Parte 28. La locura 2

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Lee y Sho llegan desesperados al hospital, viendo a todos lados tratando de ubicar a sus hombres, una vez lo visualizan se acercan a ellos.

Quién habla primero demandando respuestas es Sho, quién no puede ocultar o disimular su desesperación.

– ¡¿Qué pasó?!, ¡¿quién se llevó a mi mujer?!– tiene los ojos rojos, el cuerpo le tiembla y está sudando por la angustia, el líder del equipo es quién le responde–

– Señor – respira profundo para poder continuar– Estábamos en el club, la señora estaba al principio sola con la señorita Choi Dam– Eun, al rato llegó el señor Fuentes. La señora y ellos tomaban y conversaban de lo más normal. – Sho y Lee miraban expectantes al hombre– Luego la señora y el señor Fuentes bajaron a la pista y dos de nuestros hombres bajaron con ellos, de un momento a otro comenzó un juego de luces dejando entre oscuro y alumbrado el lugar, a los pocos minutos, todo quedó sumergido en la oscuridad y la música estaba alta nunca dejó de sonar, pero cuando todo se iluminó después de varios minutos vimos que la señora y el señor Fuente no estaban, comenzamos a buscar por todo el lugar y no le encontramos, salimos y uno de los hombres que teníamos en el estacionamiento con el auto , llegó a nosotros y nos informó que los agredieron, matando a su compañero y a él le hirieron gravemente. Él vio cómo se llevaron a la señora desmayada en una camioneta y como sacaban a sus amigos en otra.

– ¡maldita sea! – Sho se pasa la mano por el cabello halándolo– ¡continúa ¡– demanda molesto–

– La camioneta donde se llevaron a la señora– el hombre está nervioso y muy asustado ya que tanto Sho como Lee están que estallan– se nos perdió señor, nunca tuvimos oportunidad, todo lo tenían listo y planeado... – suspira derrotado– nos segaron al quitar la luz.

Sho se gira y comienza a caminar de un lado a otro mostrando impotencia, no sabe que hacer se ve perdido y rabioso.

Lee por su parte respira profundo y le pregunta al chico

– Lograron identificar a alguien, o – reformula la pregunta– ¿Sospechas de alguien?

– Sí– el hombre muestra cierta esperanza– vimos al señor Chang y sus hombres – se pasa la mano por el cabello– es uno de sus clubes.

Ahora es el turno de Lee en maldecir, se gira y mira que Sho tiene la cabeza baja y está recostado de la pared, de un momento a otro va a colapsar. Levanta el celular para llamar a sus contactos en la policía.

– Bo Gum, necesito tu ayuda, acaban de secuestra la señora Lucia Fuenmayor, por favor necesito que esto se investigue anónimamente, ¿si me explico? – comienza a caminar en dirección a la salida– por favor infórmame lo que logres averiguar, sospechamos que fue Hung Chang Soo– dice bajando un poco el tono– te enviaré mi ubicación para que puedas venir.

– Ok – responde su amigo buscando en la computadora información– voy a contactar a mi gente y salgo para allá.

Lee vuelve sobre sus pasos y se acerca a Sho

– Sho, fue Chang, ese bastardo es el único que me viene en mente. – se coloca las manos en la cintura–

– ¿No sé qué hacer?,– se toca el pecho– siento una presión en el pecho que no me deja pensar. No quiero ni imaginarme que le estará haciendo ese maldito – se voltea y golpea la pared, Lee detiene el segundo golpe y lo abraza–

– Cálmate, que la vamos a encontrar antes que ese maldito le haga daño– Dice apretando los dientes– Vamos tenemos que hablar con Daniel y Dam para terminar de organizar lo que vamos hacer–

Sin tiempo para llorarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora