Todo por ti...

Capítulo I: Un deseo y un sueño

- ¿Estás realmente segura de que esto es lo que quieres? - preguntó Laura a su amiga con preocupación impregnada en cada palabra.

Laura estaba sentada frente al escritorio de su amiga, mientras observaba los panfletos y folletos informativos, llevaban discutiendo este tema cerca de una hora y aún tenía problemas asimilando esta información.

- Si, lo estado meditando y analizando y son mis únicas opciones - respondió afectada.
- Solo tienes veintiocho años Poché, tienes mucho tiempo - argumentó Laura trancando de hacerla entrar en razón.

Poché soltó un suspiro resignado.
- Nadie puede garantizarme eso y lo sabes- respondió finalmente.
- ¿Cuál es la urgencia de hacer esto ahora mismo? - preguntó Laura desesperada - tienes una carrera exitosa, tienes buenos amigos y muchas cosas pasando para ti ahora en mismo, es solo que no lo entiendo- concluyó desesperada

Lo cierto es que su grupo de amigos "los pollos", como se autodenominaban,  vivían en Miami, llegaron a probar suerte y les había ido mejor de lo que esperaban.

Los pollos, lo estaban logrando en una de las ciudades mas importantes del entretenimiento, eran un grupo de jóvenes colombianos que estudiaron juntos en la escuela de teatro musical, Misi, donde tuvieron la fortuna de coincidir y donde formarían lazos que los unirían de por vida.

Daniela Calle, convertida en una exitosa y versátil cantante y compositora. María José Garzon "Poché",  una de las más aclamadas directoras, una mente creativa fascinante. Laura y Lucia Villa, lanzándose a la fama con su propuesta musical original "las Villa". Johan Vera, inspirado cantautor, alcanzando cada vez más popularidad.  Juancho Muñoz y Juan García, dueños de unos de los sellos discográficos más conocidas, "Mun". Alejo Valencia encargado de corografiar conciertos enteros a muchos cantantes famosos. Daniela Abisambra "Abi", dedicada al periodismo, apasionada de los podcast. Juliana Velasquez, triunfando en Colombia con la música, ganadora de un Grammy. Kim de Sutter, madre dedicada de tres hijos, revolucionando las redes sociales. Mariana Camacho, reviviendo la ópera en Nueva York. Era seguro decir entonces, que eran un gran referente y orgullo en su antigua escuela "Misi".

Poché, interrumpió el silencio que se había formado, frotándose la parte posterior de su cuello, perezosamente.
- Esto tomará tiempo - dijo Poché finalmente- podría no suceder en la primera oportunidad, y entre procedimiento y procedimiento deberé esperar. - explicó tomando la mano de su amiga - Lau eres una mujer inteligente se que me entiendes.
- ¿Que hay de hacerlo de la forma tradicional, ugh? ¿Es que no lo piensas siquiera considerar? - debatió Laura usando sus últimas opciones.
- En serio Lau, ¿A quién podría pedirle hacer algo tan importante y complicado como esto? - respondió resoplando Poché.
- Tenemos muchos amigos Pochas, estoy segura de que alguno estará dispuesto a ayudarte- intenta Laura
- Johan y tu por fin se están dando una oportunidad, así que descartado. Juan y Juancho están casados, así que no cuentan. Alejo está empezando su relación, no podría pedirle esto. No hay nadie.- respondió Poché frustrada.
- Si, si lo hay -  respondió con terquedad Laura
- Ni lo pienses- se apresuró Poché amenazadoramente - sería completamente injusto con ella - concluyó.
- ¿Porqué? Es tu mejor amiga, ella te ama y tu a ella, sabes que haría cualquier cosa por hacerte feliz. Además esta soltera, lo ha estado por un tiempo. - le recordó gentilmente Laura
- ¡Absolutamente no! - respondió Poché
- Sería ideal, es la mejor candidata. ¡Deja de ser tan terca María José! - pidió Laura prácticamente suplicando.
- No hay forma que le pida a Calle ayuda con esto. Ella tiene suficientes complicaciones en su vida como para agregar esto. - argumentó Poché con fastidio - Finalmente puede relajarse y vivir su vida sin que ningún idiota amenace con exhibir su condición cada cinco minutos - concluyó con un susurro.
- Tienes razón sobre eso, pero todo ello ya pasó ahora. Una vez que decidió ser valiente y no ocultar esa parte de ella misma, se encaminó a una vida más feliz- aceptó Laura - pero, ¿Qué es lo que más anhela Street en su vida? - sin darle oportunidad de responder continuó- tú sabes mejor que el resto cuál ese ese sueño, ¡Al dejarle ayudarte estarías cumpliendo su deseo también!- termino exaltada Laura
-  No, no lo haré Lau. Es por eso que tome estas dos opciones. No quiero compromisos y si ella se involucra los habrá de alguna manera - refutó Poché empecinada.
- Lo siento Pochas, pero eso es una mentira. Te conozco. Hemos sido buenas amigas por años, y se lo mucho que quieres tener a alguien que te pertenezca- dijo Laura con suavidad- si quieres estar en negación, adelante. Pero no creas ni por un minuto que puedes engañarme.
- No se ni para que te dije esto en primer lugar, es obvio que fue un error- exclamó Poché, recogiendo los panfletos de la mesa. Laura ni si quiera pestañeo y no se dio tiempo de estar ofendida.
- Me dijiste porque, aparte de Calle, soy la única persona en el mundo, con el coraje, capaz de decirte las cosas en la cara- respondió Laura con una sonrisa serena, los años le enseñaron a no perder la paciencia con su terca amiga.
- Debe ser porque las dos tienen deseos de muerte- masculló Poché, mientras Laura soltaba una carcajada, dejando atónita a Poché
- Nada que ver. Todos te conocemos y más importante te amamos, no nos asustamos con ese carácter que te manejas por que sabemos que en el fondo eres una ternura. - continuó Laura en medio de pequeñas risas- no dejas que otros te vean vulnerables y tus necesidades de mujer. Eres una fiera en el plató y cuando tienes una cámara delante, completamente implacable, por ello te respetan y todos anhelan trabajar bajo tu dirección.
- Exageras - dijo Poché, moviendo la mano en señal de desprecio.
- No, no lo hago. Tus compañeros de trabajo están asombrados de ti. Tus amigos te aman y admiran. Tu papá no podría estar más orgulloso. Mira a tu alrededor si no me crees- ordenó Laura mientras señalaba las paredes.