FESTIVIDAD INTERRUMPIDA

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24 de Diciembre
Musutafu, Japón

Kate Kane divisó a través de la ventana trasera del automóvil un entorno al que era ajena. Ante esto, no tardó mucho en adentrarse en las inmediaciones del lado sur de la ciudad, en donde los rascacielos, concurridas calles y la multitud de personas a los que ya se había acostumbrado eran reemplazadas por el entorno natural de la región.

Un largo camino de carretera a orillas de un natural cuerpo de agua conducía al lugar que ahora mismo era su destino: la residencia principal de los Shield.

El resto de los niños con quienes compartía asiento mostraban un mayor entusiasmo, expresando en voz alta dicha emoción con cada nuevo elemento del que podían ser testigos. Por ende, Kate pudo inferir esto mismo se repetía en el resto de los vehículos, tanto delante como detrás del cual iba a bordo, 

No pasó mucho para que todos estos pudieran detenerse en una sola fila para su ingreso a través del enorme portón que daba la bienvenida hacia los confines de la residencia, cuya arquitectura a perspectiva de la pelirroja era muy distinta a la modernidad, o incluso al estilo nipón clásico que algunos lugares de Musutafu todavía conservaban. 

En cambio, su diseño era similar al que ella imaginaba al leer o escuchar historias del viejo mundo, en donde las edificaciones que se describían en ellas ocultaban grandes misterios.

Pero dejó estos pensamientos de lado en cuanto pudo observar más de cerca el sitio, mismo el cual ya comenzaba a ser rodeado por la cuantiosa cantidad de invitados, entre ellos héroes profesionales fuera de servicio.

Encontrándose fuera de su zona de confort, miró una vez el vestido color aguamarina que llevaba puesto, mismo que Rina le había regalado en su último cumpleaños y que ahora podía usar por primera vez.

Por otro lado, para Rina el hecho de dirigirse a un evento de la élite de Musutafu seguía siendo que la desconcertaba. Después de todo, fue apenas esta misma semana cuando fue contactada por Izuku Midoriya para solicitarle una reunión, a través de la cual este demostró sus intenciones para proporcionarle mayor apoyo a través de la fundación que llevaba su apellido.

En cualquier caso, el que ella y los niños a su cuidado fueran invitados para asistir al evento anual de Shield Enterprises no era algo que le pareciera acorde, negándose en primera instancia.

Pero en propias palabras del pecoso, desconcertar a la élite con un acto benéfico sería más divertido que escuchar las mismas conversaciones triviales de todos los años.

Así entonces, la amabilidad de su trato, sumado a las facilidades que les dio —tal como una cuantiosa donación al orfanato que entregó de forma inmediata— fueron aspectos que terminaron por convencer a Rina de llevar a sus tutorados al evento benéfico como un gesto de agradecimiento y sellar la unión entre ambas partes.

Para evitar retrasos y un exceso de concurrencia en la puerta principal, los chóferes detuvieron los vehículos más allá de los patios laterales, siguiendo el camino de concreto que rodeaba la mansión de los Shield. A continuación, el personal contratado para el evento pronto se encomendó a la tarea de guiarlos por otro de los accesos al sitio, concordando con las instrucciones de Izuku y Melissa con darles a todos ellos un recorrido por sus interiores.

En los minutos siguientes, Rina tuvo que poner más empeño que nunca para poder mantener el orden en aquella veintena de niños que caminaban por las opulentas salas, cuidando que no se perdieran de vista o incluso causaran algún daño en la decoración la cual era claro que valía una fortuna.

Izuku Midoriya / The BatmanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora