CAPITULO X

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TODOS LOS DERECHOS A SUS RESPECTIVOS AUTORES.

Trixie había estado viviendo en Lux durante varias semanas y había comenzado a regresar a la escuela en Wilshire. Esta tarde se dirigía a la comisaría, escoltada por Maze, quien marchaba junto a ella por el lado de la acera mientras caminaban varias cuadras desde donde Maze había estacionado su auto. El estacionamiento al lado del recinto estaba en reparaciones, por lo que fue cerrado. Justo cuando llegaron a la cuadra donde estaba el garaje, Trixie dijo: "¡Oh, ahí está Lucifer!".

Maze miró hacia delante para ver la alta figura saturnina delante de ellos. Pero los ojos de Maze se entrecerraron. La figura parecía... desequilibrada, con un hombro más alto que el otro. "¡Ese no es Lucifer!" Ella exclamo. "¡Es Michael!" Agarró la mano de Trixie y tiró de ella hacia atrás y la hizo retroceder por donde habían venido... mientras lo hacían, se escuchó un crujido y luego el ruido agudo y el choque de varillas, tablas y trozos de concreto se estrellaron contra el suelo. acera.

Maze y Trixie, ahora a salvo en la esquina de la calle opuesta, volvieron a mirar la maraña de escombros. Maze examinó la acera al otro lado de la calle, más allá de los escombros. "No lo veo", dijo. "¡Tenemos que llevarte a Lucifer de inmediato!" Cruzaron al otro lado de la carretera principal, lejos del garaje, y luego se apresuraron por esa acera hasta cruzar de nuevo para correr directamente a la entrada principal del recinto.

Chloe y Lucifer estaban inclinados sobre algunas fotografías de la escena del crimen que estaban esparcidas sobre el escritorio de Chloe cuando Maze y Trixie aparecieron en las escaleras que conducían al bullpen. Lucifer los vio primero y se enderezó con una exclamación que hizo que Chloe levantara una ceja... hasta que vio a Trixie y a Maze luciendo desconcertados, cuando su propia cabeza subió y retrocedió bruscamente.

"¿Qué ocurre?" preguntó cuando llegaron al escritorio y Trixie abrazó a su madre.

"¡Al garaje de al lado se le cayeron un montón de cosas y casi nos golpea!" Dijo Laberinto. "Vimos a Michael justo antes de que sucediera".

"¡Miguel!" La voz de Lucifer sonaba furiosa y su rostro se puso rígido.

"¿Que le pasa a el?" -repitió Cloe-.

"No lo sé, detective", dijo Lucifer, "pero no se saldrá con la suya". Sus labios se apretaron y apretó la mandíbula con determinación.

"¿Podría estar trabajando con tu otro hermano, Uriel?" -Preguntó Cloe ansiosamente.

Lucifer frunció el ceño. "Mis hermanos menos favoritos ciertamente podrían encontrar una causa común al hacerme la vida imposible dada nuestra historia pasada..." Sacudió la cabeza. "Pero... estoy profundamente perturbado de que intentaran..." Su voz se quebró mientras miraba a Trixie, queriendo evitar asustarla o molestarla más.

Trixie todavía estaba apoyada contra su madre, cuyos brazos la rodeaban, tratando de calmar a su conmocionada hija.

"Se parecía a ti", dijo Trixie en voz baja. "Yo... pensé que eras tú..."

"Él es mi gemelo, niña", dijo. "Mi doble, me han dicho, aunque yo no lo veo..." Se acercó a ambos y extendió la mano para acariciarle la cabeza. Cerró los ojos y exhaló suavemente.

"Gracias", dijo simplemente, "papá".

Lucifer se puso rígido y miró a Chloe con los ojos muy abiertos. Ella le devolvió la mirada y de pronto se quedó quieta. Trixie pudo sentir el cambio en el cuerpo de su madre, así que abrió los ojos y miró el rostro de Chloe.

"Mono", comenzó Chloe.

"Está bien, mamá... lo descubrí... y los amo a ambos", dijo Trixie.

Lucifer tragó saliva. "Pilluelo... yo... yo no lo sabía... no hasta, no hasta hace poco. Cuando te lastimaste y tuviste que ir al hospital... yo... lamento no haber estado ahí para ti..."

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