𝐖𝐈𝐋𝐃 -【𝘛𝘦𝘦𝘯 𝘸𝘰𝘭𝘧】

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟏𝟑. 𝚁𝚎𝚜𝚌𝚊𝚝𝚎

"𝐖𝐈𝐋𝐃" (𝐓𝐄𝐄𝐍 𝐖𝐎𝐋𝐅)

||𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝟏𝟑||

"𝚁𝚎𝚜𝚌𝚊𝚝𝚎"

Ya en el bosque, nos adentramos los cuatro en busca del auto del accidente del que nos había hablado Noah. Scott consultaba el mapa en su teléfono mientras nos guiaba en silencio.

La tensión y la incomodidad entre Isaac y yo se palpaban en el ambiente, aunque parecía que Stiles y Scott, que caminaban adelante, estaban completamente ajenos a lo que sucedía entre nosotros.

Después de buscar un rato, finalmente encontramos el viejo auto en el fondo de un pequeño barranco. Había una cueva con trapos y una muñeca vieja. Era evidente que la cueva pertenecía a un coyote.

Scott divisó al animal escondido entre las sombras a lo lejos y lo siguió, con Isaac y yo siguiendo sus pasos. Cuando los tres nos encontramos frente a frente con el coyote, sus ojos brillaron, dejándonos perplejos ante la posibilidad de que el coyote fuera Malia.

En la casa de Allison, Isaac, la chica y yo, guardabamos las armas.

"¿Creen que podrán encontrar a Malia? De lo contrario, estaremos en el bosque durante mucho tiempo." dijo preocupada.

"Yo tengo su aroma bien localizado." respondí.

"De hecho, es muy fuerte." agregó Isaac.

"¿Qué es?" preguntó Allison.

"Orina." respondió el rubio.

"¿Qué pasa?" pregunté, confundido. "Alli... ¿Allison?" pregunté, notando su expresión.

"No, no sé qué pasó. Lo lamento mucho. No sé qué estaba haciendo. Lo lamento." murmuró Allison, evidentemente angustiada por algo que le había sucedido.

"Es mejor que las dagas de aro, creo." comentó Isaac, tratando de tranquilizarla.

"¿Cómo se supone que pueda ayudar a alguien estando así? ¿Qué se supone que debo hacer?" se preguntó Allison, con la voz llena de frustración.

"Alli, deja que te ayudemos" dije, tratando de reconfortarla.

Regresamos al bosque, con el sol apenas asomándose en el horizonte.

Stiles y Lydia bajaron del jeep, Scott de su moto, Allison, Isaac y yo del auto de la castaña.

"¿Alguien más piensa que estamos haciendo más mal que bien?" preguntó Stiles, con cierta preocupación.

"Estamos tratando de evitar que un padre mate a su propia hija" respondió Scott.

"De hecho, estamos tratando de evitar que un hombre mate a un coyote que de hecho es su hija... la cual no sabemos cómo transformar de coyote a humano, pero..." añadió Isaac.

"Y de nuevo, no nos ayudas", bromeó Stiles.

"¿Lo trajiste?", pregunté a Allison, refiriéndome al arma tranquilizadora.

Allison sacó el arma del maletero del auto.

La manada se separó, en busqueda de Malia.

Corrimos los tres en dirección al coyote, siguiendo su rastro. Isaac y yo seguíamos el aroma, mientras Allison nos seguía con el rifle en mano.

Un disparo de escopeta nos hizo correr más rápido.

"Chicos, esperen" gritó Allison.

Ambos corrimos con más fuerza, hasta que sentí un fuerte dolor en mi tobillo. Dejé escapar un grito de dolor y me quedé inmóvil en el suelo. Isaac, que iba delante de mí, frenó bruscamente y se agachó para ayudarme.

"Dios mío, mierda, mierda", exclamó Isaac, visiblemente preocupado.

"Lucas", me llamó la castaña, mostrando su preocupación.

"No se preocupen por mí, ahí está", señalé con dolor. A lo lejos, Tate sostenía un rifle apuntando al coyote.

"Dale a Tate, usa el tranquilizante con él", dijo Isaac, mientras intentaba ayudarme con la trampa para osos que tenía atorada en mi pierna.

"Espera, aún no", le dije, luchando contra el dolor. Aunque me dolía horriblemente, quería que Allison se concentrara. "Allison, respira", le recordé entre gruñidos.

"Protegemos a quienes no pueden protegerse a sí mismos", suspiró Allison, mientras respiraba lentamente y luego disparaba, alcanzando al hombre en el brazo. Sonreí, orgulloso de Allison. "Chicos, ya no está", anunció, buscando a Malia, que había escapado.

Isaac intentó ayudarme de nuevo, pero en medio de eso, un rugido de alfa resonó en el aire. Nuestros ojos brillaron y nos transformamos, rompiendo ambos la trampa.

Caí al suelo, aún adolorido por el hueso de mi pie que creía se había roto.

"¿Estás bien?", preguntó Isaac con preocupación.

"Sí, sanará", respondí, tratando de tranquilizarlo, mientras Allison y él me ayudaban a levantarme del suelo.

Mi pie ya había sanado y los demás ya se habían ido, solo quedabamos Stiles y yo en la patrulla. Los dos observabamos como Noah regresaba a una Malia humana a su casa. Tate no podía creer que su hija estaba frente a él. Solo me hizo pensar en como me gustaría volver a ver a mi hermana nuevamente. 

Decidí dejar pasar aquellos sentimientos y me concentre en el presente. Agradecía tener a los Stilinski, ya no estaba solo. 

"¿Todo esta bien?" Pregunté a Stiles que miraba concentrado algo en el vidrio de la camioneta. 

"Ya puedo leer." Sonreí y le palmee el brazo con felicidad. 

Él suspiró y se relajó en el asiento del copiloto. Yo lo imité y me recosté cerrando los ojos. Al final romperme un hueso había valido la pena.