Capítulo 6

28 0 1
                                    

Durante unos cuantos días estuve recibiendo mensajes de una de mis ex parejas, estaba bastante estresado por toda la situación en la que estaba, así que me dediqué a ignorarlo, además, no es como que me hiciera tanta ilusión hablar con él en verdad. Estuvo bastante insistente, escribiéndome a todas horas: que si no le contesto los mensajes, que vayamos aquí y allá, que si me quiere ver, etc. ¿No nota que lo estoy ignorando?¿Por qué me quiere ver? Hace bastante tiempo que terminamos.

El caso es que como necesitaba salir y no encontraba a nadie que quisiera venir conmigo, le contesté los mensajes. Le pregunté si estaba libre el fin de semana y él me respondió que sí, que si quería podíamos quedar en mi casa y beber algo mientras "hablábamos"... vamos, sé perfectamente que no íbamos a hablar, ni que fuera tan tonto. Aún así acepté.

Llegó el fin de semana, estaba esperando su llegada así que me puse a limpiar un poco, compré algunos aperitivos y unas cuantas bebidas no alcohólicas, de verdad no tenía ninguna intención de hacer algo con él, espero que no venga con una idea equivocada.

En la tarde

Ding dong - sonido de timbre.
Enyi: Ahora voy. - Con todos los nervios del mundo, cogí un poco de aire y abrí la puerta. - Hola, cuanto tiempo sin verte, Andrés.
Andrés: Enyi, ¿qué tal?¿cómo estás? Estás guapísimo comparado con la última vez que te vi. Ha pasado el tiempo, sí.
Enyi: jaja...Gracias, supongo. Pasa, Pasa.
Andrés: Guau, tu casa es bastante amplia, ya eres todo un adulto después de todo.
Enyi: No digas eso, hombre, me haces sentir como si estuviera viejo.
Andrés: Jaja, solo bromeaba. ¿Qué te apetece hacer?
Enyi: Eem...pues no sé, he comprado algunos aperitivos por si quieres comer algo. Después podemos hablar o ver algo.
Andrés: Bien, me parece bien.

Estuvimos charlando un poco, nos contamos lo que habíamos hecho con nuestras vidas después de habernos separado, aunque yo no pude comentar mucho, ya que él es mayor que yo 4 años, así que ya se imaginan todo lo que ha vivido desde el instituto. Y para que lo ubiquen un poco más, es el chico con el que Aran me encontró besándome en la azotea, el primer chico con el que pude abrirme sobre que era gay, y el chico con el que tuve mi primera vez, osea, mi primer novio. 

Cortamos debido a la distancia, ya que cuando él se graduó, se fue a otra ciudad para poder seguir con los estudios que quería, por lo que solo nos mirábamos cuando él venía a verme o por videollamada. Pero claro, ambos seguíamos haciendo nuestras vidas por separado, por lo que la última vez que vino...

Enyi: Any, no esperaba que vinieras hoy, que yo sepa te toca el finde que viene.

Andrés: Oh, sí, Es que...te tengo que decir algo.

Yo ya sabía lo que me iba a decir, ya que hace un tiempo lo noté un poco confundido sobre nuestra relación, pero no esperaba que fuera tan pronto.
Enyi: Bueno, si quieres vamos a tomar un batido o algo y me cuentas, ¿Te parece?
Andrés: Vale, me parece excelente.
Enyi: ¿Y bien? ¿qué me querías decir?
Andrés: Enyi, voy a ser directo. Tú sabes que yo te quiero mucho, y que siempre te he mostrado mi apoyo en todo...
Enyi: Sí, lo sé.
Andrés: Pero últimamente he estado sintiendo que lo nuestro no va a ninguna parte, he intentado engañarme diciendo que es por la distancia, y el no verte tan seguido hace que dude, pero me he dado cuenta que ya no tengo esos sentimientos por ti, ya no quiero esto. No te lo había dicho antes porque no sabía cómo decírtelo, no quería herir tantos tus sentimientos, ni tampoco quería que pensaras que te estaba manteniendo a mi lado por gusto, así que me tomé mi tiempo para pensar sobre eso, y pues...Lo siento, Enyi.

Después de eso, él regresó a su ciudad y yo continué mi vida acá, nunca más volvimos a hablar. Estaba destrozado, lloraba mucho por las noches, y como no se lo podía decir a Aran, ya que él no sabía que estaba con él y menos que era gay, me lo tuve que tragar todo.

En la actualidad

Andrés: Veo que te la has estado pasando bien, pero por alguna razón, te veo un poco serio, como desanimado.
Enyi: ¿Ah? No, no, no te preocupes, solo he estado cansado. Tú sabes, estos años son complicados.

Andrés: ¿Seguro?, no creo mucho, eh, pero si tú lo dices...Enyi, se qué ya ha pasado mucho tiempo desde que nos vimos, pero aún así, puedes contarme todo lo que quieras, no te voy a juzgar en nada.

No sé cómo lo hizo, pero al final me convenció con esas palabras tan suaves que tiene y le conté todo lo que me pasaba. Le conté lo que había sucedido con Aran, lo del reto, nuestra discusión y que estaba bastante preocupado por cómo avanzaría la situación. 

Andrés se dedicó a escucharme mientras hablaba y hablaba, y cuando terminé, se quedó en silencio durante un rato para luego decirme...
Andrés: Yo creo que le gustas.

Enyi: ... ¿Pero qué dices? Eso es imposible. Además, tampoco es como que quiera gustarle en verdad, sería muy extraño...¿Por qué estamos hablando de esto? Me dieron escalofríos y todo.
Andrés: Bueno, puede que de verdad me esté equivocando, pero no descartes esa posibilidad. Dime, ¿te acostarías con una mujer por gusto?
Enyi: Pues no, son muy lindas y todo, pero no me veo, no me gusta.
Andrés: Vale, ¿entonces por qué Aran se acostaría contigo si es más hetero que un hetero?
Lo ves, ¿no? Y peor aún, ¡TE BESÓ!, está bien que en una noche de borrachera se hayan pajeado, eso lo entiendo, ¿pero besarse? eso sí que no lo veo, y encima empezó él. No hay más lógica, yo creo que sí le gustas.

Enyi: ¿Y si de verdad solo estaba borracho y ya? No todo tiene que ser gustar. Si te das cuenta, todas las veces que ha sucedido algo con él, ha sido porque está borracho. Lo veo más lógico la verdad.
Andrés: ¿A ti te gusta él? No me sorprendería si me dices que sí.
Enyi: ¡OBVIO QUE NO! Estás haciendo preguntas muy tontas. ¿Sabes qué? Dejemos el tema, nos estamos yendo a un sitio en el que no quiero entrar.
Andrés: Bueno, si tu lo dices, pero no te mientas a ti mismo, Enyi, solo te harás más daño.

Enyi: Que sí, que sí. Venga, vamos a hacer maruchan mejor.

Después de una larga conversación con muchos sentimientos mezclados, Andrés se tuvo que ir. Me sentí muy bien al hablar con él de nuevo, me equivoqué al decir que sabía a qué venía, fue todo lo contrario, se sentía como en los viejos tiempos, con la diferencia que había madurado un montón, aunque si es verdad que para algunas cosas es muy insistente.

A ver si Aran madura de una vez también.

Continuará...


Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: 5 days ago ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

¿Sólo amigos?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora