Un Solo Camino [Izuku Vigilante]

una salida de la monotonía

Era una mañana fría de esas que congelaba hasta los huesos o eso pensaba Izuku al respecto, el cansancio inundaba su ya desgastado cuerpo, Ya habían pasado varias semanas desde que Izuku había hecho sus compras y los días subsecuentes eran una copia del anterior todo le parecía un bucle en el que estaba atrapado, su rutina se había repetido las suficientes veces para enloquecerlo, estaba dudando de salir a hacer vigilantismo y aunque su cuerpo ya estaba casi recuperado su temor le estaba impidiendo hacerlo, varias eran las noches en las que se había quedado inmóvil en frente de la puerta de su casa, su mirada pegada a ella durante unos minutos atrapado en su interminable tren de pensamientos para luego arrepentirse e irse a dormir.

Tampoco le sumaba que encima tenía que volver a su escuela, había faltado todos los días que había estado lastimado y aunque sus notas eran buenas no podía faltar tanto, sus profesores se encargarían de que le fuera muy mal solo por eso, lo podrían ver cómo una excusa para bajarle los puntajes y muy probablemente lo harían, había aprendido a las malas que podía suceder cuando de chico se había enfermado y faltado unos cuantos días a sus clase entonces su profesor de ese entonces decidió que era una buena idea bajarle todas sus notas solo por eso, le parecía totalmente injusto y lo comento, el profesor solo dijo que era lo correcto solo para desestimarlo diciendo, que sabrás tu de que es justo?, aún recordaba ese día con impotencia, sin el poder de hacer nada.

Vio el reloj de su celular por un momento algo distraído, se podría decir que había estado en las nubes últimamente, eran las 6 a.m, el frío abundaba en esa mañana y este penetraba aún que Izuku estuviera bien abrigado, estaba esperando el metro que lo llevaría a la escuela, su hora de entrada a las 7:20, el tiempo estaba a su favor ese día, aunque no era sorpresa pues Izuku siempre salía más temprano solo para no toparse con su molesto y explosivo vecino, no solo no tenía ganas de lidiar con el, ese día no tenía las energías como para soportar sus molestas charlas sobre su supuesta superioridad, y pese a todo esto allí estaba sentado en el extremo opuesto al de el, observándolo atentamente, Izuku era un manojo de nervios en ese punto, podía sentir como la mirada de kachan le quemaba la espalda.

Suspiro con pesadez, ese día no sería fácil de llevar, se levantó de la banca viendo que el metro que tanto esperaba por fin llegaba, sin dudarlo tomo el asiento más alejado con la esperanza de que kachan no se sentará Serca de el, por suerte el había tomado un asiento alejado lo que agradeció en sus adentros. El viaje había Sido más relajado y cuando llegaron se escapó rápidamente en dirección a la escuela, quería evitar en todo lo posible cualquier contacto con el chico explosivo, había hecho un buen intento hasta el momento y ya estando apunto de entrar a su salón de clases una mano se poso en su hombro, su sangre se helo en segundos, su postura se había hecho rígida en absoluta.

-Dios, por favor no seas kach..-

Sus pensamientos fueron interrumpidos por una voz que ya conocía lo suficientemente bien, era bakugou katsuki, justo la persona con la que no quería interactuar.

-Tenemos que hablar deku-

La voz tenía el mismo tono de mierda de siempre, un tono de superioridad y enojo que odiaba, volteo poco a poco para ver la cara de su ex-amigo, esperaba lo de siempre y lo de siempre encontró.

Bakugou tenía el ceño fruncido y una mueca en su rostro, enojo evidente.

-¿que esperas maldito nerd?-

Dijo con aún más enojo en su voz.

Izuku trago y lo siguió sin decir palabra alguna, esperaba lo peor, aún tenía crema para quemaduras en casa?, se pregunto mientras caminaba aterrado, no sabía que esperar de esta charla, la última vez que había hablado katsuki le había dicho que era mejor para todos que el se suicidara, le había salido bien la jugada Penso Izuku.