba pensando en algo en sus ojos y no sabía cuáles eran sus motivos. Lo miró, inclinó ligeramente la cabeza y sonrió.

  Sus ojos son como flores de durazno, con las puntas de los ojos caídas y sus ojos no son claramente blancos y negros.Cuando sonríe, le da a la gente una sensación confusa que no está borracha pero no borracha.

  Un par de ojos es la forma más fácil de ocultar tus pensamientos.

  Con un toque de broma, Lin Liusheng le preguntó a Chu Kuangkuang, que estaba parado allí y no tenía nada que ver con el aprendizaje: "¿Qué tal si te enseño a leer algunas palabras?".

  Chu Kuangda se dejó engañar por su sonrisa y dio un paso hacia él. De repente pensó claramente en lo que acababa de decir.

  ¿Quieres saber leer y escribir?

  ¿Por qué sabes leer?

  Lin Liusheng decidió enseñarle a esta "bestia" incivilizada lo que significa estar avergonzado. No esperaba mucho. Solo quería que Chu Guangda supiera que los forasteros podían usar pantalones frente a él.

  Tan pronto como Chu Guangda se arrepintió de su decisión, pero antes de que pudiera expresar algo, Lin Liusheng se inclinó hacia adelante, lo agarró de las manos y del cuello y lo atrajo hacia él.

  Lin Liusheng se levantó y le pidió que se sentara, le puso una mano en el hombro, inclinó su alto cuerpo y escribió su nombre en un trozo de papel de cáñamo.

  Tres grandes personajes, Chu Kuang Kuang.

  Lin Liusheng dijo mientras escribía: "No pidas más. A lo largo de tu vida, debes saber escribir tu propio nombre, ¿verdad?".

Cuñado de granjero, matón que cultiva obedientementeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora