One-shot [Konigxghost]

sexo con odio

Resumen:¿vincularse con el enemigo?

¡Que se joda!
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La misión, en opinión de Ghost, había ido bien. Se habían asociado con KorTac para acabar con una red de tráfico de personas estúpidamente peligrosa, y él se había asociado con el coronel Konig. Su persona menos favorita. Ghost gruñó en voz baja para sí mismo, corriendo a través de otro contenedor de envío abandonado, con el rifle apuntado y listo para disparar a cualquier cosa que se moviera. La información que habían obtenido de Laswell decía que la red había estado usando con frecuencia los contenedores de envío para ocultar a sus víctimas, pero ahora parecía no haber nada.

"Mierda", murmuró, colgándose el rifle a la espalda. "No puedo creer esto." Siseó, sacando un cuchillo táctico cuando notó movimiento detrás de un carrito en la esquina. Se tensó, con el cuchillo en la mano mientras se acercaba a la caja, deseando que fuera una muerte rápida y fácil. "Vamos, hazme esto fácil..." Murmuró, doblando la esquina hacia la nada. Él se burló.

"Si nos lo hubieran puesto fácil, no habrían necesitado su equipo, teniente. " Escupió Konig, siguiendo de cerca a Fantasma. "Es sinceramente vergonzoso utilizar contenedores para retener a sus víctimas. ¿Es posible que un cártel tan peligroso no pueda permitirse nada más?" Konig se burló, murmurando para sí mismo mientras miraba a su alrededor.

"Callarse la boca." Ghost gruñó, su estado de ánimo se agrió aún más. "Cállate y ayúdame a buscar, por el amor de Dios". No estaba de humor para juegos ni para hablar.

"Vaya, teniente, cálmese un momento." Konig se rió entre dientes y golpeó suavemente con el rifle la espalda de Ghost. "No estás ayudando a nadie con esa actitud amarga". Konig rodeó la cintura de Ghost con sus brazos y apoyó la barbilla en la cabeza del teniente.

"¿Qué carajo estás haciendo?" Ghost gruñó, apuntando su cuchillo al muslo de Konig.

Konig se rió entre dientes, apretó con más fuerza a Ghost y lo inclinó toscamente sobre una de las cajas. "¿Qué me dejas hacer?" Él respondió, sabiendo muy bien que Ghost no podría apartar a Konig de él. "De verdad, teniente, no puede ser tan tonto." Empujó sus caderas hacia Ghost, haciendo que el hombre debajo de él gemiera.

"Quítate de encima", siseó Ghost, luchando contra el agarre de Konig sobre él. "Estamos en una maldita misión, no es el momento". Blandió su cuchillo a ciegas y falló a Konig por una tremenda distancia.

"Por favor, no hay nadie más cerca. Además, creo que necesita esto, con lo tenso que está. Podría ayudar a relajarse en las misiones, teniente". Se burló Konig, inclinándose para murmurarle al oído a Fantasma. "Te estás volviendo más descuidado a cada segundo. Es una vergüenza".

Ghost se estremeció y sintió una ligera tensión en los pantalones mientras Konig hablaba. Su agarre sobre el cuchillo se aflojó. Dejó escapar un suspiro de resignación y bajó la mano para desabrocharse el cinturón. "Será mejor que tu polla no me deje cojeando, ¿entiendes?" Él refunfuñó, para diversión de Konig.

Konig simplemente tarareó en respuesta, tirando de la cintura de los pantalones de Ghost y desabrochándose los suyos. Ghost esperó, mirando a Konig por el rabillo del ojo, observando cómo Konig se bajaba los pantalones lo suficiente para revelar el bulto obvio en sus boxers, que parecían dolorosamente enormes, para curiosidad y consternación de Ghost. ¿Cómo diablos iba a encajar eso en él? Ghost dejó escapar un pequeño gemido y se bajó los pantalones hasta la mitad del muslo, con el cuchillo rozando su piel, todavía en la mano. Dejó sus boxers cubriéndolo, ya que sentarse desnudo en un contenedor de envío abandonado no era algo que le gustara.

Ghost se sintió cada vez más impaciente cuanto más tardaba Konig, mientras el coronel se tomaba su tiempo para bajarse los bóxers. Ghost volvió a girar la cabeza y abrió la boca para hablar, aunque lo único que escapó de su garganta fue un gemido entrecortado mientras lo llenaban toscamente , casi corriéndose por el tamaño de Konig. "¡Joder, joder, joder!" Ghost gimió, agarrando los lados de la caja para evitar temblar. "Qué carajo..." siseó, con la cara roja y caliente. "¿¡Qué carajo!?"

"¿Sorprendido?" Bromeó Konig, moviendo un poco sus caderas, haciendo que las rodillas de Ghost se doblaran. "Vamos, teniente, pensé que sería mejor que esto. Más resistente".

"¡No cuando tienes la polla de un caballo y no me avisas cuando me llenas hasta el puto borde!" Espetó Ghost, sintiendo que el ardor venía por la falta de un lubricante adecuado. Joder, ¿alguna vez hacía calor? "Y si le cuentas a alguien sobre esto, te mataré y alimentaré con tu cuerpo a los lobos". Amenazó, aunque la amenaza no se cumplió cuando estaba rojo, acalorado y sudoroso, y también lleno de la polla de Konig.

"Por supuesto", se rió Konig. "Ahora me voy a mover". Sin decir una palabra más, Konig comenzó a moverse, deslizándose dentro y fuera de Ghost a una velocidad insoportable, provocando gruñidos y gemidos animales que escapaban de Ghost, sus nudillos se pusieron completamente blancos mientras agarraba los lados de la caja, con los dedos acalambrados ligeramente.

"¡Joder, dame una advertencia mejor que esa...!" Ghost gimió, sintiendo que sus entrañas eran apartadas para dejar espacio a Konig.

"Scheiße, estás apretado..." murmuró Konig, su ritmo aún implacable, su agarre sobre Ghost magullando.

"¿Qué esperabas cuando me follas tan fuerte?" Ghost replicó, gimiendo con casi cada palabra. La baba se acumulaba en la tela de su pasamontañas, mostrando cuánto lo estaba arruinando Konig. Tenía los ojos vidriosos, cada palabra tenía una leve confusión mientras sus entrañas estaban casi reorganizadas.

"Bueno, uh", Konig soltó una carcajada. "Supongo que esperaba más que esto del estimado Fantasma".

“¿Qué estás insinuando?” Ghost gruñó, entrecerrando los ojos hacia Konig.

"Que, ah, un soldado tan estimado está temblando porque no puede soportar, mh, una pequeña sesión de sexo en el trabajo". Konig se burló entre embestidas, volviéndose más descuidado, mientras sentía que su clímax crecía. "Qué vergüenza, ¿ja?"

Ghost puso los ojos en blanco, incapaz de pensar en una respuesta adecuada. Se sentía tan abrumado, desde su pene rozando la caja hasta las embestidas descuidadas de Konig, que todo era demasiado para el teniente. "Joder..." Gimió, balanceando ligeramente las caderas, las piernas temblando y las manos acalambradas. Sintió tanto calor y tanto frío al mismo tiempo, mordiéndose el labio con tanta fuerza que sangró cuando sintió que Konig lo agarraba con más fuerza y ​​las uñas del coronel perforaban su piel.

“Estás desesperado, ¿eh?” Konig se rió, "¡Qué puta!" Gimió, enterrándose hasta el fondo en Ghost, el hombre debajo de él casi gritaba en una mezcla de placer y dolor mientras un palo caliente cubría sus paredes internas, haciéndolo temblar y contraerse cuando Konig se retiró, murmurando algo en alemán. Ghost estaba temblando como una hoja, incapaz de mantenerse en pie y apenas capaz de formar una puta frase.

"Joder..." Ghost gimió, dejando caer su cuchillo táctico, su agarre era demasiado débil para sostener algo. "Tú, eh, no tendrás ropa de repuesto, ¿verdad?"

"De hecho sí lo hago." Konig sonrió bajo su máscara de francotirador, su voz irritantemente satisfecho consigo mismo. “¿Te importaría que los agarrara?”

"¡Sí!" Espetó Ghost, y los sentidos regresaron rápidamente a él. "Por favor." Añadió en voz baja.

Konig soltó una risita, sacando a Fantasma de su ropa manchada y ayudándolo a ponerse la ropa limpia, que era un poco demasiado grande para él. "Demasiado para ser un 'militar misterioso', ¿eh?"

"Callarse la boca."

"Vamos, todavía tenemos una misión que cumplir, ¿no?"

"..Mierda."