I.

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Luciana POV;

Esta tarde después del trabajo iría con Daniela, mi mejor amiga a un antro que nos habían recomendado.

Era recepcionista en el hotel de mi padre, después de graduarme en la universidad mi sueño era tener mi propio restaurante de sushi, un lugar de comida asiática pues era mi favorita y además de que me encantaba cocinar.

Aunque mi padre tenía el dinero suficiente para ayudarme le había propuesto ayudarle en el hotel para generar dinero y así lograr lo que anhelaba.

Ya tenía cerca de un año trabajando aquí y todos los demás empleados me consideraban su compañera pues nunca me he aprovechado de mi papel como hija del dueño de este hotel.

-Ey Luciana, ven -me gritó el señor Juan quien era el chofer de mi padre-
-Que pasa tío? -pregunte-
-Tú hermano me envío a recoger a un cantante al aeropuerto es solo que no podemos exponerlo tanto, porque quiere evitar por completo a la prensa -explico-
-Pero no hay ninguna reservación? -dije confundida-
-No ha surgido de un momento a otro, pero tu hermano ha dicho que le des la presidencial y le lleves botellas y comida de cortesía -dijo y asentí-  
-Cuánto tiempo tengo? -pregunte-
-Llegara en dos horas, viene de Mexico y es todo lo que se -respondió-
-Gracias tío, iré a hacerlo y conduzca con cuidado -dije y sonrió-

Llame al encargado de cocina para pedirle que preparara bocadillos y las botellas para llevarlas a la habitación.
También mande a tres camareras para que arreglaran la habitación y dejaran todo listo.

Me causaba intriga saber quien llegaría, estábamos acostumbrados a recibir personas importantes y este,
parecía ser alguien muy famoso.

Termine algunas cosas mientras el nuevo huésped llegaba, tenía mucho trabajo porque el gerente del hotel ósea mi hermano se había enfermado y me había quedado con la responsabilidad de él como gerente del hotel.

-Señorita Luciana el nuevo huésped está entrando -dijo el botones y le agradecí-

Arregle mi saco y mi falda la acomode, me vi en el espejo que tenía por mi computadora.
Me acomode entre la entrada del hotel para recibirlo.

Abrieron la camioneta dejándolo bajar, vi sus tenis de colección y lo que me deslumbró fueron sus cadenas con brillantes.

Lo vi, tratando de saber quien era detrás de lo lentes Prada.

Entró, mientras bajaban su equipaje.
Su equipo consistía en dos chicos más, su silueta y forma de la cara eran algo conocidas pero no sabía de donde quizás alguna vez lo habría vista en la televisión o en mis redes sociales.

Sonreí, señalé para que entrará.
-Buenas tardes, es un gusto recibirlo aquí -dije- el señor Villa me ha comentado que no quiere a ningún periodista ni la prensa
-Exacto, solo mantenlos fuera de mi vista
-pidió en un tono algo frío y asentí-
-Claro señor, puedo llevarlo a la habitación si usted lo prefiere -mencioné y volteó a ver a los otros chicos que venían con el-

-Ashee -dijo y me paralice-
Voy a completar algunos datos para registrarnos, puedes ir a la habitación
-Ella va a llevarme -dijo viéndome y asentí nerviosa-
-Claro no hay problema -dije tratando de sonreír-Puedes hacer el registro con calma
-Gracias, más tarde subo Ashee -dijo y asintió-
-Vamos señor -dije guiándolo hasta el elevador-

Toque el botón para subir y después de unos segundos abrió, el me dejo pasar primero y después entró.
Presione el número donde estaba la habitación, no podía suceder esto.
No, no hay manera que de todas los hoteles de Los Ángeles, él tenía que estar aquí.

-Como te llamas? -preguntó y me debatí en decir mi nombre real-
-Puede buscarme como Señorita Villa -mencione y rió-
-Tanta confidencialidad entre los empleados -dijo y sonreí forzadamente-
-Son las políticas del hotel -mencione mintiéndole-

Rockstar. JUNIORHDonde viven las historias. Descúbrelo ahora