Capítulo 4: Cause all of me

281 11 2
                                    

Loves all of you.

-Señorita Grey llega tarde otra vez, a la próxima no le dejaré pasar.
-Perdone profesora, no volverá ocurrir - mis mejillas de repente tomaron un color rojizo debido a todas las miradas puestas en mi.
Me senté en mi sitio maldiciendo al tornillo donde acababan de engancharseme los pelos.
- Parece que a alguien se le han pegado las sabanas, dime si me equivoco, Tess.
De repente levante la vista tras escuchar esas palabras y lo tenia girado en su sitio habitual, hablándome con su también habitual tono prepotente.
- La verdad es que no te importa - odiaba ese tono, no entendia su forma de ser. Unos días parecía un chico menos insoportable que hasta parecía que se preocupaba por tí, y al día siguiente hay lo tienes tan arrogante como de costumbre.
- Vaya parece que no sólo se te han pegado, las sábanas a alguien le ha venido la dama de rojo a visitarla - se giró mostrándome su sonrisa de superioridad, y cuando me decidía a contestarle, nuestra querída profesora de matemáticas, la cual tenía la cara mas redonda que una pelota, nos mando callar amenazando con echarnos fuera de clases.
(...)
- La verdad no entiendo como le sigues ayudando, no se lo merece, mira como te trata, Tessa por lo que más quieras razona - la cara de mi amigo Dev, me dejaba claro junto con sus palabras que estaba empezando a enfadarse, por lo "tonta" que según el estaba siendo.
- Dev... porfavor dejalo estar ¿si? Da igual..
- Maldita sea Tessa, no da igual. Pareces su juguete al cual pisa y recoge cuando le viene en gana y todo el mundo ya lo ha notado, eres la única que parece no darse cuenta - dió un golpe a la pared y sabía que era mejor que me quedara callada ya que en el fondo sabía que tenía razón.
Después de la discursión con mi mejor amigo australiano, Dev, que se había venido a vivir a mi ciudad con 6 años, empece a plantearme dejar de hablarle a ese mal encarado de Daniel. Pero el diablo que pocas veces duerme, no quiso que las cosas fueran así.
CLICK
Supuse que sería mi amigo Dev el cual se había arrepentido de ser tan brusco conmigo, ya que no era la primera vez que habíamos discutido por este tema y el me había mandado un mensaje pidiendome perdón.
Cuando deslice la ventana de notificaciones, lei el último nombre que quería leer en eses momentos. Daniel.
( Eeh, oyes Tess igual me pase contigo esta mañana) 16:30
No pensaba contestarle, quien se creía que era. Pero esa idea me duro poco tiempo cada vez que desbloqueaba el móvil mis manos se iban directas a su conversacion, estuve bloquea y desbloquea hasta que finalmente le conteste.
(Vaya, y ya está, piensas que es soltarlo así y quedarte tan ancho, las cosas en el mundo real no funcionan así) 17:00
(Vengaaaa Teeess, no te enfades ¿ a que me pasas los deberes de inglés, que hay para mañana)
No me lo podía creer, ese chico era un cara dura. De repende desee que hubiera escrito aquello y cerré los ojos, notando como mis lágrimad recorrian mis pómulos hasta caer en la palma de mi mano, que se encontraba apoyada en mi cama.
Estaba frustrada, enfadada, me sentí engañada por pensar que en algún momento le había importado a aquel gilipollas. Sus "Buenas noches" con ese maldito corazón eran tan falsas como un billete de un euro.
Ya había tenido suficiente por ese día, lo deje en leido que supiera que lo había leido y que no le iba contestar, que ya no me podía manipular más.
Me puse los auriculares, para recurrir a mi vía de escape la música. A través de ellos empezó a sonar Born To Die de Lana Del Rey, amaba esa canción.
"CLICK"
Si era él, juro que lo bloqueearía o lo mataría por prepotente o no s..
(Eh, a quien no sabes quien se va disculpar por decirte todo eso esta mañana, en el fondo es tu vida pero tienes que comprender que me preocupe por ti, para eso están los mejores amigos ¿no?)18:09
Sabía que ese australiano rubio, que tenía por amigo acabaría disculpándose. Era un cielo.
( Eh Dav tranquilo, está bien, tienes razón...) 18:10
(Perdón por tardar me estaba duchando, ¿Qué? Me estás dando la razón... se puede saber que cojones ha pasado ya, es que le voy acabar partiendo la cara, a ese intento de módelo fallido) 20:06
Sonreí, ahí estaba mi mejor amigo dispuesto a atacar a la mínima por mí.
( Dav... da igual.. lo de siempre ya sabes como es) 20:07
( Se como es y te avise, pero como siempre no me has hecho caso, me vas contar ahora mismo que ha pasado, antes de que tenga que sacárselo a él a golpes)
Mis dedos se movieron con nerviosismo sobre mi móvil hasta darle a enviar con un "Está bien, pues..."
(...)
Después de contárselo las palabras de mi mejor amigo habían sido exactamente un sin fin de "lo voy a matar" "te lo dije" y "es el hijo de puta más grande del mundo" entre una infinidad de insultos. Al final habíamos quedado en que el no se iba a meter y que yo y sólo yo me iba a encargar del asunto, a pesar de sus replicas respecto a sus deberes de mejor amigo de los cuales según él lo estaba apartando.
(...)
Día siguiente 7:20
Mi canción favorita de Coldplay suena a todo volumen, indicándome que es hora de levantarse.
Pensé para mí, que sería genial que dejara de poner como despertador mis canciones favoritas, ya que acabo odiándolas.
Miro el móvil, tengo un mensaje de Dev diciéndome que le timbre cuando vaya para clases.
(...)
- Alegra esa cara, hoy es nuestro último examen antes de las vacaciones de Navidad - se notaba en la voz de Dev que la idea de la navidad, volviendo a Australia con sus abuelos y familia le encantaba.
- Sabes que a mi no me hace tanta gracia, porque estaré sin verte como veinte días - coloqué dos de mis dedos en la sien en un amago de pistola.
- No seas dramática, sabes que me encantaría, quedarme aquí, y conocer la verdadera Navidad blanca, no con sol en la playa. Además hablaremos por skype todos los días, prometido.
- Eso espero Collins, o cuando vuelvas te saltaré a la yugular - dije, apuntándole con un dedo intentando parecer lo más seria posible, hasta que finalmente me dió la risa.
(...)
Entramos en clase con toda la charla de mi mejor amigo se me había olvidado a la realidad que me esperaba ahí dentro, el engreido de Daniel.

LeinadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora